Cárceles israelíes son "agujeros negros" donde desaparecen detenidos
Los palestinos arrestados por el “ejército” israelí en Gaza y trasladados a centros de detención se pierden sin dejar rastro y sus familias desconocen si están vivos o muertos, reconoció la prensa sionista.
Decenas de prisioneros palestinos murieron desde el inicio de la guerra contra la Franja de Gaza como consecuencia de las pésimas condiciones en las cárceles israelíes, publicó el diario Haaretz.
Según el informe, muchos de los arrestados por el “ejército” enemigo en Gaza y trasladados a centros de detención desaparecen sin dejar rastro, sus familias desconocen si están vivos o muertos y, en caso de perecer, no reciben explicaciones claras sobre las causas.
El mes pasado, al menos otros dos residentes de Gaza perdieron la vida en el "agujero negro" de las violaciones en las instalaciones de detención en "Israel".
Muaz Khaled Mohamed Rayan, de 31 años, fue arrestado el pasado 21 de octubre en el norte de la Franja de Gaza, y "falleció" aproximadamente 10 días después.
Las autoridades israelíes rechazaron revelar los delitos imputados y cuando los miembros de su familia contactaron al "ejército" y pidieron saber dónde estaba detenido, negaron cualquier tipo de información.
Solo después de intervenciones del periódico Haaretz, hablaron sobre su fallecimiento en el centro de detención de Sdi Taiman.
Otro detenido, Mohamed Abdel Rahman Idris, de 35 años, detenido desde el 25 de agosto en Rafah, murió el viernes último en la prisión de Ofer.
A su familia le informaron que lo encontraron inconsciente en su celda y lo declararon mártir después de fracasar los intentos de reanimarlo.
El "ejército" israelí afirmó que "pereció" mientras estaba bajo la custodia del Servicio Penitenciario, pero esa entidad lo niega y asegura que los militares lo tenían a su mando.
Haaretz indicó que cada organismo se responsabiliza mutuamente y ninguno está dispuesto a revelar las razones de su arresto.
Estos dos casos se suman a otra historia sobre un padre y su hijo, arrestados en marzo en Khan Yunis, y después de su muerte, sus allegados nunca pudieron conocer que les ocurrió.
En julio, las autoridades israelíes respondieron que no tenían información sobre su detención.
Los familiares presentaron un recurso ante el Tribunal Supremo, y solo entonces "Israel" admitió que ambos perecieron mientras estaban bajo custodia.
De acuerdo con el diario, los jueces del Tribunal Supremo describieron esta secuencia de hechos como un "error".
En la conclusión de su informe, Haaretz precisó que desde el inicio de la guerra, decenas de detenidos palestinos murieron en las cárceles del "ejército" israelí y del Servicio Penitenciario.
A su vez, subrayó que el Tribunal Supremo actúa como un blanqueador del fenómeno de desaparición de detenidos y rechazan una y otra vez las peticiones de las organizaciones de derechos humanos sobre este tema.