Libia prepara un convoy médico de socorro compuesto por 20 ambulancias para enviar desde la ciudad de Misrata rumbo al cruce fronterizo de Rafah, en Egipto, con vistas a brindar apoyo sanitario a los palestinos en la Franja de Gaza.

Esta iniciativa forma parte del esfuerzo popular Palestina es nuestra causa, cuyo propósito es aliviar el sufrimiento del pueblo y compensar el colapso del sector sanitario en ese enclave, resultado de la agresión de “Israel” y la deliberada destrucción de su infraestructura, incluidos hospitales y centros de salud.

La crítica situación de las instalaciones sanitarias en la Franja fue reconocida por el periódico estadounidense The New York Times, así como su carácter sistemático e intencional, describieron organismos internacionales y humanitarios.

Desde el incio de los bombardeos, seis meses atrás, las fuerzas sionistas destruyeron hospitales enteros, inutilizaron ambulancias y mataron o detuvieron a cientos de trabajadores de la salud, resumió el diario neoyorquino.

Noticias Relacionadas

Colombia acogerá cumbre urgente del Grupo de La Haya sobre Gaza

Misión de la ONU en Libia pide calma inmediata en Trípoli

Grupos de socorro confirmaron las restricciones israelíes a la entrada de recursos para la población gazatí, así como la distribución de suministros médicos vitales, además de cortar las entradas de combustible, agua y alimentos, lo cual dificulta a los trabajadores médicos proporcionar servicios básicos, imprescindibles en estas circunstancias.

Ya es inevitable el colapso del sistema de cuidados médicos que atendía a toda la población de Gaza, ascendente a más de dos millones de personas, advirtió el medio de prensa.

A finales de marzo, 10 de 36 hospitales estaban en funcionamiento mínimo en toda la Franja, denunció la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En fecha reciente, el portavoz del Ministerio de Salud palestino, Ashraf Al-Qudra, denunció que más de 730 mil personas en las regiones central y del norte de Gaza carecen de servicios sanitarios reales.

Calificó la destrucción del Complejo Médico Al-Shifa de “duro golpe al sistema de salud”, y pidió el suministro de hospitales de campaña y equipos médicos internacionales multiespecializados para enviar con urgencia a las zonas más necesitadas.