Ahora que Irán y las demás partes del acuerdo nuclear de 2015 reanudan las conversaciones estancadas en Viena con el fin de levantar las crueles sanciones impuestas a Irán, los republicanos de Estados Unidos han prometido bloquear cualquier alivio de las sanciones a Irán.

Según un informe de The National, un grupo de 25 congresistas republicanos, en una carta dirigida al presidente estadounidense Joe Biden esta semana, acusó a la Casa Blanca de "ocultar información" al Congreso sobre la naturaleza de las negociaciones con Teherán.

"A pesar de más de una docena de cartas de miembros del Comité de Estudio Republicano pidiendo información sobre la aplicación de las sanciones a Irán, su administración ha seguido dejando al Congreso en la oscuridad respecto a sus planes para debilitar la aplicación de las sanciones y proporcionar alivio de las sanciones a Irán", decía la carta.

El Comité de Estudio Republicano cuenta con 150 miembros, que han sido los defensores a ultranza de la campaña de "máxima presión" del ex presidente estadounidense Donald Trump contra Irán.

En la carta, los firmantes recuerdan al Gobierno de Biden la potestad del Congreso para volver a imponer sanciones a Irán, lo que apunta de nuevo a la dualidad de la postura estadounidense en las conversaciones de Viena.

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"Le escribimos para recordarle que el poder de regular el comercio con naciones extranjeras y, por tanto, la capacidad de promulgar sanciones económicas reside en el Congreso", añade la carta.

El lunes se reanudó en la capital austriaca la séptima ronda de conversaciones entre Irán y el grupo P4+1 -Gran Bretaña, Francia, Rusia y China, más Alemania- con el objetivo de levantar las draconianas sanciones impuestas a Irán por la anterior administración estadounidense.

Ali Bagheri Kani, que encabeza la delegación iraní en las conversaciones, defendió firmemente el levantamiento de las sanciones estadounidenses antes de pasar a debatir las cuestiones relacionadas con la energía nuclear.

Afirmó que Irán ha confirmado su pleno cumplimiento de las obligaciones derivadas del acuerdo y subrayó la determinación de su país de alcanzar un acuerdo que sea aceptable para el pueblo de Irán.

Enrique Mora, máximo representante de la UE en las conversaciones, dijo que es urgente volver a encarrilar el acuerdo, pero señaló que hay muchas cuestiones políticas y técnicas difíciles de resolver.

Mikhail Ulianov, enviado ruso a la agencia nuclear de la ONU, dijo que los participantes acordaron "más medidas inmediatas" durante la nueva ronda de negociaciones que, según dijo, "comenzó con bastante éxito".