Por medio de un comunicado emitido este martes, la portavoz de la Casa Blanca, Stephanie Grisham, informó de la decisión de Trump de autorizar la entrega de 4,5 millones de dólares a los llamados cascos blancos, a pesar de que existe un compromiso anterior de dejar de financiar a este grupo relacionado con la banda terrorista Frente Al-Nusra (autoproclamado Frente Fath Al-Sham).

El mandatario norteamericano ordenó la concesión de los fondos a los cascos blancos con la intención de “continuar el apoyo de Estados Unidos al importante y altamente valorado trabajo de la organización en el país” árabe (Siria), reza la nota.

El texto también alega que este grupo ha salvado la vida de “más de 115 mil personas” desde marzo de 2011, cuando dio comienzo la crisis en Siria, país que ha estado implicado en una lucha contra los grupos terroristas.

“Alentamos a nuestros aliados y socios a unirse a nosotros en el apoyo a los cascos blancos y a nuestros esfuerzos para proteger a los civiles, las minorías religiosas y étnicas, y a otras víctimas inocentes del conflicto sirio”, se lee en el comunicado.

Los cascos blancos se presentan como una Organización No Gubernamental (ONG) humanitaria en el país árabe, pero tanto Rusia como Siria acusan a este grupo de escenificar presuntos ataques con gas cloro y sarín, como el ocurrido el 7 de abril de 2018 en Duma, cerca de Damasco (capital siria).

Por su parte, el presidente sirio, Bashar al-Asad, considera a los cascos blancos una “rama de Al-Qaeda y del Frente Al-Nusra”, así como una especie de “maniobra de las relaciones públicas” de EE.UU., el Reino Unido y Francia.

En marzo pasado, Damasco condenó “enérgicamente los apoyos secretos y obvios de la Administración estadounidense a las organizaciones terroristas, incluidos los llamados cascos blancos”.

LE RECOMENDAMOS LEER

Periodista canadiense revela vínculo directo entre Cascos Blancos y grupos terroristas