Candidato presidencial de Túnez expone programa electoral
El candidato de Túnez, Zuhair Al-Maghzawi, subrayó en entrevista con Al Mayadeen que “la cuestión de la presidencia de la República para él no es una cuestión personal, sino de servir al pueblo”.
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Candidato a las elecciones presidenciales en Túnez, Zuhair Al-Maghzawi, en una entrevista exclusiva con Al Mayadeen.
El candidato a las elecciones presidenciales en Túnez, Zuhair Al-Maghzawi, conversó en una entrevista exclusiva con Al Mayadeen sobre los motivos de su postulación y los antecedentes de su apoyo por parte del Movimiento del Pueblo, así como de las condiciones internas durante la gestión del mandatario Kais Saied y su programa de gobierno en caso de resultar ganador.
Con respecto a su decisión de nominación, Al-Maghzawi dijo que “el Movimiento del Pueblo apoyó el proceso electoral y, durante casi dos años, el actual presidente Saied no ha hecho nada más que lanzar consignas”.
Sobre el motivo para desviarse del proceso del 25 de julio, explicó que "el Movimiento del Pueblo apoyó hasta cierto punto a Saied al principio".
Al respecto, consideró que este respaldo se justificó por el hecho de que en Túnez existía un sistema político que otorgaba poderes muy pequeños al presidente de la República mientras que el país estaba en un estado de caos y decadencia en todos los niveles.
“El momento del 25 de julio en el que Saied anunció su asunción del poder Ejecutivo no sólo fue creado por el presidente, sino también por las fuerzas juveniles y fuerzas partidarias como una oportunidad tal vez para salir de la situación vivida por el país en los últimos años”, mencionó.
Continuó: "Pero luego nos preguntamos, y todos se preguntaron, ¿qué se requiere? ¿Qué espera el pueblo del 25 de julio?".
Más tarde, manifestó, decubrimos que el 25 de julio tenía como objetivo consagrar la voluntad de un gobierno individual en lugar de consagrar cuatro voluntades, que son la voluntad del pueblo y de las élites políticas, el Estado tunecino y su presidente, juntos".
Al-Maghzawi señaló que “la situación se ha deteriorado aún más en términos de condiciones de vida, a medida que la tasa de crecimiento disminuyó, las tasas de desempleo e inflación aumentaron y los hombres y mujeres tunecinos perdieron materiales básicos de los mercados en una crisis que continúa hasta ahora”.
En cuanto al discurso que “habla de soberanía nacional y de la normalización como una alta traición”, según el candidato presidencial resultó ser “un discurso vacío, ya que quedó claro que existen acuerdos hasta ahora desconocidos para los tunecinos entre Saied y Europa, especialmente con los italianos”.
“Vemos que estos acuerdos han transformado a Túnez en un guardián de las fronteras del norte de Europa”, añadió.
A través de Al Mayadeen, el político expuso que “la decisión de alejarse del proceso del 25 de julio se debió a los resultados que llevaron a ello, y no se trataba de la cuestión de la gobernanza y de quién gobierna, como promueven los partidarios de Saeid”.
"La disputa giraba en torno a la evaluación del resultado de tres años que fueron testigos de elecciones y de una nueva constitución", fueron sus palabras.
Al-Maghzawi indicó que este resultado para el Movimiento del Pueblo fue que “la nueva constitución dedicó poderes absolutos al presidente de la República”.
“Me postulo para estas elecciones porque no acepto ser presidente de una República sin rendir cuentas... ni acepto ser presidente de la República y tener esos poderes”, precisó.
En este sentido, el candidato presidencial tunecino añadió: “Hoy avanzamos hacia estas elecciones para decirle a nuestro pueblo: sí creemos que podemos sacar al país de sus difíciles condiciones de vida y coincidimos con la abrumadora mayoría de los tunecinos que disienten alrededor del presidente”.
Sentenció: "Su mandato termina hoy porque no pudo cumplir ninguna de sus expectativas".
Al dirigirse a los tunecinos, expresó: “Nos presentamos a las elecciones porque creemos que este país merece más de lo que tiene, y creemos que hay un experimento fallido en todos los sentidos de la palabra y en todos los niveles”.
Por ello, “hoy nos presentamos como una alternativa para restaurar la esperanza, defender la democracia y la libertad y cuidar de los grupos vulnerables”.
Como respuesta a su exposición a campañas de difamación, Al-Maghzawi dijo a Al Mayadeen que todos en Túnez saben que “estas elecciones no se llevan a cabo en circunstancias normales”.
“Había una voluntad real de avanzar hacia una nueva victoria del presidente saliente” y denunció que el organismo supervisor de las elecciones fue designado por Saeid".
En cuanto a las condiciones para la candidatura, Al-Maghzawi alertó: “Fuimos sujetos a restricciones reales cuando recogíamos recomendaciones, ya que estábamos expuestos a campañas de infidelidad en el espacio virtual y a difamaciones diarias activas en el extranjero a través de sitios de redes sociales”.
Y continuó: "Los periodistas han empezado a temer incluso recibirnos en radio y televisión por temor al Decreto 54", pero "creemos firmemente que nuestro pueblo saldrá el 6 de octubre en un diluvio electoral tunecino, porque hoy no hay lugar para nosotros excepto a través del cambio mediante las urnas".
En respuesta a la pregunta sobre si era un candidato con financiación pública, Al-Maghzawi subrayó que era “un candidato sin financiación pública”.
“Somos pobres y no tenemos dinero, y llevaremos la campaña con nuestros seguidores y nuestros activistas”, aseguró.
De igual modo, el político confirmó la disposición para el debate entre los tres candidatos pues representa ante todo “una tradición democrática y una oportunidad para que los tunecinos vean cuáles son nuestras percepciones, visiones y programas”.
Sobre su programa electoral, Al-Maghzawi reveló que se presenta hoy a estas elecciones porque “no se ha logrado nada para los tunecinos, ni la libertad ni la dignidad, que era el título de la revolución”.
En este punto, agregó: “No aceptaremos que los poderes del presidente de la República sean absolutos y no estén sujetos a ningún tipo de supervisión o rendición de cuentas, como se establece en esta constitución”
“Garantizaremos los derechos sociales, políticos y derechos y libertades económicos de los tunecinos”, sentenció.
Asimismo, el candidato presidencial adelantó: "Presentaremos a los tunecinos un programa de lucha contra la pobreza, y una visión completa en la industria y en la cuestión de la juventud, para que el país emerja".
Desde la Presidencia de la República, aseguró, "nos centraremos en el Consejo Científico para beneficiarnos de todos los talentos científicos tunecinos presentes fuera del país”.
Y añadió: "Hoy hemos pasado de una etapa de simple migración laboral a Europa, como ocurrió en los años setenta y sesenta, a una fuga de cerebros" mientras que "la verdadera riqueza de Túnez son los jóvenes".
Entre las promesas electorales de Al-Maghzawi está “no dejar la riqueza tunecina en manos de un pequeño número de ciudadanos”, después de que “el sistema que gobernó el país marginara a los agricultores”.
“Nuestra política es la seguridad alimentaria y la autosuficiencia alimentaria, que creo que es muy importante”, reiteró.
Al-Maghzawi enfatizó que este asunto sólo puede resolverse atendiendo los asuntos del “sector agrícola, el sector textil y el sector industrial”, y señaló que son “sectores estratégicos que necesitan visión y planificación, y comenzar a trabajar y eliminar la burocracia”.
En este contexto, subrayó a Al Mayadeen que “se necesitan muchas reformas, mientras que el problema radica en la falta de visión sobre estas reformas, ni siquiera de voluntad política para iniciarlas”.
Igualmente, trasladó su convicción de que “Túnez espera establecer nuevas relaciones con los países emergentes del mundo actual como China”
“Queremos que nuestras relaciones con los europeos sean iguales y equitativas, es decir, que sean relaciones basadas en el interés común de nuestros países, y no en hegemonías y dictados”, dijo.
Al respecto, explicó que "se llevarán a cabo conversaciones con todos los socios que puedan ayudar a Túnez sin dominarlo ni dictar sus condiciones, de modo que sea una relación basada en intereses comunes".
Sobre la guerra de "Israel" en la Franja de Gaza, Al-Maghzawi planteó que el pueblo palestino lucha y resiste, de manera legendaria, a la entidad sionista apoyada por todas las potencias y flotas coloniales, durante casi un año.
"El recuerdo del Diluvio de Al-Aqsa provocó un terremoto no sólo dentro de la Palestina ocupada, sino también en el mundo árabe, el mundo islámico y el mundo entero", valoró.
Al-Maghzawi saludó al pueblo palestino en Cisjordania, “que se levanta y ofrece mártires día tras día", y a todos los ejes de resistencia en el Líbano, Yemen e Irak que se enfrentan a la entidad.
El candidato tunecino consideró que “la batalla para liberar Palestina es la batalla de toda la nación, es la batalla de toda la humanidad progresista y es la batalla de todos los musulmanes”.
Más adelante se dirigió a los gobernantes árabes y expuso: “Estos muchachos dentro de Gaza pudieron humillar a esta entidad con simples capacidades y voluntad”.
Al-Maghzawi concluyó su entrevista con Al Mayadeen subrayando que “la cuestión de la presidencia de la República para él no es una cuestión personal, sino de servir al pueblo”.
Prometió a los ciudadanos que “nadie será oprimido en el país mientras no cometa errores, y el Estado será verdaderamente democrático, civil y social”.
También prometió "que la riqueza no quedará en manos de unos pocos, mientras el 90 por ciento de la población viva por debajo del umbral de pobreza".
Asimismo, Al-Maghzawi aseguró que “se crearán planes en el horizonte del año 2050, a nivel económico, agrícola, industrial, educativo y de juventud, para comenzar a trabajar con el objetivo de convertir a Túnez en el que todos soñamos”.
