Barco humanitario alemán con 800 migrantes arriba a puerto italiano
La organización Sea-Eye informó que a su barco Sea-Eye 4 se le había asignado el sábado pasado por la noche el puerto de Trapani, en el oeste de Sicilia. En un tuit agradecieron a la Guardia Costera italiana tras obtener autorización para entrar a puerto seguro.
El barco humanitario alemán que rescató a 800 migrantes en el Mediterráneo arribó el domingo a Sicilia, tras recibir permiso de las autoridades italianas para atracar después de varios días de espera en el mar.
La organización Sea-Eye informó que a su barco Sea-Eye 4 se le había asignado el sábado pasado por la noche el puerto de Trapani, en el oeste de Sicilia. En un tuit dieron las gracias a la Guardia Costera italiana luego de obtener autorización para utilizar ese puerto seguro.
La mayoría de los adultos debían ser trasladados a otros barcos para la cuarentena preventiva contra la covid-19, mientras que unos 160 menores, incluidos bebés y otros niños con menos de cuatro años, deberán ser trasladados a refugios en tierra.
El Sea-Eye 4 ya había rescatado a 397 personas en seis operaciones hasta el miércoles anterior, con la ayuda del barco Rise Above de Mission Lifeline, dijo la organización en un comunicado.
El jueves por la mañana a otras 400 personas de una embarcación de madera muy atestada de gente, dijo. Varias sin chalecos salvavidas se encontraban en el agua cuando llegaron los barcos de la ONG, precisó Sea-Eye.
Los servicios de rescate malteses, aunque son responsables de las emergencias marítimas en la zona, "no respondieron a ninguna de las peticiones de ayuda", dijo Sea-Eye.
Otra ONG, SOS-Méditerráneo, con sede en Marsella, dijo que su barco Ocean Viking también estaba en la zona y había proporcionado suministros al Sea-Eye 4 para hacer frente a la situación.
"Es vergonzoso ver cómo Malta rehúye repetidamente sus responsabilidades e ignora las llamadas de socorro", fustigó.
Italia es uno de los principales puntos de entrada a Europa para los migrantes del norte de África, principalmente de Túnez y Libia, desde donde las salidas son mucho mayores en comparación con años anteriores.
Este año, la cantidad de migrantes que se arriesgan a cruzar el peligroso centro del Mediterráneo ha aumentado drásticamente a más de 54 mil. Sin embargo, sigue lejos de las cifras del periodo de 2014 a 2017, cuando entre 120 mil y 180 mil personas llegaron a Italia al año, con frecuencia en embarcaciones destartaladas de traficantes.