Acusaciones mutuas entre candidatos presidenciales de EE. UU.
Donald Trump y Kamala Harris intensificaron las acusaciones mutuas de corrupción y políticas fallidas y peligrosas que, según ellos, amenazan los intereses de Estados Unidos.
Los candidatos a la presidencia de Estados Unidos, el republicano Donald Trump y la demócrata Kamala Harris, mantienen su lucha por atraer votantes e intensificaron las acusaciones mutuas de corrupción y políticas fallidas y peligrosas que, según ellos, amenazan los intereses de Estados Unidos.
Estas imputaciones entre ambos escalaron a insultos personales directos, alejándose en ocasiones de los temas políticos y económicos principales, generó, incluso, burlas a nivel mundial.
“Israel” en el medio de las acusaciones
Trump reaccionó rápidamente al discurso de su contrincante durante la clausura del Convención Demócrata y criticó su apoyo a “Israel” con el cual busca ganar votantes a través de la defensa de la ocupación sionista.
En la plataforma Truth Social, el republicano afirmó que no habría futuro bajo el liderazgo de Harris y la inculpó de llevar al país a una Tercera Guerra Mundial nuclear.
Movimiento No Comprometidos exige dar espacio a las voces palestinas https://t.co/TRHquEzq4K#EstadosUnidos #Chicago #PalestinaLibre pic.twitter.com/DttGXuEypv
— Al Mayadeen Español (@almayadeen_es) August 23, 2024
Además, la acusó de odiar a “Israel” y la fustigó por no asistir al discurso del primer ministro de la entidad ocupante, Benjamín Netanyahu, ante el Congreso de Estados Unidos.
Trump criticó las políticas internas de la aspirante a la Casa Blanca, y afirmó que planea otorgar la ciudadanía a inmigrantes indocumentados debido a su radicalismo marxista.
Al respecto, el exgobernante mencionó que Harris no abordó los problemas significativos que destruyen al país y no mencionó a la pobreza la cual afecta a 60 millones de personas.
Harris responde: el regreso de Trump sería peligroso
La representante azul atacó a su rival y lo acusó de hacer retroceder el país con una agenda extremadamente conservadora.
Harris advirtió que las consecuencias de un regreso de Trump a la Casa Blanca serían muy peligrosas, y lo acusó de querer restringir las libertades, encarcelar a periodistas, involucrar a las fuerzas de seguridad en sus disputas, y evitar el castigo en los tribunales.
Al mismo tiempo, prometió mantener la seguridad alejada de la politización y aseguró que Estados Unidos mantendrá su liderazgo como la mayor potencia del mundo.
Respecto a la guerra en Gaza, afirmó que siempre apoyará el derecho de “Israel” a defenderse y esa entidad no debería enfrentarse nuevamente a una amenaza como la del 7 de octubre.
Además, indicó que trabaja con el presidente Joe Biden para negociar la liberación de prisioneros israelíes y un alto el fuego en Gaza, así como para aliviar el sufrimiento de los palestinos y apoyar su derecho a la autodeterminación.
Mientras Harris habló, miles de manifestantes propalestinos protestaron fuera del congreso demócrata y denunciaron al apoyo de su administración a “Israel” en sus crimenes contra Gaza, una cuestión que generó divisiones dentro del partido demócrata y afectará probablemente los reultados en las elecciones.