El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, presentó el lunes pruebas de un plan orquestado por agencias estadounidenses para legitimar a los grupos violentos que sembraron el caos tras las elecciones presidenciales del 28 de julio.

Durante la transmisión de su programa televisivo "Con Maduro+", el mandatario mostró documentos que vinculan a organizaciones no gubernamentales (ONG) con financiamiento de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y la Agencia Central de Inteligencia (CIA).

Según el jefe de Estado, estas entidades estarían involucradas en una operación destinada a “blanquear el terrorismo” registrado los días 29 y 30 de julio.

Pruebas y declaraciones

Maduro aseguró que las pruebas son “irrefutables”, incluyendo registros de transferencias y órdenes de operación que demuestran cómo USAID financia ONG para “lavar la imagen de los fascistas que quemaron, destrozaron y asesinaron tras nuestra victoria electoral”.

El término blanquear, explicó, es parte del léxico diplomático imperial utilizado para convertir criminales en víctimas ante la opinión pública internacional. 

Detalló que la red de organizaciones implicadas incluye grupos de derecha, centro e incluso de supuesta izquierda, todos coordinados para justificar los ataques perpetrados por “comanditos terroristas” bajo un guion preestablecido. 

Violencia como estrategia política

Los disturbios del 29 y 30 de julio, que incluyeron quema de sedes públicas, linchamientos y agresiones a funcionarios, fueron comparados por Maduro con las guarimbas de 2014 y 2017.

En esta ocasión, denunció un nuevo componente: la infiltración en sectores progresistas mediante ONG utilizadas como “caballos de Troya” para dividir al chavismo.

Como parte de las evidencias presentadas, se encuentran comunicaciones entre ONG locales y contratistas de USAID que instruyen sobre cómo modificar el relato de los hechos, atribuyendo la violencia a “protestas espontáneas” y ocultando vínculos con grupos de ultraderecha.

“Esto no es improvisado: es la guerra híbrida en su fase más cínica (...) Quieren repetir el libreto de Siria o Ucrania, pero aquí tenemos pueblo consciente”, aseveró.

Llamado a la unidad revolucionaria

Maduro interpretó las recientes sanciones impuestas por Estados Unidos  como un intento de presionar a sectores vacilantes dentro del proceso bolivariano.

“El imperio cree que puede comprar conciencias, pero solo logra que los patriotas brillen más”, expresó, haciendo un llamado a fortalecer la unidad nacional.

“Avanzamos con los que no se doblegan, con los que no negocian la patria. Los demás, que se quiten la máscara y se vayan con sus amos en Washington”, concluyó.