Victorias de Yemen son una humillación para el régimen saudita y Bin Salman
El escritor e investigador de asuntos políticos Ahmed Al-Muayad dijo a Al Mayadeen que el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman "se aventuró en la guerra en Yemen para presentar una imagen de su fuerza al mundo".
Los resultados de la agresión contra Yemen contradijeron todas las evaluaciones de Arabia Saudita y los países que la motivaron e incitaron, ya que la imagen se invirtió en todos los estándares,y se habla de una humillación para el régimen de Riad y el príncipe heredero Mohammed bin Salman en particular.
Los yemeníes, al defender su tierra, trasladaron el campo de batalla a la profundidad de Arabia Saudita y revelaron la fragilidad de la estructura militar del régimen saudí, lo que plantea dudas sobre la viabilidad del arsenal para el que se han gastado miles de millones de dólares.
En esta escena, los medios de comunicación sauditas están desconcertados y nerviosos sin visión ni enfoque, y se ven obligados por el curso de la guerra a ocultar la verdad a la opinión pública de su pueblo por el tamaño de la derrota.
El escritor e investigador de asuntos políticos Ahmed Al-Muayad dijo a Al Mayadeen que el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman "se aventuró en la guerra en Yemen para presentar una imagen de su fuerza al mundo".
Al-Muayad consideró que "Arabia Saudita está buscando la ayuda del mundo para salvarlo de la difícil situación de Yemen después de que creyó que ganaría cuando se iniciara la guerra", y agregó que "el conflicto en Yemen no es una guerra civil sino más bien una agresión saudita-estadounidense contra el país ".
También dejó en claro que Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos son "armas estadounidenses en la guerra contra Yemen e implementan las órdenes de Washington".
Por su parte, el exembajador de Estados Unidos en Yemen, Gerald Feierstein, dijo: "El conflicto en Yemen ha llegado a un callejón sin salida y ninguna parte puede resolver el curso de la guerra".
En entrevista con Al Mayadeen, Feierstein afirmó que "Washington se ha negado a seguir apoyando los ataques de la coalición saudí y quiere llegar a un alto el fuego", y señaló que "no se encontrará ninguna solución a través de los continuos combates entre Saná y Riad".
"No es posible llegar a una solución militar al conflicto en Yemen, y las dos partes deben alcanzar un alto el fuego", dijo Feierstein.
En cuanto al asesor del Centro Al Ahram de Estudios Políticos y Estratégicos, Muhammad Al-Saeed Idris, dijo: "La situación ha llegado a un callejón sin salida para la coalición saudí en la guerra contra Yemen".
Idris agregó en entrevista con Al Mayadeen que "Arabia Saudita perdió gran parte de su presupuesto financiero como resultado de la guerra en Yemen, además de las pérdidas humanas", y agregó que "todo indica que Washington no apoya continuar con el conflicto en Yemen ".
Además, enfatizó que "clasificar la guerra en Yemen como una guerra civil es extraño e ilógico", y señaló que "Yemen ha sido objeto de agresión durante 6 años".
"Washington no tolera la idea de que los pueblos árabes vivan de manera respetuosa y tengan su propia decisión independiente", resaltó.