El cortoplacismo económico impacta en la biodiversidad, según estudio
Tan solo el dos por ciento de los estudios analizados consulta con las partes interesadas sus conclusiones acerca de la valoración de la naturaleza y únicamente el uno por ciento las tiene en cuenta en cada uno de los pasos del proceso de valoración de la naturaleza.
El Informe de evaluación sobre los valores diversos y la valoración de la naturaleza, elaborado por 82 científicos y expertos de todo el mundo, señala que esta tendencia mundial dominante a concentrarse en los beneficios a corto plazo a menudo no tiene en cuenta los valores que posee la naturaleza a la hora de tomar decisiones.
La preferencia por valores de mercado instrumentales, como los relacionados con la producción intensiva de alimentos, no refleja adecuadamente cómo los cambios en la naturaleza afectan a la calidad de vida de las personas, según el documento, aprobado por representantes de 139 estados en Bonn (Alemania).
Además, esta clase de políticas pasa por alto otro tipo de beneficios no comerciales que la naturaleza ofrece a las personas, como la regulación climática o la identidad cultural.
"Existen más de 50 métodos y enfoques de valoración, así que no faltan formas ni herramientas para hacer visibles los valores de la naturaleza", afirma el profesor Unai Pascual (España/Suiza), codirector de esta evaluación junto con la profesora Patricia Balvanera (México), el profesor Mike Christie (Reino Unido) y la doctora Brigitte Baptiste (Colombia).
Valoración de la naturaleza
El investigador explica que tan solo el dos por ciento de los estudios analizados consulta con las partes interesadas sus conclusiones acerca de la valoración de la naturaleza y únicamente el uno por ciento las tiene en cuenta en cada uno de los pasos del proceso de valoración de la naturaleza.
“Lo que escasea es el uso de métodos de valoración que permitan hacer frente a los desequilibrios de poder entre las partes interesadas y que incorporen de manera transparente los diversos valores de la naturaleza en la formulación de políticas”, añade Pascual.
Los estudios de valoración más recientes (2010-2020) se centraron sobre todo en mejorar las condiciones de la naturaleza (un 65 por ciento de los analizados) y la calidad de vida de las personas (un 31 por ciento), aunque solo un cuatro por ciento se enfocó a cuestiones relacionadas con la justicia social.