Sayyed Hashem Safi al-Din, líder legendario envuelto en misticismo
Sayyed Hashem Safi al-Din fue un líder como ningún otro, ayudó a dar forma a Hizbullah tal como lo conocemos hoy y realizó innumerables contribuciones aún envueltas en misterio y aún por conocer.
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Se sabe poco sobre Sayyed Hashem Safi al-Din, pero es un hecho conocido por todos que sus contribuciones ayudaron a dar forma a Hizbullah y la resistencia tal y como conocemos hoy.
Somos un pueblo cuyo espíritu no puede ser quebrantado, no puede ser derrotado y no retrocede.
- Jefe del Consejo Ejecutivo de Hezbolá, Mártir Sayyed Hashem Safi al-Din
La noticia del martirio del entonces secretario general de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, conocida apenas dos días después del devastador ataque en el suburbio sur de Beirut en Haret Hreik, fue desgarradora para todos los partidarios de la Resistencia y la causa palestina.
Incluso quienes no apoyaban la causa quedaron conmovidos. La pérdida de una figura tan emblemática, quien guió a Hizbullah a victoria tras victoria durante cuatro décadas, fue tal vez el golpe más aplastante enfrentado por cualquiera de los partidarios de la causa palestina y el camino de la Resistencia.
Sin embargo, el martirio de Sayyed Hashem Safi al-Din agravó ese dolor tras la pérdida del amado líder. La imponente figura, como fue discutido en círculos cerrados y luego informado en los medios, fue designada para asumir el liderazgo del movimiento de Resistencia si algo le sucedía a Sayyed Nasrallah.
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Sayyed Hashem en su juventud en una fotografía sin fecha.
La certeza de que Sayyed Safi al-Din habría liderado a Hizbullah durante la guerra tranquilizó a muchos, ya que el legendario líder le había confiado personalmente la tarea de llevar la bandera de la resistencia contra los proyectos imperialistas y colonialistas de Estados Unidos y la ocupación israelí.
Un Sayyed tras un Sayyed
El hecho de que él, al igual que Sayyed Nasrallah, fuera descendiente del Profeta Muhammad (BP) e incluso pariente suyo, lo convirtió en una fuente de consuelo para quienes luchaban contra la desesperación.
Ese consuelo también podía encontrarse en el gran parecido entre ambos. Ya fuera en términos de apariencia, capacidad para hablar en público, carisma, modales o tono, estaba claro que no podría haber habido un sucesor mejor.
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Sayyed Hashem Safi al-Din reza detrás de Sayyed Hassan Nasrallah.
Esa esperanza, la idea de que la Resistencia estaría dirigida por un hombre del mismo estilo que Sayyed Nasrallah, sirvió como salvavidas para muchos. No se trata de restarle importancia a la estatura del secretario general Naim Qassem, uno de los fundadores del movimiento de Resistencia moderno. Sin embargo, perder a dos líderes en tan rápida sucesión causó un dolor insoportable para muchos.
Hizbullah no depende de ningún individuo en particular. Hizbullah es un camino, un proyecto, una organización y una Ummah.
- Sayyed Hassan Nasrallah
Sayyed Nasrallah sabía que el amor que el público sentía por él los devastaría si algo le sucediera. Él tenía la responsabilidad hacia el pueblo de asegurarles que su muerte o martirio no afectaría al inquebrantable Hizbullah y eso lo entendía también a Sayyed Safi al-Din.
Un movimiento imparable
Toda la jerarquía de Hizbullah tiene como base el principio de que, por mucho asesinen a sus comandantes o a sus altos funcionarios, la organización no sufrirá daño y su funcionamiento interno seguirá como si nada hubiera pasado.
Pero a pesar de la disciplina organizativa y la integridad del movimiento de resistencia, el público no es inmune a los efectos del dolor.
Criado en manos de comandantes sacrificados, desde llevar una vida normal hasta cuidar de sus propios hijos y parientes, el público mostró una firmeza inquebrantable. La moral de los combatientes en el enfrentamiento al ejército más avanzado de la región dependía de ellos, y no se amilanaron.
"Es lo que Dios quiere", "Han luchado durante mucho tiempo por el martirio", "Es lo que habían deseado", "Imagínense el dolor que sentiríamos si hubieran tenido una muerte normal en lugar de ser martirizados como siempre habían deseado", etc, fueron todas citas escuchadas por los partidarios de la Resistencia, lo cual indicó una resolución inquebrantable y una determinación absoluta de continuar en el camino hacia la liberación sin importar el costo.
Sayyed Safi al-Din no era simplemente una figura de autoridad, sino un pilar de firmeza ideológica. Era un reconocido estratega cuya visión fue extendida más allá del campo de batalla.
Nacido en la ciudad de Deir Qanoun al-Nahr, en el sur de Líbano, en 1964, sus primeros años estuvieron marcados por la lucha contra la ocupación israelí.
Desde sus primeros días en Hizbullah, exhibió los rasgos de un líder: sabiduría más allá de su edad, un profundo conocimiento del panorama geopolítico y un compromiso inquebrantable con los principios de la Resistencia, la justicia y el Islam.
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Sayyed Hashem Safi al-Din durante una ceremonia pública en una fotografía sin fecha.
Era un erudito. A principios de los años 1980 estudió en los seminarios religiosos de Qom junto a Sayyed Nasrallah. Con el paso de los años, ganó la confianza de los dirigentes de Hizbullah y la admiración de su base popular.
Cuando pasó a ser jefe del Consejo Ejecutivo de Hizbullah, quedó consolidado como un importante responsable de la toma de decisiones, un hombre cuyas palabras tenían un peso tal vez sólo comparable al del propio secretario general martirizado.
Esto quedó en evidencia en el hecho de que fue el primer funcionario de Hizbullah que habló en público tras el lanzamiento del Diluvio de Al Aqsa el 7 de octubre de 2023.
"El mundo entero ha sido testigo de que las manchas negras [de vergüenza y culpa] permanecerán impresas en sus frentes [de los líderes sionistas] hasta el final de esta entidad; esta no es sólo la batalla de la gente de Gaza y Cisjordania, sino de toda la Ummah. Todos deben participar en ella [...] Nuestra historia, nuestras armas y nuestros cohetes están con ustedes. Todo lo que tenemos está con ustedes".
- Sayyed Hashem Safieddine, 8 de octubre de 2023
Liderando el consejo
La importancia de Sayyed Safi al-Din es el resultado de años de esfuerzo y dedicación, fue uno de los fundadores clave de Hizbullah. Desde Qom desempeñó un papel fundamental en la construcción y configuración de la Resistencia, su visión, ideología y dirección.
Debido a sus esfuerzos fue convocado más de una década después, en 1994, para formar parte del Consejo Ejecutivo.
El Consejo Ejecutivo es uno de los órganos de mayor jerarquía de Hizbullah. Está integrado por varios dirigentes de alto rango y tiene la responsabilidad de supervisar las actividades políticas, sociales y administrativas. Funciona como un canal para que la organización pueda comunicarse con el mundo exterior y con su base popular.
Trabaja cuestiones clave como la educación, la atención sanitaria y los medios de comunicación y fue formado y moldeado por su jefe, el mártir Sayyed Hashem Safi al-Din, quien presidió el organismo desde 2001.
Debido a su valor central en el centro de las políticas de Hizbullah, ser el jefe del Consejo Ejecutivo significaba ser el segundo al mando y estaba bien ganado. Estaba entre los principales decisores del movimiento.
Comandante militar legendario
Además, Sayyed Safi al-Din era miembro del Consejo de la Yihad de Hizbullah, el cual supervisa las operaciones militares y el desarrollo del movimiento de resistencia, así como su planificación estratégica. Cualquier acción emprendida por Hizbullah a nivel militar pasaba por ese escalón o era dirigida por él.
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Sayyed Hashem Safi al-Din vestido de uniforme junto a Hajj Abu Ali Mortada en una fotografía sin fecha.
Según el Secretario General, Sheikh Naim Qassem, el Consejo de la Yihad está formado por "aquellos encargados de la actividad de resistencia, ya sea en términos de supervisión, reclutamiento, entrenamiento, equipamiento, seguridad o cualquier otra actividad relacionada con ella".
El Consejo de la Yihad es responsable del armamento de Hizbullah, incluido el desarrollo y la supervisión del uso de armamento avanzado como drones, cohetes y misiles antitanque.
También gestiona el reclutamiento y el entrenamiento de los combatientes, en particular los de las unidades especializadas, incluidas las famosas Unidades Nasr, Aziz y Badr, así como la más conocida unidad Radwan.
Una de las tareas más importantes llevadas a cabo por este organismo incluye la coordinación militar internacional con los aliados de Hizbullah como Irán y su Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), sin mencionar su papel en inteligencia, contrainteligencia y seguridad, lo cual significa ocuparse de frustrar los intentos de espionaje e infiltración, llevar a cabo misiones de recopilación de inteligencia y vigilancia, y tomar medidas para proteger los activos militares y el liderazgo de la Resistencia.
Si bien no hay información pública disponible sobre el papel exacto de Sayyed Safi al-Din y sus contribuciones dentro del Consejo de la Yihad, por medio de la especulación y el reconocimiento de su papel central en el organismo, su importancia puede ser deducida con el conocimiento de la actividad y las tareas del consejo.
Fue un importante contribuyente al desarrollo militar de Hizbullah, la coordinación con aliados extranjeros, las operaciones de inteligencia y mucho más allá de lo que las palabras y la información disponible públicamente pueden transmitir.
Además de su posición como jefe del Consejo Ejecutivo, casi todas las acciones desarrolladas por Hizbullah dentro del ámbito de competencias de esa comisión debían pasar por él, ya que era una figura central del movimiento y eso es un hecho bien conocido entre el público. Sayyed Hashem era más que una figura de autoridad, y servía como piedra angular para la Resistencia.
El hombre del pueblo
En el plano popular, Sayyed Safi al-Din era conocido como la figura encargada de causas y problemas sociales. Supervisó la reconstrucción tras la guerra de julio de 2006 en Líbano y era responsable de garantizar que el pueblo de Líbano no sufriera ninguna humillación. Era muy popular porque era un líder activo, buscaba devolver algo a la comunidad.
Siguió de cerca las directrices del mártir secretario general de Hizbullah, Abbas al-Moussawi, respecto a servir al pueblo, conservó su legado mientras implementó las enseñanzas islámicas para cuidar de la comunidad.
Te serviremos con las pestañas de nuestros ojos.
- Sayyed Abbas al-Moussawi
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Al centro del secretario general de Hizbullah, mártir Sayyed Abbas al-Moussawi.
Su defensa de los ideales de Sayyed Abbas al-Moussawi coincide con la idea de que Hizbullah no depende de un solo individuo porque su mensaje y camino serán implementados sin importar quién esté al mando de la organización.
Esto también quedó en evidencia en la forma en que Sayyed Hassan Nasrallah dirigió Hizbullah, ya que la mayoría de la gente ni siquiera sintió un cambio después de la transición de Sayyed al-Moussawi.
Sayyed Safieddine estaba muy interesado en salvaguardar el camino de Hizbullah, al igual Sayyed Nasrallah y Sheikh Qassem después de ellos.
Hizbullah nunca perdió el rumbo ni el foco, independientemente de cuántos asesinatos sufrió.
La estructura política no fue derrumbada a pesar de los asesinatos de sus secretarios generales, tampoco la militar tambaleó con la caída de altos comandantes como Hajj Imad Mughniyeh, Sayyed Mostapha Badreddine o Hajj Ibrahim Aqil.
Hizbullah no es una organización común y corriente; su continuidad está casi garantizada, no sólo por su enorme infraestructura y sus grandes mentes, sino por su gigantesca base popular, cuyo apoyo no tiene parangón.
Ello puede atribuirse a las grandes mentes al frente de la organización, las cuales supieron comunicarse con el público y reforzar su posición como un movimiento de resistencia a favor del pueblo y contra los enemigos del Estado.
Sayyed Hashem Safi al-Din ayudó a dar forma a esta imagen a lo largo de sus 40 años como alto funcionario de la organización.
El último discurso
Sayyed Safieddine, durante una procesión fúnebre en el suburbio sur de Beirut tras un devastador acto de agresión israelí, afirmó: "La paciencia se corresponde con la recompensa divina. Cuando hay paciencia, Dios concede a los creyentes las mejores recompensas en esta vida y en la otra. Esta es nuestra cultura, nuestra resistencia y la historia de estas familias honorables y nobles".
"El enemigo aún no comprende lo que es la sociedad de la Resistencia, levantada sobre los sacrificios de Karbala, de Sayyed Al-Shuhada [Imam Hussein] y Abu Al-Fadl Al-Abbas, quien, incluso cuando su mano derecha fue cortada, llevó la espada con su izquierda, y cuando esa fue cortada, continuó hasta el final", añadió.
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Sayyed Hashem Safi al-Din en su último discurso público el 18 de septiembre de 2024.
"Que el pueblo de la Resistencia y todos los que la aman tengan la seguridad de que esta Resistencia es fuerte, orgullosa y grande. Sigue firme y es plenamente capaz de asestarle derrotas al enemigo", subrayó.
Su optimismo y la forma en que hablaba con la gente y la tranquilizaba a lo largo de su vida dieron un gran impulso a su popularidad, pues también en ese aspecto reflejaba a Sayyed Nasrallah.
En tiempos de guerra y asedio, su liderazgo fue evidente. Desempeñó un papel decisivo en la respuesta de Hizbulah a la agresión israelí, supervisó decisiones militares y políticas cruciales, las cuales consolidaron la fuerza del movimiento y su percepción pública.
Su martirio, como el de Sayyed Nasrallah antes que él y el de Sayyed Abbas antes que él, dejó un vacío irreemplazable. Pero para la Resistencia, el dolor nunca ha sido un final, sino sólo un paso hacia una mayor determinación.
Sayyed Hashem Safi al-Din no fue simplemente un líder perdido; fue un legado forjado con sangre y sacrificio, una estrella guía para quienes continúan la lucha contra la opresión. Su nombre ahora se suma al panteón de mártires que dieron forma a la Resistencia, no como un recuerdo de lo perido, sino como un testimonio de lo que perdurará, y esa es la causa de la liberación.
