OEA abre sus puertas a golpista de Bolivia
Según las propias palabras de Almagro, el encuentro fue para conversar sobre “la transición y las venideras elecciones”, lo que para algunos observadores delata quién es el candidato de Estados Unidos.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, mantuvo un encuentro en Washington con el referente opositor boliviano Luis Fernando Camacho, uno de los que encabezó las revueltas en Bolivia que terminaron con la renuncia forzada del presidente constitucional Evo Morales.
Según las propias palabras de Almagro, el encuentro fue para conversar sobre “la transición y las venideras elecciones”, lo que para algunos observadores delata quién es el candidato de Estados Unidos.
“Me reuní con Luis Fernando Camacho, a quien le reconocemos su compromiso con la democracia boliviana. Dialogamos sobre el proceso de transición y próximas elecciones”, escribió en su cuenta de Twitter el dirigente de la OEA. El mensaje estuvo acompañado por una foto en donde se puede ver al expresidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz con una gran sonrisa.
Camacho, quien confirmó que se postulará como candidato a presidente en las próximas elecciones, le agradeció a Almagro “por su objetividad e imparcialidad en claro beneficio de la democracia latinoamericana y de nuestro pueblo”. Dijo que en el encuentro tuvo “la oportunidad de agradecerle” y destacó su “trabajo impecable”.
“Aprovechamos también la reunión para conversar de otros temas de gran importancia para seguir fortaleciendo la democracia de Bolivia”, agregó el golpista.
Camacho fue uno de los dirigentes opositores que estuvo al frente de las protestas en Bolivia contra el gobierno de Evo Morales, por el resultado de las elecciones.
Los opositores se manifestaron violentamente, golpearon y saquearon las casas de los funcionarios del Movimiento al Socialismo (MAS), festejaron la renuncia forzada del presidente y apoyaron el gobierno de facto.
Inicialmente, Camacho estuvo en alianza con el cívico de Potosí Marco Antonio Pumari. Hasta amagó con un posible binomio presidencial con él; sin embargo, le dio una estocada de muerte cuando lo acusó de que el potosino le estaba exigiendo 250 mil dólares para que fuera en la fórmula como vicepresidente.
Eso se conoció a través de un audio filtrado a los medios bolivianos, el cual, aunque dice Pumari que es auténtico afirma que fue manipulado.
Hasta hace poco muy buenos socios, Pumari ahora anda diciendo por ahí que "Camacho es un cobarde" y que Jeanine Áñez, la autopoclamada presidenta de Bolivia, "es una delincuente".