Jamal Al Durrah (+VIDEOS)
Entrevista exclusiva con Jamal Al Durrah, el padre de Mohammad Al Durrah asesinado por la ocupación israelí.
No puedo olvidar la muerte de mi hijo. Ha sido el momento más duro de mi vida. Es una herida difícil de curar. En aquellos momentos él estaba en mis brazos e intenté protegerlo de las balas sionistas con mi cuerpo, pero fue alcanzado por la metralla.
Han pasado 16 años y el palestino Jamal Al Durrah nos recuerda, con notable abatimiento, el día en que a su lado murió su hijo Mohammad, baleado por las fuerzas del régimen israelí.
Mohammad Al Durrah era el segundo hijo de Jamal, tenía entonces 12 años. Era un niño fuerte y muy valiente, le gustaba -pese a su corta edad- sentarse y hablar con las personas mayores sobre la situación de su país.
Era muy querido y respetado por todos, desbordaba generosidad, siempre defendió de cualquier amenaza el campamento de refugiados de Al-Burey, donde residía. Quería mucho a su madre. De los seis hermanos, Mohammad era la columna vertebral de la casa, siempre cumplió con cualquier tarea que se le diera, cuenta el padre.
Jamal vive en la Franja de Gaza. Nos dice que la vida allí es muy difícil. "La Franja de Gaza es como una gran presión cerrada, estamos asediados, no hay empleo, los universitarios no encuentran trabajo en ningún sector de la vida social. La situación es catastrófica, necesitamos otros 100 años más para construir a Gaza, siempre asediada por las medidas sionistas", remarcó.
Nos toca entonces -dijo- apoyar la resistencia y respaldar al pueblo palestino con hechos, no con promesas.
Después del asesinato de su hijo a manos de soldados israelíes, a Jamal le abrieron otras puertas del mundo, pero no aceptó.
"No hay como la tierra de Palestina, no aceptaré ninguna otra puerta que no sea la de mi país. Nos sacrificaremos por liberar a Palestina del ocupante opresor. Tenemos el derecho de defender a nuestra patria.
"Es importante alcanzar la libertad y la independencia no solo para mis hijos, sino también para todo mi pueblo. Todos los hijos del pueblo palestino son mis hijos, y Mohammad es hijo también de este pueblo.
"Todo lo que está sucediendo en Palestina afecta a nuestra nación, por tanto quiero lo mejor para ella, quiero ver a los niños palestinos felices como otros niños del mundo, que vivan con plena seguridad e independencia.
"Basta de represión: Hemos visto como el ocupante israelí, con la mayor arrogancia, prohíbe la llamada Oración en la mezquita de Al-Aqsa. Lamentablemente toda la nación guarda silencio ante este crimen y ningún líder árabe se atreve a salir y decirlo no, basta.
Han pasado 16 años y el palestino Jamal Al Durrah nos recuerda, con notable abatimiento, el día en que a su lado murió su hijo Mohammad, baleado por las fuerzas del régimen israelí.
Mohammad Al Durrah era el segundo hijo de Jamal, tenía entonces 12 años. Era un niño fuerte y muy valiente, le gustaba -pese a su corta edad- sentarse y hablar con las personas mayores sobre la situación de su país.
Era muy querido y respetado por todos, desbordaba generosidad, siempre defendió de cualquier amenaza el campamento de refugiados de Al-Burey, donde residía. Quería mucho a su madre. De los seis hermanos, Mohammad era la columna vertebral de la casa, siempre cumplió con cualquier tarea que se le diera, cuenta el padre.
Jamal vive en la Franja de Gaza. Nos dice que la vida allí es muy difícil. "La Franja de Gaza es como una gran presión cerrada, estamos asediados, no hay empleo, los universitarios no encuentran trabajo en ningún sector de la vida social. La situación es catastrófica, necesitamos otros 100 años más para construir a Gaza, siempre asediada por las medidas sionistas", remarcó.
Nos toca entonces -dijo- apoyar la resistencia y respaldar al pueblo palestino con hechos, no con promesas.
Después del asesinato de su hijo a manos de soldados israelíes, a Jamal le abrieron otras puertas del mundo, pero no aceptó.
"No hay como la tierra de Palestina, no aceptaré ninguna otra puerta que no sea la de mi país. Nos sacrificaremos por liberar a Palestina del ocupante opresor. Tenemos el derecho de defender a nuestra patria.
"Es importante alcanzar la libertad y la independencia no solo para mis hijos, sino también para todo mi pueblo. Todos los hijos del pueblo palestino son mis hijos, y Mohammad es hijo también de este pueblo.
"Todo lo que está sucediendo en Palestina afecta a nuestra nación, por tanto quiero lo mejor para ella, quiero ver a los niños palestinos felices como otros niños del mundo, que vivan con plena seguridad e independencia.
"Basta de represión: Hemos visto como el ocupante israelí, con la mayor arrogancia, prohíbe la llamada Oración en la mezquita de Al-Aqsa. Lamentablemente toda la nación guarda silencio ante este crimen y ningún líder árabe se atreve a salir y decirlo no, basta.
La justicia francesa
Jamal cuenta que fue vilmente acusado en Francia por presuntamente alterar el testimonio sobre la muerte de su hijo, grabada en un video por reportero que cubría el incidente en el que murió Mohammad.
"Toda la acusación recayó sobre mí. Después de un largo proceso se demostró que la cinta no fue transcrita y ello se erigió en una condena contra la entidad sionista por ese crimen.
"En el juicio, los acusadores dijeron que yo no había sufrido lesiones. Ante esa situación hice varias demandas. La primera y la segunda las gané, pero en la tercera ellos falsearon el procedimiento de apelación.
"Recuerdo que un médico francés de la Franja de Gaza se presentó ante el tribunal y analizó todas las heridas, las filmó y vio todo lo que pasó en mis manos y en mi cuerpo. Después tomó todos los papeles, informes y las imágenes de radiografías, y las presentó ante la corte probando mi inocencia, pero desafortunadamente en el tercero juicio la justicia francesa no funcionó.
Recordó Jamal que Netanyahu había dado instrucciones personales a esos tribunales sionistas. "Yo hice un llamamiento para que todos se pusieran me apoyaran, pero hasta este momento nadie me ha apoyado, solo Dios.
"Mis manos marcadas por las heridas del fuego sionista necesitan tratamiento en un país avanzado en la medicina. He suplicado al presidente Abu Mazen y a todas los personas celosas y que aman a la población palestina para que me ayudaran a completar los tratamientos, pero no ha sido posible. Algunos países que poseen la tecnología de avanzada para el tratamiento piden solicitan informes complejos, y hasta ahora no se ha podido llegar a ningún resultado".
"Toda la acusación recayó sobre mí. Después de un largo proceso se demostró que la cinta no fue transcrita y ello se erigió en una condena contra la entidad sionista por ese crimen.
"En el juicio, los acusadores dijeron que yo no había sufrido lesiones. Ante esa situación hice varias demandas. La primera y la segunda las gané, pero en la tercera ellos falsearon el procedimiento de apelación.
"Recuerdo que un médico francés de la Franja de Gaza se presentó ante el tribunal y analizó todas las heridas, las filmó y vio todo lo que pasó en mis manos y en mi cuerpo. Después tomó todos los papeles, informes y las imágenes de radiografías, y las presentó ante la corte probando mi inocencia, pero desafortunadamente en el tercero juicio la justicia francesa no funcionó.
Recordó Jamal que Netanyahu había dado instrucciones personales a esos tribunales sionistas. "Yo hice un llamamiento para que todos se pusieran me apoyaran, pero hasta este momento nadie me ha apoyado, solo Dios.
"Mis manos marcadas por las heridas del fuego sionista necesitan tratamiento en un país avanzado en la medicina. He suplicado al presidente Abu Mazen y a todas los personas celosas y que aman a la población palestina para que me ayudaran a completar los tratamientos, pero no ha sido posible. Algunos países que poseen la tecnología de avanzada para el tratamiento piden solicitan informes complejos, y hasta ahora no se ha podido llegar a ningún resultado".
El derecho humano de los niños palestinos
En otro momento de la entrevista, Jamal retoma el tema de los niños que están siendo asesinados y quemados como Abu Khudera, la detención arbitraria de infantes y las condenas excesivas a que son sometidos.
A juicio de Jamal si el niño Abu Khudera fuera israelí y quemado, el mundo entero hubiera estado en contra del pueblo palestino. Pero si son los hijos palestinos los que son juzgados por decenas de años, entonces el mundo entero lo desconoce.
¿Acaso somos seres extraños o anormales? ¿Dónde están los derechos humanos cuando se trata del pueblo palestino?, se pregunta Jamal.
"Los derechos humanos son una institución, es sólo un nombre sin ninguna acción o efecto sobre la faz de la tierra, sobre todo cuando se trata de los hijos del pueblo palestino, que son asesinados a diario.
"En estos casos -insiste- no vemos a las autoridades que tienen que velar por el respeto de los derechos humanos. Si el niño o los niños muertos son israelíes entonces sale Ban Ki-moon condenando al pueblo palestino y nos convierten en terroristas.
"Nuestros niños están siendo asesinados y ellos no son terroristas. Pero por desgracia, aquí la víctima se convierte en terrorista y el asesino es el inocente.
Al referirse al tema de la división palestina, manifestó que espera que los responsables de esa división acaben con ella. "Poner fin a la división significa principalmente el fin de nuestro sufrimiento, con el fin de la división nuestra decisión será una y no dos. Ahora tenemos problemas, Gaza forma un estado y Cisjordania otro, Gaza es un gobierno y Cisjordania otro. Lamentablemente, durante estos años hemos perdido mucho, perdimos a Palestina".
Ahora el régimen israelí prohíbe la oración en Al-Aqsa, y aumenta la construcción de asentamientos ilegales. Cada día toman un permiso y luz verde de Estados Unidos, eso significa que Israel incrementa sus acciones y dentro de varios años no quedará ni una sola pulgada de Palestina sin asentamientos.
A juicio de Jamal si el niño Abu Khudera fuera israelí y quemado, el mundo entero hubiera estado en contra del pueblo palestino. Pero si son los hijos palestinos los que son juzgados por decenas de años, entonces el mundo entero lo desconoce.
¿Acaso somos seres extraños o anormales? ¿Dónde están los derechos humanos cuando se trata del pueblo palestino?, se pregunta Jamal.
"Los derechos humanos son una institución, es sólo un nombre sin ninguna acción o efecto sobre la faz de la tierra, sobre todo cuando se trata de los hijos del pueblo palestino, que son asesinados a diario.
"En estos casos -insiste- no vemos a las autoridades que tienen que velar por el respeto de los derechos humanos. Si el niño o los niños muertos son israelíes entonces sale Ban Ki-moon condenando al pueblo palestino y nos convierten en terroristas.
"Nuestros niños están siendo asesinados y ellos no son terroristas. Pero por desgracia, aquí la víctima se convierte en terrorista y el asesino es el inocente.
Al referirse al tema de la división palestina, manifestó que espera que los responsables de esa división acaben con ella. "Poner fin a la división significa principalmente el fin de nuestro sufrimiento, con el fin de la división nuestra decisión será una y no dos. Ahora tenemos problemas, Gaza forma un estado y Cisjordania otro, Gaza es un gobierno y Cisjordania otro. Lamentablemente, durante estos años hemos perdido mucho, perdimos a Palestina".
Ahora el régimen israelí prohíbe la oración en Al-Aqsa, y aumenta la construcción de asentamientos ilegales. Cada día toman un permiso y luz verde de Estados Unidos, eso significa que Israel incrementa sus acciones y dentro de varios años no quedará ni una sola pulgada de Palestina sin asentamientos.
La unidad y la solidaridad son nuestras victorias
Jamal hizo un llamado a la unidad de los palestinos. "Tenemos que estar juntos. Nuestro Dios dijo: Nuestra unidad es fuerza, y la desunión es debilidad. La unidad y la solidaridad son nuestras victorias".
"Nosotros agradecemos a los pueblos de América Latina por su apoyo a la causa palestina. Nuestro pueblo necesita un respaldo real y efectivo de todos los pueblos del mundo.
"Me hubiera gustado encontrarme con Fidel para explicarle todo el caso palestino y todo lo que está sucediendo aquí, transmitirle la verdadera imagen de los hechos dentro de las tierras palestinas.
"Me duele mucho lo que a diario veo en Palestina: operativos sistemáticos para asesinar y liquidar a ciudadanos palestinos, el robo de las tierras ante los ojos del mundo. Y lo peor es que nadie se mueve para ayudar y apoyar".
Jamal aprovecho la ocasión para dirigir un mensaje a todas las comunidades palestinas para que respalden a su pueblo y contribuyan con la acción a liberar las tierras en manos de los ocupantes sionistas. "Sería bueno realizar visitas fuera de aquí para explicar al mundo ante las cámaras y canales de televisión, todo cuanto padece nuestro pueblo.
Los fragmentos del asesinato:
"Nosotros agradecemos a los pueblos de América Latina por su apoyo a la causa palestina. Nuestro pueblo necesita un respaldo real y efectivo de todos los pueblos del mundo.
"Me hubiera gustado encontrarme con Fidel para explicarle todo el caso palestino y todo lo que está sucediendo aquí, transmitirle la verdadera imagen de los hechos dentro de las tierras palestinas.
"Me duele mucho lo que a diario veo en Palestina: operativos sistemáticos para asesinar y liquidar a ciudadanos palestinos, el robo de las tierras ante los ojos del mundo. Y lo peor es que nadie se mueve para ayudar y apoyar".
Jamal aprovecho la ocasión para dirigir un mensaje a todas las comunidades palestinas para que respalden a su pueblo y contribuyan con la acción a liberar las tierras en manos de los ocupantes sionistas. "Sería bueno realizar visitas fuera de aquí para explicar al mundo ante las cámaras y canales de televisión, todo cuanto padece nuestro pueblo.
Los fragmentos del asesinato: