Boicot demócrata al discurso de Netanyahu ante Congreso de EE. UU.
El discurso pronunciado por el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, provocó la ira entre los representantes demócratas en Estados Unidos, casi la mitad de los cuales boicotearon el discurso.
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Primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, en el Congreso de Estados Unidos en 2015 (Agencias)
Casi la mitad de los demócratas del Congreso de Estados Unidos boicotearon el discurso del primer ministro de “Israel”, Benjamín Netanyahu.
La expresidenta de la Cámara de Representantes y representante por California, Nancy Pelosi, se destacó entre los legisladores que rechazaron escuchar las palabras de Netanyahu.
Sobre el discurso dijo que se trató de “la peor presentación jamás realizada por un funcionario extranjero ante el Congreso”.
Igual posición asumieron el exlíder de la mayoría de la Cámara de Representantes, Jim Clyburn, y la representante demócrata por Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez.
"Se llenaron los asientos con personas que no eran miembros del Congreso, como se hace en las entregas de premios, para demostrar que se obtuvo plena asistencia y apoyo”, manifestó Ocasio- Cortez.
Por su parte, el senador demócrata Benny Sander confirmó en una publicación en la plataforma X que los israelíes “quieren que Netanyahu salga del gobierno, por lo que vino al Congreso para realizar una campaña (en la que se promociona a sí mismo).”
Sanders añadió que Netanyahu "no sólo es un criminal de guerra, sino también un mentiroso".
En cuanto a la representante demócrata “progresista”, Rashida Tlaib, asistió al discurso pero expresó al mismo tiempo su protesta mientras levantaba una pancarta para acusar a Netanyahu de cometer genocidio.
Durante declaraciones a la cadena MSNBC, el representante demócrata Jerry Nadler confirmó que “el discurso de Netanyahu no fue sincero”.
Nadler subrayó que primer ministro "quiere que la guerra continúe el mayor tiempo posible y no busca devolver a los prisioneros" por lo que pone más obstáculos a un acuerdo de intercambio.
Y añadió: "Netanyahu sabe que se enfrentará a investigaciones judiciales tan pronto como termine la guerra, y por eso quiere que continúe".
Solo un centenar de los 212 demócratas de la Cámara de Representantes y 28 de los 51 del Senado estuvieron presentes durante el discurso del ultraderechista jefe de gobierno de ocupación, poco más de la mitad de los demócratas de ambas cámaras.
El sitio web Axios señaló que el boicot a Netanyahu esta vez fue "significativamente mayor" que el de 2015, cuando 58 demócratas no asistieron a su discurso.
De acuerdo con CNN, el liderazgo del Partido Demócrata dejó a cada miembro la elección de tomar sus decisiones sobre asistir al discurso.
Al respecto, varios legisladores planearon participar en una "serie de contraeventos".
Paralelamente, el número de manifestantes frente al edificio del Capitolio aumentó durante las horas previas al discurso.
Cientos de personas se reunieron con pancartas y corearon consignas como muestra de rechazo a la visita de Netanyahu, así como a la guerra genocida del ente contra el pueblo palestino en la Franja de Gaza.
