El diputado por el Partido de la Falange libanesa, Nadim Gemayel, dijo que la única solución para el regreso de los desplazados sirios a su país es la coordinación entre los gobiernos de El Líbano y Siria, con apoyo de las Naciones Unidas o la Cruz Roja o bajo los auspicios de cualquier país como Rusia, con el propósito de trasladarlos a sus áreas seguras en Siria.

En entrevista con Al Mayadeen, Gemayel dijo que el rápido retorno de los refugiados sirios a su país es una necesidad y una prioridad absoluta para El Líbano. Señaló que es necesario devolverlos de manera segura, digna y deliberada.

Explicó que si esta coordinación y la relación entre ambos países esta relación llevarán al regreso de las personas desplazadas a Siria, "estamos listos para esto, que es nuestra posición como partido durante mucho tiempo", y enfatizamos que "esta es una posición estratégica y demográfica".

Añadió que es importante para ellos el destino de El Líbano. Reiteró estar listo para coordinar con cualquier partido en El Líbano para resolver este problema ".

Enfatizó que es hora de resolver el problema de las personas desplazadas en El Líbano.

En cuanto al registro actual entre el Ministerio de Relaciones Exteriores libanés y el ACNUR, Gemayel hizo hincapié en que no apoya la apertura de ningún problema con el ACNUR, sino que busca soluciones objetivas y serias. Si bien dijo que el ACNUR podría implementar una agenda de acuerdo con su política, señaló en que los políticos libaneses también deberían tener su propia agenda para resolver el problema.

Gemayel reveló que el Partido Falange tiene actualmente una visión, una hoja de ruta para estudiar y un proyecto que se puede presentar a todos los partidos políticos libaneses, incluidos los aliados y el otro equipo en el gobierno libanés.

Estamos muy preocupados por la congelación de permisos de residencia para nuestro personal

En una declaración al corresponsal de Al-Mayadeen en Ginebra, el ACNUR hizo hincapié en la importancia de trabajar con El Líbano para encontrar soluciones, con la esperanza de reconsiderar rápidamente la decisión del Ministro de Relaciones Exteriores libanés.

El ACNUR señaló que estaba "profundamente preocupado por el anuncio hecho por el Ministro de Relaciones Exteriores de El Líbano, Gebran Bassil, de la expedición de permisos de residencia al personal del ACNUR por el impacto en su capacidad para llevar a cabo sus funciones".

La decisión del Ministro de Relaciones Exteriores libanés de dejar de renovar la estadía del personal del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados de las Naciones Unidas ha sido un avance notable en la relación ya ambigua entre las partes, especialmente después de que el ACNUR no acogió con satisfacción el regreso de Refugiados sirios a su país.

El Ministerio de Relaciones Exteriores libanés anunció que está considerando un procedimiento progresivo contra el ACNUR, donde Bassil instruyó a la Dirección de Protocolo para detener las solicitudes de alojamiento al Ministerio a favor de la Comisión en El Líbano.

La decisión del Ministerio de Relaciones Exteriores libanés se basó en un informe que muestra que la Comisión no está alentando a los refugiados sirios en El Líbano a regresar a su país y los está intimidando para que regresen, mientras que este negó las acusaciones del ministro libanés de Relaciones Exteriores.

"Nuestra responsabilidad es asegurarnos de que el regreso de los refugiados sea voluntario y de que no corran peligro a su regreso", dijo el portavoz del ACNUR, William Spindler, quien subrayó que "la situación en Siria no es adecuada para el regreso".

El 26 de mayo, el Ministerio de Relaciones Exteriores libanés también envió sendas cartas al Ministerio de Relaciones Exteriores de Siria y al Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, en las que expresó la preocupación de El Líbano por la Ley 10 emitida en Siria sobre el regreso de los desplazados.