El Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán condenó la declaración emitida por la Cumbre de Ministros de Asuntos Exteriores de la Liga Árabe, que acusó a Irán de desestabilizar la seguridad regional.

La declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní señaló que estos movimientos infructuosos de algunos países van en contra de sus acciones diplomáticas en los últimos meses, y refutó las afirmaciones infundadas de que Irán está interfiriendo en los asuntos internos de otros.

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Según el ministerio, tales declaraciones reiteradas representan un obstáculo ante el desarrollo de las relaciones de Irán con sus vecinos.

Asimismo, subrayó la posición de Teherán de llamar al diálogo con los países vecinos y resolver los malentendidos con la diplomacia.

También consideró que tales declaraciones no tienen consecuencias para el desarrollo del programa nuclear pacífico del país y afirmó que preservar los logros nucleares y la capacidad de defensa de Irán forma parte de su política estratégica.

La declaración de la Liga Árabe había considerado que lo que denominó "injerencia" de Irán en los asuntos de los Estados árabes es peligroso e inaceptable y forma parte de la praxis del "régimen iraní" de desestabilizar la seguridad regional.