Un exingeniero de Meta acusó a la empresa de parcialidad en su manejo de contenido relacionado con la Franja de Gaza.  

En una demanda presentada ante un tribunal de California, el palestino-estadounidense Ferras Hamad alegó que la compañía lo despidió por corregir errores que causaban la supresión de las publicaciones de su país en Instagram.

Además, acusó a la firma por eliminar comunicaciones internas de trabajadores que mencionaban la muerte de sus familiares en el enclave levantino. 

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Según refirió, su expulsión tuvo origen en un incidente ocurrido en diciembre en relación con un procedimiento diseñado para solucionar graves problemas.

En este lugar, descubrió que el fotoperiodista recibió de manera errónea la etiqueta de pornográfico a pesar de mostrar un edificio destruido. 

Poco después, él sufrió despido y aseguró la propietaria de Instagram le notificó una infracción por prohibir a los empleados a trabajar en cuentas personales. 

Hace unas semanas, trabajadores tecnológicos protestaron para cancelar el proyecto Nimbus, firmado entre la multinacional Google y “Tel Aviv”. 

En particular, ese software identificó blancos humanos hasta asesinarlos sobre el terreno, pero sobre todo en sus propias viviendas.