EE.UU. dice presionar a “Israel”, pero no corta el suministro de armas
La Casa Blanca estudia opciones para llevar alguna ayuda a la población sitiada, en lugar de quitarle el apoyo político al gobierno sionista y además respaldar a las organizaciones humanitarias que intentan detener la hambruna en el norte de Gaza.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, asegura presionar a "Israel" para que lleve más ayuda a la Franja de Gaza y reduzca la intensidad de sus ataques, pero "no llegó al punto de cortar los envíos de armas", comentaron a la NBC varios funcionarios de Washington.
Según aseguraron las fuentes a esa red informativa, la Casa Blanca estudia opciones para asistir a la población gazatí, incluida la construcción de un muelle flotante o un puente marítimo temporal frente a sus costas, para facilitar las maniobras de los barcos con suministros humanitarios.
Tal promesa requeriría la participación de otros países o agencias internacionales, para asegurar el área y transportar la ayuda a tierra, apuntaron los funcionarios.
De acuerdo con sus informes, el Consejo de Seguridad Nacional pidió al Pentágono sugerencias para entregar más ayuda, tras el envío de algunos aviones hace unos días.
El medio citó a funcionarios optimistas en cuanto a que el gobierno de "Tel Aviv" pudiera ser persuadido de lo perjudicial de su estrategia de guerra para el propio "Israel", a largo plazo.
Muchos demócratas en el Congreso norteamericano y gobiernos extranjeros exigen de Biden más presión sobre el gabinete sionista, pues bien pudiera amenazarlo con cortarle la ayuda militar o retirarle el apoyo diplomático en las Naciones Unidas si no detiene el genocidio.
Como ponderó, estas medidas serían suficientes para convencer al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de reducir los ataques y abrir el camino a los convoyes humanitarios.
Mientras, en Gaza el número de muertes por hambre y desnutrición aumentó en los últimos días en niños y adultos, y se espera un empeoramiento, tras cinco meses de asedio, sobre todo en el norte de la Franja.
Varias agencias internacionales advirtieron todos los días sobre el peligro de una verdadera catástrofe para el pueblo gazatí, pero el ejército de la ocupación intensifica el cerco, con la venia de la administración estadounidense.
Pese a sus discursos y llamados a la moderación, Biden proporciona armas y municiones a la entidad genocida, y a la par autoriza lanzamientos aéreos de "ayuda", para encubrir sus crímenes y aumentar el caos en quienes intentan acceder a esos paquetes en tierra.
El director de la Oficina de Información del Gobierno en Gaza, Ismail Al-Thawabta, reiteró este lunes la inconveniencia de ese método aleatorio para distribuir la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza.
“La solución ideal consiste en traer mil personas con cientos de camiones a diario”, demandó el funcionario.
Por su parte, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas, afirmó que una cuarta parte de la población de la Franja (576 mil personas) está a un paso de la hambruna, cinco meses después del inicio de la agresión israelí.