Francois Houtart
La entrevista a Francois Houtart que presentamos acompañando este artículo la realizamos el 18 de marzo de 2017, un poco más de dos meses antes de su muerte. Tenía 92 años. Uno de los temas a los que hizo referencia fue al papel que tiene Venezuela en la estabilidad de toda América Latina y El Caribe y cuál es el futuro de la izquierda en esta región. Así que contextualizamos brevemente el tema y luego presentamos lo que nos dijo Houtart.
El proyecto de Luis Almagro es hacer regresar a la derecha al poder en Venezuela: Francois Houtart
¿Qué está pasando en Venezuela? Cientos de medios de comunicación en el mundo, abrogándose un derecho de ser jueces y utilizando como pruebas para un juicio público, las acusaciones de un grupo de políticos de extrema derecha, opositor al gobierno revolucionario, han concluido que en Venezuela existe una dictadura liderada por Nicolás Maduro. Por eso es muy común que muchas personas en el mundo afirmen que el presidente Venezolano es un dictador. Esos medios lo enjuician prácticamente a diario en sus publicaciones y además lo catalogan de asesino, haciéndolo responsable de las decenas de muertes ocurridas en las movilizaciones convocadas por la oposición a las que siempre acompañan con el adjetivo de “pacíficas”, mostrando solo las imágenes que sustentan su versión y suprimen las que dejan cuenta de la violencia con la que destruyen lo que pueden a su paso y el uso de armas letales, entre esas explosivos. Los generadores de esa violencia son grupos de choque conformados por miembros de la clase media o alta y otro grupo que recibe dinero a cambio de realizar desmanes en las calles. Quienes participan en esos encuentros, que parecen batallas con la policía y la Guardia Nacional Bolivariana, utilizan prácticas paramilitares al mejor estilo de las empleadas por fuerzas fascistas colombianas contra el pueblo de ese país.
También hay millones de ciudadanos que salen a la calle en defensa de su gobierno El blog venezolano La Tabla, publica unas claves que ayudan a entender lo que ha pasado en los más de 2 meses desde que comenzaron estas “protestas” en Venezuela.
-Esa violenta ofensiva que busca abiertamente acabar con el gobierno de la Revolución Bolivariana ha ocurrido en solo unos puntos del territorio venezolano. -Esos disturbios que incluyen saqueos de tiendas, ataques a hospitales, escuelas, bibliotecas, sedes de organismos públicos, de servicios y quema de autobuses son generados por un grupo de personas que no representan ni el uno por ciento de la población del país. -La mayoría de las víctimas mortales son personas que no participaban de las manifestaciones. -Los medios de comunicación sobre todo los que han surgido en formato 2.0, y las redes en general han sido determinantes en la propagación de la violencia y de su virulencia. -La historia que las grandes corporaciones de la comunicación han posicionado globalmente es que, en enormes movilizaciones, manifestantes pacíficos son reprimidos, heridos y apresados por fuerzas militares que mantienen en el poder a un dictador (Nicolás Maduro) rechazado por la mayoría de los ciudadanos.-Hay aspectos absolutamente cinematográficos, propios de una puesta en escena, que son usados para sustentar el libreto genérico de violación a los derechos humanos pese a la evidente violencia de los supuestos manifestantes. -La ofensiva es de carácter fascista, y sus acciones contemplan una combinación de formas de lucha que van desde marchas y caravanas pacíficas hasta saqueos a comercios e instalaciones públicas y ataques armados a agentes de seguridad. -Estos “combatientes-élite” tienen actualmente entre 22 y 28 años y fueron captados a partir de 2012, desde distintas organizaciones auspiciadas por factores partidistas pero no determinados por esas filiaciones. -Pueden actuar como activistas políticos o sociales que protestan pacíficamente, gestores de redes sociales o como activistas urbanos que ejercen diversos grados de violencia para imponer el caos y la ingobernabilidad. -Los datos indican que el desempeño de la Guardia Nacional Bolivariana, uno de los componentes de la Fuerza Armada del país ha sido impecable y con consecuencias fatales mínimas. -La estrategia más reciente apunta a un intento de agudizar la escasez de alimentos y otros productos por la obstaculización del transporte de hortalizas y rubros agrícolas en las regiones que proveen al resto del país.
-Esa violenta ofensiva que busca abiertamente acabar con el gobierno de la Revolución Bolivariana ha ocurrido en solo unos puntos del territorio venezolano. -Esos disturbios que incluyen saqueos de tiendas, ataques a hospitales, escuelas, bibliotecas, sedes de organismos públicos, de servicios y quema de autobuses son generados por un grupo de personas que no representan ni el uno por ciento de la población del país. -La mayoría de las víctimas mortales son personas que no participaban de las manifestaciones. -Los medios de comunicación sobre todo los que han surgido en formato 2.0, y las redes en general han sido determinantes en la propagación de la violencia y de su virulencia. -La historia que las grandes corporaciones de la comunicación han posicionado globalmente es que, en enormes movilizaciones, manifestantes pacíficos son reprimidos, heridos y apresados por fuerzas militares que mantienen en el poder a un dictador (Nicolás Maduro) rechazado por la mayoría de los ciudadanos.-Hay aspectos absolutamente cinematográficos, propios de una puesta en escena, que son usados para sustentar el libreto genérico de violación a los derechos humanos pese a la evidente violencia de los supuestos manifestantes. -La ofensiva es de carácter fascista, y sus acciones contemplan una combinación de formas de lucha que van desde marchas y caravanas pacíficas hasta saqueos a comercios e instalaciones públicas y ataques armados a agentes de seguridad. -Estos “combatientes-élite” tienen actualmente entre 22 y 28 años y fueron captados a partir de 2012, desde distintas organizaciones auspiciadas por factores partidistas pero no determinados por esas filiaciones. -Pueden actuar como activistas políticos o sociales que protestan pacíficamente, gestores de redes sociales o como activistas urbanos que ejercen diversos grados de violencia para imponer el caos y la ingobernabilidad. -Los datos indican que el desempeño de la Guardia Nacional Bolivariana, uno de los componentes de la Fuerza Armada del país ha sido impecable y con consecuencias fatales mínimas. -La estrategia más reciente apunta a un intento de agudizar la escasez de alimentos y otros productos por la obstaculización del transporte de hortalizas y rubros agrícolas en las regiones que proveen al resto del país.
Países de la OEA, EEUU, España y países gobernados por la derecha apuestan por la estocada al gobierno de Nicolás Maduro
-Desde que el expresidente de EE.UU. Barack Obama emitió el decreto donde considera a Venezuela una "amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y política exterior estadounidense", para el gobierno bolivariano y para todas sus instituciones, es cada día más difícil comprar bienes o servicios en el exterior y/o hacer transferencias de dinero para pagar esas transacciones. Un bloqueo financiero denuncia el presidente Nicolás Maduro.
Eso ha estado acompañado de los permanentes intentos de empresarios que operan en el mercado venezolano, de distorsionar el suministro de alimentos, medicamentos y otros productos, con varios fines, presionar al gobierno para que facilite la entrega de dólares a precios preferenciales, esconden esos productos para encarecer sus precios y sacarle una mayor ganancia, o utilizan las vías ilegales para venderlos en países vecinos en moneda internacional. La consecuencia, es la ausencia de los productos para los venezolanos o el encarecimiento, al punto de hacerse imposibles de comprar para la mayoría. Uno de los personajes que lidera, los ataques internacionales contra ese país es el Secretario General de la Organización de Estados Americanos Luis Almagro. Exigió la aplicación de la Carta Democrática a Venezuela con el argumento de una "crisis humanitaria" provocada por el gobierno de ese país, a quien señala de autoritario y acusa de "impedir elecciones libres que le devuelvan el poder al pueblo". Pero su silencio ante situaciones de desigualdad e inequidad en otros países de América Latina, realmente graves e ignoradas por sus gobiernos, es una clara muestra de los intereses que se esconde Almagro tras las acciones contra Venezuela. Una investigación de TeleSUR muestra que Almagro presentó “el pasado 14 de marzo un informe sobre Venezuela, financiado por la ONG International Crisis Group, auspiciada por la petroelra Exxon Mobil; el estudio también fue patrocinado por el Instituto Americano de la Empresa, que a su vez es respaldado por una petrolera con claros intereses en los recursos energéticos venezolanos”. Sobre este papel de Luis Almagro conversamos con Francois Houtart, sacerdote y sociólogo belga, reconocido académico y luchador por la justicia social en el planeta.
Houtart asegura que Luis Almagro logró engañar a mucha gente “pensábamos que él era de izquierda, por lo menos de centro, y era de derecha y él es fiel a esta actitud y hasta a la necesidad de hacer regresar a la derecha al poder y Venezuela es un lugar de relativa debilidad a la situación política actual donde hay una posibilidad para la derecha de eventualmente regresar al poder y él está solamente al servicio de este proyecto”
-Desde que el expresidente de EE.UU. Barack Obama emitió el decreto donde considera a Venezuela una "amenaza extraordinaria e inusual a la seguridad nacional y política exterior estadounidense", para el gobierno bolivariano y para todas sus instituciones, es cada día más difícil comprar bienes o servicios en el exterior y/o hacer transferencias de dinero para pagar esas transacciones. Un bloqueo financiero denuncia el presidente Nicolás Maduro.
Eso ha estado acompañado de los permanentes intentos de empresarios que operan en el mercado venezolano, de distorsionar el suministro de alimentos, medicamentos y otros productos, con varios fines, presionar al gobierno para que facilite la entrega de dólares a precios preferenciales, esconden esos productos para encarecer sus precios y sacarle una mayor ganancia, o utilizan las vías ilegales para venderlos en países vecinos en moneda internacional. La consecuencia, es la ausencia de los productos para los venezolanos o el encarecimiento, al punto de hacerse imposibles de comprar para la mayoría. Uno de los personajes que lidera, los ataques internacionales contra ese país es el Secretario General de la Organización de Estados Americanos Luis Almagro. Exigió la aplicación de la Carta Democrática a Venezuela con el argumento de una "crisis humanitaria" provocada por el gobierno de ese país, a quien señala de autoritario y acusa de "impedir elecciones libres que le devuelvan el poder al pueblo". Pero su silencio ante situaciones de desigualdad e inequidad en otros países de América Latina, realmente graves e ignoradas por sus gobiernos, es una clara muestra de los intereses que se esconde Almagro tras las acciones contra Venezuela. Una investigación de TeleSUR muestra que Almagro presentó “el pasado 14 de marzo un informe sobre Venezuela, financiado por la ONG International Crisis Group, auspiciada por la petroelra Exxon Mobil; el estudio también fue patrocinado por el Instituto Americano de la Empresa, que a su vez es respaldado por una petrolera con claros intereses en los recursos energéticos venezolanos”. Sobre este papel de Luis Almagro conversamos con Francois Houtart, sacerdote y sociólogo belga, reconocido académico y luchador por la justicia social en el planeta.
Houtart asegura que Luis Almagro logró engañar a mucha gente “pensábamos que él era de izquierda, por lo menos de centro, y era de derecha y él es fiel a esta actitud y hasta a la necesidad de hacer regresar a la derecha al poder y Venezuela es un lugar de relativa debilidad a la situación política actual donde hay una posibilidad para la derecha de eventualmente regresar al poder y él está solamente al servicio de este proyecto”
En Colombia están aumentando los asesinatos de activistas sociales o políticos pero para ese gobierno y los medios, el problema es Venezuela. Situaciones similares suceden en Honduras y México. El Terrorismo de Estado es abierto y reconocido en esos países, sin embargo todos los esfuerzos se hacen para hacer creer que el problema es Venezuela. ¿Por qué cree que esto sucede? Pienso que no hay comparación en este sentido entre Venezuela y estos otros países. En países como Colombia que conozco un poco y Honduras también porque fui miembro de la comisión de derechos humanos, son políticas sistemáticas de rechazo de los derechos humanos en función de los interés de una clase muy particular.
Lo que pasa en Venezuela me parece más una situación accidental, por una parte, la baja de los precios del petróleo ha afectado toda la política en Venezuela, y la política social en particular. Y también es el resultado de la práctica de la derecha que tiene en sus manos, al interior y en gran parte de la economía. Lo que pasa en el gobierno de Venezuela es que muy probablemente ha cometido errores en la manera de reaccionar, pero frente a una situación casi imposible a veces, como a la baja de la fuente fundamental de su propia política (petróleo). Pero no es una política sistemática en favor de los intereses de los más poderosos. A pesar de eso, he dicho que la respuesta a la crisis puede ser bastante inadecuada. Por ejemplo en el caso del Arco Minero del Orinoco, es casi el retorno a una situación anterior, dando más y más concesiones a las grandes multinacionales porque no se ve otra solución.
Lo que pasa en Venezuela me parece más una situación accidental, por una parte, la baja de los precios del petróleo ha afectado toda la política en Venezuela, y la política social en particular. Y también es el resultado de la práctica de la derecha que tiene en sus manos, al interior y en gran parte de la economía. Lo que pasa en el gobierno de Venezuela es que muy probablemente ha cometido errores en la manera de reaccionar, pero frente a una situación casi imposible a veces, como a la baja de la fuente fundamental de su propia política (petróleo). Pero no es una política sistemática en favor de los intereses de los más poderosos. A pesar de eso, he dicho que la respuesta a la crisis puede ser bastante inadecuada. Por ejemplo en el caso del Arco Minero del Orinoco, es casi el retorno a una situación anterior, dando más y más concesiones a las grandes multinacionales porque no se ve otra solución.
¿La restauración de gobiernos conservadores o de derecha en algunos de nuestros países se da porque los gobiernos progresistas o de izquierda lo han hecho mal o es parte de movimiento pendular de la política? Yo personalmente no creo en un movimiento pendular. Ese tipo de concepto me parece demasiado mecánico, especialmente cuando se trata de un cambio de sociedad. Esto no es perdurable. Pienso que son los resultados de luchas de clases, ahora las clases dominantes están retomando un cierto poder por mucha razones. Una de las razones es seguramente la debilidad de los nuevos gobiernos que fueron para mi post-neoliberales, que han reconstruido el papel del Estado pero no post-capitalistas, y en este sentido no han introducido en la dinámica política de América Latina una transformación realmente fundamental. Y todas las contradicciones del capitalismo regresan especialmente en momentos de crisis, como tenemos ahora la crisis de las comóditis, de las materias primas o las materia de exportación agrícola, porque con los precios buenos que tuvieron durante los últimos 10 años, los gobiernos progresistas de América Latina, han utilizado esta fuente de recursos para tener políticas sociales pero no para transformar fundamentalmente a la sociedad. Ahora la crisis afecta a estos gobiernos que en parte, los que existen hoy en día como en Bolivia, Ecuador o en Nicaragua y también en Venezuela, han introducido al interior este retorno del conservatismo, es una cierta derecha al interior de los gobiernos progresistas. Eso es un factor. Otro es el factor de la corrupción, esa es una situación que afecta en la opinión pública, en parte a la opinión publica de las clases sociales más débiles en el campo económico y que evidentemente tienen dificultades mortales.
¿Cree que el camino que se recorre sobre todo en los países donde nuevamente llegaron gobiernos de derecha es el camino correcto? Evidentemente en los países como Argentina y Brasil, el regreso de la derecha al poder es evidentemente un hecho extremamente negativo, porque significa una derecha no solamente local, interna, sino una derecha con vínculos internacionales y que evidentemente representa los intereses del capital nacional y capital financiero y en ese sentido es un proceso grave y bastante negativo. Y si este proceso continúa en América Latina estamos de nuevo frente a una situación que podría durar un cierto tiempo porque la amenaza del capital internacional es bastante grande.
¿Cómo cree que será la relación de Donald Trump con los gobiernos conservadores de la región y con los de tendencia más progresistas o de izquierda? La política de Trump evidentemente es una política con la que va a actuar más o menos igual frente a todos los países latinoamericanos y en ese sentido puede ser la oportunidad de una reacción común frente a este tipo de política. Esta fue por lo menos la opinión de Rafael Correa, por ejemplo.
Segundo, evidentemente como los Estados Unidos son una institución de tipo imperialista, eso no variará. No podemos pensar que si Trump quiere aislar a EE.UU. para alcanzar un desarrollo local, pueda evitar una política imperialista. Esta política va a continuar y necesariamente va a tomar los países que reaccionaron contra este imperialismo de manera diferente. No pienso que vaya a tratar de la misma manera a Colombia y a Ecuador a menos que en Ecuador en el cambio que hay poco a poco, que los ha obligado a retomar el contacto con el FMI y con el banco Goldman Sach, etcétera, está más cerca de algunos intereses norteamericanos. Pero supongo que vamos a tener una cierta diferencia de política según los países latinoamericanos, es evidente que Macri y Temer son aliados totalmente privilegiados de los EEUU y que van a seguir los intereses de los EEUU porque son los intereses del capital internacional. Aún si tiene una perspectiva diferente de la perspectiva globalizada que había, pero sigue los intereses del capital y del capital norteamericano.
Segundo, evidentemente como los Estados Unidos son una institución de tipo imperialista, eso no variará. No podemos pensar que si Trump quiere aislar a EE.UU. para alcanzar un desarrollo local, pueda evitar una política imperialista. Esta política va a continuar y necesariamente va a tomar los países que reaccionaron contra este imperialismo de manera diferente. No pienso que vaya a tratar de la misma manera a Colombia y a Ecuador a menos que en Ecuador en el cambio que hay poco a poco, que los ha obligado a retomar el contacto con el FMI y con el banco Goldman Sach, etcétera, está más cerca de algunos intereses norteamericanos. Pero supongo que vamos a tener una cierta diferencia de política según los países latinoamericanos, es evidente que Macri y Temer son aliados totalmente privilegiados de los EEUU y que van a seguir los intereses de los EEUU porque son los intereses del capital internacional. Aún si tiene una perspectiva diferente de la perspectiva globalizada que había, pero sigue los intereses del capital y del capital norteamericano.
¿Qué deben hacer la izquierda y los gobiernos progresistas para consolidarse como una opción real y sostenible del mantenimiento de la vida en el planeta y de la paz?
Pienso que estamos frente a una necesidad de reflexionar muy urgentemente. La restauración conservadora de la que se habla mucho en América Latina en este momento se realiza en parte dentro de los gobiernos progresistas, eso sucede claramente por ejemplo en Ecuador. Son muchas razones, son intereses particulares y a veces razones de política general, pero es un hecho. Lo que significa que la izquierda debe repensar su proyecto. Debemos refundar a la izquierda no sólo en América Latina, sucede más o menos lo mismo en varias regiones del mundo. Pero en América Latina en particular lo que hubo fue estos ensayos de regímenes post neoliberales pero no postcapitalistas.
Así redefinir un objetivo postcapitalista, un objetivo que podemos llamar también ecosocialista, no importa el nombre. Yo he tratado de reflexionar sobre eso, hablando del bien común de la humanidad como un paradigma postcapitalista, pero evidente socialista en el sentido fundamental de la palabra.
Redefinir no significa olvidar el pasado, no significa que no se ha hecho nada. Tenemos una herencia de pensamiento, de luchas populares, de movimientos populares, tiene su peso histórico. Redefinir en función de la situación actual y aplicar un concepto postcapitalista, un paradigma postcapitalista a las realidades de la relación con la naturaleza que ha tomado un papel muy fundamental en función de la destrucción de la madre tierra, de la naturaleza. También en función de la redefinición de la manera como los seres humanos producen su base material. También reflexionar sobre el tipo de organización colectiva, social y política y finalmente la interculturalidad que no permite que continuemos con la civilización occidental influida por la modalidad del capitalismo como la única cultura mundial posible.
Así redefinir el paradigma, redefinir las visiones para llegar a este fin son objetivos muy fundamentales para que la izquierda se recomponga. Pienso que con las experiencias que hemos tenido en América Latina hay una tal debilidad de los partidos de izquierda que tenemos que renovar la perspectiva. Hay gente muy valiosa y gente de izquierda en estos movimientos políticos pero debemos repensar el asunto para establecer bases nuevas de las luchas sociales, reconstruir los movimientos sociales que a veces fueron instrumentalizados con fines políticos, y a corto plazo solo electorales, para llegar de nuevo a una perspectiva de lucha que permita transformar la sociedad en profundidad.
Pienso que estamos frente a una necesidad de reflexionar muy urgentemente. La restauración conservadora de la que se habla mucho en América Latina en este momento se realiza en parte dentro de los gobiernos progresistas, eso sucede claramente por ejemplo en Ecuador. Son muchas razones, son intereses particulares y a veces razones de política general, pero es un hecho. Lo que significa que la izquierda debe repensar su proyecto. Debemos refundar a la izquierda no sólo en América Latina, sucede más o menos lo mismo en varias regiones del mundo. Pero en América Latina en particular lo que hubo fue estos ensayos de regímenes post neoliberales pero no postcapitalistas.
Así redefinir un objetivo postcapitalista, un objetivo que podemos llamar también ecosocialista, no importa el nombre. Yo he tratado de reflexionar sobre eso, hablando del bien común de la humanidad como un paradigma postcapitalista, pero evidente socialista en el sentido fundamental de la palabra.
Redefinir no significa olvidar el pasado, no significa que no se ha hecho nada. Tenemos una herencia de pensamiento, de luchas populares, de movimientos populares, tiene su peso histórico. Redefinir en función de la situación actual y aplicar un concepto postcapitalista, un paradigma postcapitalista a las realidades de la relación con la naturaleza que ha tomado un papel muy fundamental en función de la destrucción de la madre tierra, de la naturaleza. También en función de la redefinición de la manera como los seres humanos producen su base material. También reflexionar sobre el tipo de organización colectiva, social y política y finalmente la interculturalidad que no permite que continuemos con la civilización occidental influida por la modalidad del capitalismo como la única cultura mundial posible.
Así redefinir el paradigma, redefinir las visiones para llegar a este fin son objetivos muy fundamentales para que la izquierda se recomponga. Pienso que con las experiencias que hemos tenido en América Latina hay una tal debilidad de los partidos de izquierda que tenemos que renovar la perspectiva. Hay gente muy valiosa y gente de izquierda en estos movimientos políticos pero debemos repensar el asunto para establecer bases nuevas de las luchas sociales, reconstruir los movimientos sociales que a veces fueron instrumentalizados con fines políticos, y a corto plazo solo electorales, para llegar de nuevo a una perspectiva de lucha que permita transformar la sociedad en profundidad.
¿Cuál cree que ha sido la influencia que la iglesia católica en los cambios que experimenta América Latina? De hecho la iglesia católica en América Latina, desde hace varios años, no ha jugado un papel muy central en la política. Evidentemente hubo en el pasado identificación entre la derecha y a veces una derecha dura y una parte de la jerarquía eclesiástica. Pero después hubo todo el surgimiento de la teología de la liberación que fueron muy identificadas con las luchas populares y contra las dictaduras militares, y contra el ALCA. Aquí durante un tiempo hubo presencia bastante fuerte de una corriente opuesta a la hegemonía de la derecha en el continente latinoamericano. Después durante varios años, en gran por parte por la política eclesiástica del Papa Juan pablo II hubo una represión de la teología de la liberación y realmente hay una debilidad bastante grande de esta corriente. Eso produjo un cierto retiro de la iglesia más progresista del campo político. Lo que ha pasado últimamente no pienso que esté muy relacionado con una influencia importante de la iglesia. Seguramente que una parte del episcopado en los últimos 30 años con el Papa Juan pablo II ha jugado papel y ha tenido influencia pero con la llegada del Papa Francisco, hemos tenido una nueva orientación, es decir una orientación mucho más dura frente a un sistema económico de tipo salvaje y que aparece en las declaraciones del papa como inaceptable. No digo que todo el episcopado latinoamericano ha seguido al Papa Francisco hasta ahora porque hay todavía episcopados muy conservadores como en México por ejemplo, pero hubo nuevos espacios para una iglesia más social, más comprometida con los pobres y los oprimidos del continente. Esta corriente no está en favor de los nuevos regímenes. En Brasil una parte importante de la conferencia episcopal de Brasil no está en favor del régimen de temer por ejemplo. Pero no hubo acciones espectaculares, no hubo declaraciones muy fuertes y eso da como resultado una cierta debilidad de la iglesia católica en América Latina después del largo pontificado de Juan Pablo II.
Lo que está pasando en Siria, las grandes potencias de este planeta están enfrentadas allí y con consecuencias terribles para millones de ciudadanos. Pero esa guerra tendrá un resultado. ¿Cree que se consolidará un cambio en la distribución de poderes en el planeta, habrá equilibrio de poderes? Es fundamental, estuve en Siria, en la misión de paz de lo que se llama la sociedad civil y pude tener una larga conversación con Bashar Al Assad hace tras año ahora. Pienso que Siria es un lugar absolutamente central, donde el futuro de los equilibrios internacionales y de las políticas internacionales se está construyendo y las conversaciones de ginebra que son extremadamente difíciles, son esenciales. No sabemos cuál va a ser la actitud de (Donald) Trump frente a esta situación pero si hay una posibilidad de acercamiento entre (Vadimir) Putin y Trump para llevar una cierta paz a la región y en particular a Siria, eso pudiera ser, por lo menos desde el punto de vista pragmático, un paso adelante en favor de la paz en esta región. La situación es dramática y hay estos aspectos inmediatos pero también hay los aspectos a largo plazo que significan un nuevo equilibrio entre grandes potencias como EE.UU. por una parte, Rusia y China por otra parte. Siria es un lugar absolutamente central.