Al cumplirse este martes el primer año de la asunción del presidente argentino Javier Milei, de la alianza ultraderechista La Libertad Avanza (LLA), la situación se agrava y la mentira en forma permanente y falsificación de datos y cifras son denunciados cada día por la prensa alternativa, porque el gobernante, que se considera como un “topo infiltrado para destruir el Estado nacional desde adentro”, tiene bajo su control a la mayoría de los medios masivos de comunicación local, encabezados por el Grupo Clarín y La Nación y otros que fueron la misma prensa que lo instaló durante su campaña electoral con su motosierra.

Lo más importante es que llegó al gobierno supuestamente por haber logrado “milagrosamente” 56,6 por ciento de votos, que sorprendió al mundo, sin que nadie esperara al escrutinio final que dejó en claro que nunca LLA llegó siquiera a 50 por ciento con sus socios de la alianza derechista Cambiemos que nucleaba a propuesta Repúblicana (PRO) y la Unión Cívica Radical (UCR), ahora dividida.

El reconocido escritor y periodista Mempo Giardinellí dio a conocer las verdaderas cifras del escrutinio en febrero pasado en Página /12 ya que oficialmente en la segunda vuelta deben contabilizarse los “votos en blanco y las abstenciones”.

Los resultados finales “que confundieron al pueblo argentino fueron aviesamente mal analizados y publicitados”, señala Giardinelli, quien destacaba que “el ahora presidente fue votado por solamente 40,31 por ciento del padrón habilitado para votar, que no es lo mismo”

O sea que “casi 60 por ciento, esto es bastante más de la mitad de la población que no lo votó para presidir esta República”, advirtió entonces el escritor quien que encabeza el Manifiesto Argentino, que permanentemente denuncia la entrega de la soberanía nacional, con datos precisos y certeros.

Con referencia al resultado de las elecciones que llevaron al gobierno a Milei sostiene que “afirmar y propagandizar lo contrario (que había ganado por 56,6 por ciento) fue una maniobra, un cuento mal intencionado y nada inocente” con los datos obtenidos del escrutinio que nadie se preocupó en buscar.

A su vez, Sergio Massa, de la peronista Unión por la Patria, recibió 32 por ciento del total, señala el periodista al recordar que “sólo votó 76 por ciento del padrón, siendo así uno de los registros más bajos de toda nuestra vida democrática”.

Por otra parte, se conoció en las últimas horas que existen cuatro millones de nuevos pobres y dos millones 500 mil indigentes más en todo el país. El Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) registra que 49,9 por ciento de la población es pobre. Casi la mitad del país se encuentra bajo la línea de pobreza, es decir 23 millones de personas.

A su vez, el Centro para la Recuperación Argentina de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires afirma que la indigencia alcanza a seis millones de personas. La pobreza en los menores de 18 años suma 65,5 por ciento.

Estas cifras son generalmente ocultadas por la misma prensa que instaló a Milei durante la campaña. Hoy las imágenes de 300 personas que fueron despedidas por teléfono de la reconocida empresa Avon, la mayoría con más de 20 años de trabajo, se unen a miles de despedidos, que pueden alcanzar la cifra de casi medio millón en todo el país, contando con la paralización de las obras públicas, que significa un alto número de trabajadores de la construcción.

El anuncio que se considera de máxima crueldad es la suspensión de la entrega de medicinas gratuitas a los jubilados, que cobran las pensiones mínimas. Es imposible para millones de argentinos llegar a fin de mes con los aumentos cada día más altos de alimentos y tarifas de los servicios indispensables. Esto sucede por primera vez en la historia del período “de recuperación democrática”, y significa la condena a muerte de millones de jubilados, que son además golpeados y maltratados en sus marchas pacíficas de todos los miércoles.

También se avanza en la alianza con el facismo internacional, siendo el único país que no votó en favor de los pueblos originarios y devastó todas las política de género instaladas democráticamente en este país. Además apoya abiertamente el genocidio del pueblo palestino, acompañando al declarado criminal de guerra Benjamin Netanhyahu.

Este día el Grupo de Curas de la Opción por los pobres, que dejó en las villas miserias el arzobispo Jorge Bergoglio, antes de asumir como papa Francisco en el Vaticano, acusó a Milei de “gobernar a fuerza de decretos y vetos justificando todo con “números siempre falseados generando hambre en forma creciente en la población y promoviendo la ley de la selva en nombre de una falsa libertad. Es el triunfo del individualismo, del racismo y el odio, que conducen a una desintegración social”, señalan.

En nombre de una supuesta libertad, perdió la patria, perdió la esperanza y la libertad sigue retrocediendo. Como el desprecio por América Latina, cada día da pasos en la entrega del país a Estados Unidos e "Israel". De hecho el Atlántico sur está controlado por ambos y por Gran Bretaña, con lo cual Las Malvinas han salido de la agenda.