Las declaraciones de Lavrov sobre los judíos... ¿Habría comenzado la guerra rusa contra “Israel”?
A la espera de que se decida la operación militar en Ucrania y se logren sus objetivos a corto plazo así como aquellos a largo plazo, parece claro que sus repercusiones continuarán, ya que Moscú movilizará todo su potencial para hacer frente a la perversidad israelí, y los rusos que han convivido con los judíos por más de mil años la conocen mejor que otros.
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Las declaraciones de Lavrov sobre los judíos... ¿Habría comenzado la guerra rusa contra “Israel”?
Como se esperaba (mi artículo titulado “Después de la guerra en Ucrania… ¿Se vengaría Putin de los gobernantes de “Israel”? ¿Y cuándo?”, con fecha del 27 de febrero), comenzó la guerra rusa contra “Israel”, esta vez expresada en las palabras del ministro Lavrov, quien dirigió sus flechas hacia la misma, utilizando expresiones que nadie antes había mencionado, como dicen los judíos y se trata de la relación de Hitler y los nazis con los judíos.
Lavrov, quien es conocido por su inteligencia y sofisticación diplomática, no se expresó de forma improvisada, sino que fue directo cuando habló sobre el judaísmo de Zelensky y su relación con los grupos nazis en Ucrania y continuo señalando: “puede que me equivoque, pero Adolf Hitler también tenía ascendencia judía”.
Fuentes rusas dijeron que “Lavrov está muy consciente de lo que quiso
señalar”, refiriéndose a “documentos históricos conservados en los archivos soviéticos, y que dicen que la madre de Hitler era de origen judío, también como sería el caso de su abuela María Schicklgruber, que quedó embarazada cuando trabajaba como empleada en una de las casas judías”.
La reacción israelí de boca del ministro Yair Lapid fue rápida y violenta, quien consideró que las declaraciones del ministro Lavrov eran “vergonzosas e imperdonables, y representan un grave error histórico”, mientras que el primer ministro Bennett dijo que eran “extremadamente peligrosas”, lo que significaría que “Tel Aviv” declarará con sus fuerzas regionales e internacionales una guerra “con guante de seda” contra Moscú, que previamente había declarado esta guerra a través de sus recientes declaraciones en las que criticaba “las políticas de Israel en el Golán sirio y los territorios palestinos ocupados”.
Las relaciones ruso-israelíes, se han enfriado y en momentos atraviesan por una etapa seria de tensión, a causa del apoyo israelí a Kiev y al presidente judío Zelensky, quien pidió la ayuda a los judíos del mundo; asimismo, ha quedado claro que se producirán acalorados enfrentamientos entre Moscú y “Tel Aviv”, y con las organizaciones del lobby judío en Estados Unidos y el mundo entero, después de la traición de los judíos al presidente Putin.
El ministro Lavrov, y sin duda con él la diplomacia rusa y los centros de poder originados en la Unión Soviética, están muy conscientes de que la guerra de Rusia con Estados Unidos y sus aliados en occidente significará a fin de cuentas, una guerra de Moscú junto con Pekín contra los judíos, porque son el elemento más importante en los enfrentamientos financieros actuales y futuros junto con Washington y las capitales occidentales.
Todos saben, y eso fue expresado por el presidente Putin, que “Rusia y China, con el apoyo de sus aliados, buscan establecer un nuevo orden mundial lejos de la hegemonía del dólar estadounidense”, asimismo, todos saben que el principal afectado por los proyectos y esquemas económicos y financieros de Moscú y Beijing, serán los judíos que controlan los mercados financieros estadounidenses y europeos, y que intentaron hacerlo también en Rusia.
Los informes hablan de los esfuerzos del presidente Putin y de los dirigentes rusos para asediarlos y limitar su influencia, como un primer paso en el camino hacia una confrontación abierta con “Israel”, hecho al que seguirán acciones sucesivas que inquietarán a “Tel Aviv”. de una forma o de otra; asimismo, hablan los informes de persecuciones directas e indirectas a empresarios y magnates rusos judíos acusados de lavado de dinero y del contrabando de divisas de Rusia hacia “Israel”.
Existe información que señala que es posible que el presidente Putin promulgue pronto una ley que prohíba la doble ciudadanía y esto apunta a los rusos que poseen al mismo tiempo pasaportes israelíes y se movilizan entre Rusia e “Israel”, y su número se calcula en alrededor de un millón.
El Kremlin no ha descuidado el hecho de hacer seguimiento a los medios rusos para evitar que plumas judías influyentes transmitieran propaganda a favor de “Israel” y Ucrania, en medio de señalamientos que no descartan que los centros de decisión rusos, inflamen los sentimientos nacionalistas de los rusos en contra de los judíos, de quienes todavía conservan malos recuerdos desde los tiempos de la Rusia zarista y la Unión Soviética y posteriormente después de su caída; estos lograron controlar una serie de centros de toma de decisiones políticas, económicas y financieras bajo el presidente Yeltsin y jugaron un papel importante durante su gobierno en la eliminación del legado de los soviéticos y en la destrucción económica y financiera de Rusia, en particular en lo que se refiere a los proyectos de privatización que abrieron las puertas de Rusia de par en par a empresas internacionales con capital judío; pero la respuesta rusa más contundente a “Israel” se produciría en Siria, que sería escenario de una grave tensión entre las dos partes, luego de que Moscú logre sus objetivos en Ucrania.
Esto explica por qué “Tel Aviv” moviliza todo su potencial en Washington, e incluso en Alemania, la cuna del nazi Hitler, así como explica la posición del gobierno alemán encabezado por el socialdemócrata Olaf Scholz, y más importante aún la de su ministra de Asuntos Exteriores Baerbock, líder del partido Alianza 90/Los Verdes, que se supone debería favorecer las gestiones de paz, pero habla diariamente de la necesidad de apoyar a Kiev con armamento alemán pesado; parece claro que esto es así gracias a las campañas lanzadas por los poderosos medios judíos en Alemania, como es el caso en otras capitales europeas en las que “Tel Aviv” incita a sus habitantes en contra de Rusia.
“Tel Aviv” también incitaría a Turquía contra Rusia tras su acercamiento y alianza con Ankara, que pronto se consolidará con la visita del presidente Erdoğan a “Tel Aviv” el próximo mes; todo el mundo sabe que Moscú espera aprovechar las oportunidades para vengarse de "Israel" y no se siente cómoda con la postura turca en Ucrania (mi artículo titulado “Erdoğan, Putin y Bennett... los estrechos a cambio de Idlib, entonces, ¿qué pasa con “Israel”?, del 7 de marzo), eso sin mencionar la decisión de Ankara la semana pasada de cerrar el espacio aéreo turco a los vuelos de las aeronaves del ejército ruso que se dirigen a Siria.
A la espera de que se decida la operación militar en Ucrania y se logren sus objetivos a corto plazo así como aquellos a largo plazo, parece claro que sus repercusiones continuarán, ya que Moscú movilizará todo su potencial para hacer frente a la perversidad israelí, y los rusos, que han convivido con los judíos durante más de mil años la conocen mejor que otros, y ahora lamentan haber apoyado la partición de Palestina y el reconocimiento del estado de “Israel”, que siempre fue un enemigo jurado de los soviéticos, porque apoyaron la marea nacionalista en el mundo árabe, y ahora los rusos apoyan a Siria y a la resistencia, y se solidarizan con Irán, ¡y los judíos no les perdonan eso!