Investigarán la adopción ilegal de niños chilenos secuestrados durante la dictadura
Según el diario sueco Dagnes Nyheter el régimen de Augusto Pinochet utilizó la adopción internacional de niños arrancados de sus padres para mejorar su imagen ante el mundo. Suecia indagará sobre el tema.
El régimen de Augusto Pinochet utilizó el método de adopciones internacionales de "niños chilenos robados" como recurso diplomático para romper el aislamiento.
El diario sueco Dagens Nyheter reveló que debido a esta memoria sin resolver, el Gobierno sueco anunció que una comisión investigará 60 mil adopciones, de las cuales gran parte son chilenas. Desde 2018, la Justicia del país del Cono Sur mantiene una causa judicial abierta sobre este tema.
La publicación señala que se trata de adopciones ilegales internacionales de niños que, según notificaban los dirigentes del Cono Sur, estaban en condiciones de vulnerabilidad, abandonados por su padres, pero en realidad habían sido secuestrados con todo tipo de engaños. De esta manera, disfrazaban el robo de menores como una causa humanitaria, para otorgarles un futuro más próspero, a cambio de apertura diplomática y buena imagen en el exterior.
Tras estas revelaciones que llevaron por título "Niños a toda costa", el Gobierno sueco notificó que creará una comisión de investigación que abarcará al menos 60 mil casos de adopciones concretadas desde 1950.
Según Lena Hallengren, ministra sueca de Asuntos Sociales, el estudio tendrá dos años de duración y buscará alinearse con la indagación judicial que está en curso en Chile para "no hacer dos investigaciones paralelas", aunque admitió que los sudamericanos están demorando más de lo esperado.
También se conoció que en 2018, la Justicia chilena abrió averiguaciones a cargo del juez Mario Carroza para analizar adopciones irregulares al exterior -incluidas naciones como Suecia- durante la dictadura de Pinochet. En ese tiempo, de 1973 a 1990, aproximadamente 2 000 niños fueron acogidos por familias suecas dentro de la campaña para suavizar tensiones entre ambos países.
El apogeo de las adopciones se dio luego de una visita de Mónica Madariaga, prima de Pinochet y dos veces ministra del Régimen, a Estocolmo en 1970, según manifestaron informes de los investigadores chilenos. También tuvieron un papel trascendental el Centro de Adopción Sueco y civiles de extrema derecha afines al dictador.
La base de esta exploración histórica son los hallazgos que Karen Alfaro -doctora en Historia de la Universidad Austral- y José Luis Morales -docente de Historia en la Universidad Autónoma de Barcelona- obtuvieron luego de revisar documentación diplomática en la Embajada chilena establecida en territorio sueco y documentos del Archivo General Histórico del Ministerio de Relaciones Exteriores, del Ministerio de Justicia, entre otros.
"Las adopciones se convirtieron en parte de un juego político para levantar el aislamiento internacional de Chile", sentenciaban ambos con su trabajo.