Siria, un obstáculo para los planes de EE. UU. en el Levante
"Estados Unidos considera que Siria y las fuerzas nacionales en Líbano, Irak e Irán son obstáculos que entorpecen su objetivo de dominar Medio Oriente", según el exministro de Relaciones Exteriores y Emigrantes del Líbano, Adnan Mansour.
"El movimiento de los grupos armados y terroristas no es una sorpresa para quienes siguen de cerca la evolución de los acontecimientos en Siria", consideró el exministro de Relaciones Exteriores y Emigrantes del Líbano, Adnan Mansour, en declaraciones ofrecidas al diario Al Binaa.
Según el diplomático, este "tsunami militar acompañado de ataques masivos por parte de facciones armadas y grupos terroristas" no habría ocurrido sin la connivencia, el apoyo y la aprobación de Estados Unidos, “Israel” y Turquía.
Mansour llamó la atención respecto a que los recientes hechos en el norte de ese país acontecieron, en particular, tras las guerras de Gaza y Líbano, y considerando el papel de Siria como un pilar dentro del Eje de Resistencia.
Tras el acuerdo de alto al fuego entre Líbano e “Israel”, la alianza tripartita de Estados Unidos, “Israel” y Turquía decidió actuar contra Siria para ajustar cuentas viejas y nuevas, dijo.
El exministro de Relaciones Exteriores y Emigrantes del Líbano comentó que, sin embargo, cada miembro de esta alianza tiene sus propios intereses y objetivos.
"Turquía nunca abandonó su pretensión de derechos históricos ficticios sobre Siria e Irak, alegando que su territorio geográfico debería abarcar el norte de Siria, incluidas las regiones de Alepo, Idlib y sus alrededores, y también el norte de Irak, especialmente Mosul y Kirkuk, ricas en petróleo", reflexionó.
Mientras tanto, Estados Unidos e “Israel” consideran que ahora es el momento oportuno para atacar a Siria a través de los grupos terroristas que han financiado, respaldado, entrenado y armado.
De acuerdo a las consideraciones de Mansour, Washington no puede implementar completamente sus proyectos en el Levante mientras Siria siga siendo un obstáculo, aliada con socios que enfrentan sus planes sospechosos en la región.
"Siria siempre ha sido parte integral de un eje que rechaza las políticas y proyectos de Occidente, oponiéndose completamente al estado “israelí” en Palestina y resistiendo la ocupación", consideró.
El diplomático añadió que Estados Unidos considera que Siria y las fuerzas nacionales en Líbano, Irak e Irán son obstáculos que entorpecen su objetivo de dominar Medio Oriente.
Dichos planes incluyen controlar los recursos de la región, coordinarse con la entidad sionista para ejecutar el proyecto del Nuevo Oriente Medio, expandir los Acuerdos de Abraham y fortalecer las relaciones de "Tel Aviv" con los países árabes normalizadores y aquellos próximos a normalizar.
Las severas sanciones impuestas sobre Siria no lograron sus objetivos, recordó Mansour, por eso "ahora recurren a otras vías para atacar a su presidente, desestabilizar y fragmentar el país, y acabar con su papel crucial en el Levante".
En un contexto marcado por la guerra de “Israel” en Gaza y el alto al fuego con Líbano, el exministro advirtió que Estados Unidos e “Israel” planean ampliar también el conflicto con facciones armadas dentro de Irak, alcanzando el corazón del Eje de Resistencia: Irán.
La caída de Siria representaría la caída de las demás naciones del Eje de Resistencia una por una, lo que significaría una victoria arrolladora para la alianza tripartita, sirviendo a los intereses estratégicos de cada uno de sus miembros, alertó.
Sobre el papel de las fuerzas de Rusia en el campo sirio, Mansour consideró que para Moscú no es una opción permitir que Damasco caiga frente a facciones armadas y grupos terroristas respaldados por esta alianza tripartita.
Un panorama así, a su juicio, representaría la caída de toda la región bajo el control de Estados Unidos e “Israel”. Precisó: "El objetivo de la alianza no se limita a Siria; mañana será Irak y después Irán".
Al respecto, el diplomático explicó que si Rusia no actúa y observa de lejos mientras el tsunami del terrorismo arrasa Siria y la región, se encontrará fuera del tablero del Medio Oriente, y supondría un retroceso significativo de su papel global.
Por su parte, Irán, bastión del Eje de Resistencia y objetivo primordial de Occidente, tiene la responsabilidad de defender las primeras líneas de este eje con firmeza y determinación.
Las fuerzas nacionales de Irak y la región, junto con Rusia, deben unirse en apoyo a Siria para eliminar rápidamente a las facciones armadas y grupos terroristas, valoró.
El exministro de Relaciones Exteriores y Emigrantes del Líbano alertó que la alianza tripartita busca prolongar los combates para arrastrar a estos países a una guerra de desgaste larga y costosa.
Se trata de "una confrontación abierta entre la alianza tripartita que acecha a la región y apoya a las facciones armadas y mercenarios, y las naciones que resisten y frustran las conspiraciones de la ocupación israelí, las ambiciones del sultán otomano y las políticas hegemónicas de Estados Unidos".
"El campo de batalla ardiente de Siria tiene la última palabra, y nosotros estamos a la espera", concluyó Mansour.