Varios gobernadores de provincias patagónicas de Argentina se reunieron para definir si interrumpen el abastecimiento de gas y petróleo a la capital en protesta por las acciones en materia de fondos del Ejecutivo, liderado por el presidente Javier Milei. 

El gobernador de Chubut e integrante del partido Propuesta Republicana, Ignacio Torres, precisó que el encuentro tiene lugar tras amenazas de Milei de llevarlo la Justicia.

"Tomaremos una decisión en conjunto, pero estamos cansados de la agresión", afirmó.

Junto a otros jefes de Gobierno de los territorios patagónicos, Torres publicó la víspera un comunicado en el que criticó la decisión de Milei de recortar las transferencias correspondientes.

Nadie puede someter ni extorsionar a las provincias con amenazas de restricción de fondos públicos que les pertenecen, indicó.

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De acuerdo con el texto, en febrero el Gobierno nos retuvo ilegalmente 13 mil 500 millones de pesos (más de 16 millones de dólares), más de un tercio de nuestra coparticipación mensual, señaló el texto.

Además, indicó que las acciones del jefe de Estado son una revancha por el fracaso en la Cámara de Diputados de la conocida como Ley Ómnibus, la cual disponía la delegación de facultades legislativas en el presidente, la declaración de un período de emergencia y otras medidas.

Más de 600 mil personas en Chubut ven afectados su derecho a la educación, la salud, la seguridad y el desarrollo. También de manera ilegal, retuvieron las cantidades destinadas al Fondo Compensador de las tarifas del transporte público, explicó el comunicado titulado Las provincias unidas del sur.

Según el escrito, son recursos procedentes del impuesto a los combustibles y tienen una asignación específica y solo una ley podría disponer otro destino.

El mensaje fue firmado además de Torres, por los gobernadores de La Pampa, Neuquén, Tierra del Fuego, Santa Cruz y Río Negro.

A propósito, movimientos sociales y organizaciones barriales reclamaron en una movilización popular alimentos para los más de 40 mil comedores populares de todo el país, que no reciben suministros desde diciembre, y por un aumento en los planes de asistencia social.

La confrontación de los gobernadores con la Casa Rosa ocurrió a solo horas de la estancia en Buenos Aires del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.