El comité dijo a través de su cuenta en Twitter: "Estamos profundamente entristecidos por la muerte de dos  de nuestros colegas en la explosión del aeropuerto de Adén, y otros dos siguen desaparecidos y tres resultaron heridos. Nuestros empleados pasaban por el aeropuerto con otros civiles".

El comité señaló que este día es trágico tanto para ellos como para el pueblo de Yemen, ofreciendo su más sentido pésame a las familias de las víctimas, deseando una pronta recuperación para los heridos.

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"Es un día trágico para el CICR y para la población de Yemen", dijo Dominik Stillhart, director de Actividades Operacionales del CICR, agregando "La población yemení ha atravesado enormes padecimientos en los últimos cinco años. Un día como el de hoy no hace más que agravar el sufrimiento, tanto de la familia de la Cruz Roja como de los yemeníes que tienen ahora un familiar muerto o herido a raíz de esta explosión."

Uno de los empleados del CICR que murió en la explosión era un ciudadano yemení que ayudó a coordinar las actividades de transporte aéreo del CICR, incluido el traslado a casa de más de mil exdetenidos en octubre. El otro empleado era un ciudadano ruandés que prestó ayuda como técnico radiólogo de nuestro equipo médico a muchas personas necesitadas.

"Las muertes y heridas causadas por la explosión son un duro golpe para muchas familias", dijo Katharina Ritz, jefa de la delegación del CICR en Yemen.

Agregó : "Estamos muy acongojados por nuestros colegas desaparecidos  y expresamos nuestras sinceras condolencias a los familiares de todas las víctimas. Deseamos la pronta recuperación de todos los heridos. Yemen ha atravesado muchos días difíciles; esperamos que el de mañana sea un día mejor."