Venezuela y Cuba condenan ataques israelíes en Siria
La nueva agresión sionista ratifica el rostro salvaje, inmoral e inhumano del régimen de "Tel Aviv" en Siria y la violación flagrante a la soberanía e integridad territorial de ese país.
Los gobiernos de Venezuela y Cuba condenaron el ataque perpetrado por el ejército israelí en la madrugada de este lunes contra las localidades de Masyaf y Wadi Al Oyoun en las afueras de Hama, en la República Árabe Siria, el cual dejó un saldo de 18 muertos, 43 heridos y daños materiales a estructuras.
Según el comunicado del Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores de Venezuela, la agresión sionista ratifica el rostro salvaje, inmoral e inhumano del régimen de “Tel Aviv” en contra la nación siria y la violación flagrante a la soberanía e integridad territorial de ese país, así como la premeditada intensión de continuar con la política expansionista de la guerra en la región y la prosecución de abominables crímenes contra los pueblos libres.
Venezuela reiteró su más contundente repudio a los arrogantes actos de la entidad sionista provocadores de la destrucción de comunidades enteras y a la creciente escalada de tensión política y militar en Medio Oriente como parte de las reiteradas transgresiones contra los Estados independientes.
En ese punto, el gobierno bolivariano instó a la comunidad internacional a ejercer acciones contundentes para detener de forma definitiva los repetidos ataques y las violaciones del Derecho Internacional por parte de la entidad sionista y sus colaboradores en contra de los pueblos de Palestina, Siria y Líbano.
También expresó palabras de aliento y consuelo a familiares y allegados de las víctimas, por tan irreparables pérdidas, e hizo votos por la pronta recuperación de los heridos y porque prevalezca la justicia y la paz absoluta en toda la región.
Desde Cuba, el canciller Bruno Rodríguez Parrilla denunció la embestida sionista y condenó el irrespeto de la soberanía de Siria.
Acciones de esta naturaleza son una amenaza a la seguridad y estabilidad regional, subrayó el ministro antillano.