En el tercer episodio de Los Héroes, Al Mayadeen cuenta la historia de cómo se cavó el túnel de Gilboa, comenzando desde la idea, el dibujo de los planos y la ejecución; todo el camino hasta la luz del sol que brilló sobre los seis héroes tan pronto la libertad los abrazó fuera de los crueles muros de la prisión de la ocupación israelí.

"Libérate de la prisión, tío Mahmoud... si yo estuviera en tu lugar, me liberaría". Eso es lo que Asinat Al Ardah le dijo a su tío, el arquitecto de la Operación Túnel de la Libertad, quien nunca dejó que la idea de la liberación se le escapara de la cabeza.

Con las palabras de Asinat, arranca el tercer episodio de la serie documental Los Héroes de Al Mayadeen, donde se narra la historia de la liberación de Mahmoud Al Ardah y sus cinco compañeros, desde la concepción de la idea en la mente de Al Ardah, hasta la liberación de las cadenas de la ocupación israelí a las que estaban atados.

Los Héroes nombraron la puerta del túnel en honor al mártir palestino Kamal Abu Waer, el luchador por la libertad enfermo de cáncer que murió en 2020. Abu Waer fue uno de los luchadores que resistió la ocupación israelí durante la Intifada de Al Aqsa de 2003. Fue condenado a seis cadenas perpetuas y 50 años de prisión.

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Primer episodio de Los Héroes: ¿Cómo surgió la idea de la liberación?

Abu Waer fue un compañero de prisión de Los Héroes hasta que cayó enfermo. Contrajo COVID-19 en 2019 antes de que le diagnosticaran cáncer de garganta y lo transfirieran de prisión hasta que fue martirizado en 2020 debido a la negligencia médica de la ocupación israelí.

Los Héroes nombraron al grupo de reclusos que cavaron el túnel en honor al mártir Mohammad Al Ashqar, quien fue martirizado en la prisión de Al Naqab el 22 de octubre de 2007, luego de que un grupo de trabajo israelí allanara la prisión y usara, entre muchas otras cosas, balas de goma. La redada dejó 250 prisioneros heridos, nueve de los cuales en estado crítico, incluido Al-Ashqar.

Un plan tan antiguo como Gilboa

El plan de liberación ha existido desde la prisión de Gilboa, donde la idea comenzó a formarse en la mente de Mahmoud Al Ardah en 2003. Se encontraba en la prisión de Shata en ese momento, y fue entonces cuando comenzó a investigar. Le preguntaba a los expresos de Gilboa sobre la prisión, su estructura, la forma de las celdas y baños, y ahí es cuando encontró el punto débil de la prisión: el piso del baño es de acero y se puede quitar, lo que permite cavar un túnel.

Después de estudiar la prisión en base a los testimonios de exprisioneros, Al Ardah comenzó a presentar solicitudes de traslado a Gilboa hasta que en 2005 fue transferido. Fue a los baños, encontró lo que quería y propuso la idea a varios prisioneros. Sin embargo, su propuesta fue rechazada, ya que los otros reclusos pensaban que la idea era imposible de ejecutar.

La operación se suspendió y Al Ardah fue enviado de vuelta a Shata en 2007, donde permaneció durante años. Estuvo en régimen de aislamiento en 2011 y 2014, pero durante su estancia encontró en la Sección 7 de la prisión un trazado similar al de Gilboa. Propuso su idea a algunos prisioneros solo para sorprenderse más tarde al descubrir que ya había surgido un plan de liberación a través de los muros de la prisión. Sin embargo, ese plan nunca se llevó a cabo.

Posteriormente, Al Ardah volvió a proponer su plan, con prisioneros trabajando en túneles durante 16 meses. Cavaron varios túneles, pero algunos de ellos solo conducían a las alcantarillas, y después de que se completara la mayor parte del trabajo, fue descubierto. Como consecuencia, Al Ardah fue enviado nuevamente a confinamiento solitario, y posteriormente terminó de nuevo en Gilboa en 2017. Trazó otro plan con solo dos presos. Preparó todas las herramientas que necesitaba para liberarse, trabajando solo unas pocas horas, un solo día a la semana.

"Cuando se le viene a la mente la liberación de un prisionero, tal vez solo uno o dos de cada diez mil estén pensando en liberarse", dijo el prisionero Ahmed Al Ardah.

"Los muros reforzados, el monitoreo constante, la tecnología de punta, los registros e inspecciones diarias, los registros sorpresa y la vigilancia las 24 horas del día, hacen que los prisioneros piensen que escapar es imposible", dijo Al Ardah.

Huelgas e infracciones

Dos problemas ocurrieron durante la etapa final del plan: una seria filtración y una huelga de hambre que no fue tomada en consideración. La filtración ocurrió cuando los prisioneros con los que Al Ardah contaba para su plan no tomaron el asunto en serio y uno de ellos hizo una broma sobre el plan a un funcionario, lo que llevó a Al Ardah a posponer sus planes.

Otro intento tuvo lugar en 2018, pero también se pospuso debido a ciertos eventos en Gilboa.

El 14 de diciembre de 2020, luego de una inspección, Al Ardah fue trasladado de la celda 14, donde había decidido cavar el túnel. Cuatro meses antes del plan, Al Ardah propuso el plan a Yaqoub Qadri sin saber cuál sería el punto de partida. También contó con Ayham Kamamji, y para justificar el trabajo en la celda, Al Ardah decía a los reclusos que estaba buscando un lugar para esconder teléfonos celulares.

Por qué la Operación Túnel de la Libertad fue un éxito

El prisionero Mahmoud Al Ardah le contó a Al Mayadeen sobre una de las principales razones por las que la Operación Túnel de la Libertad fue todo un éxito, diciendo que el secreto fue que se rodeó de un grupo de hombres que escucharon sus instrucciones durante su estancia en Gilboa en 2015.

Cuando eligió a los miembros del equipo, una búsqueda a gran escala tomaba lugar. Conoció a Munadel Nafi'at en 2014, a Mahmoud Chreim en 2017, a Qusai Merhi cuando lo arrestaron, Ali Abu Baker fue su compañero de celda durante meses antes de la ejecución y a Mohammad Abu Bakr a través de Nafi'at y Ali Abu Bakr. Mientras tanto, tuvo varios encuentros con Yaqoub Qadri, Ayham Kamamji, Mohammad Al Ardah e Iyad Jaradat.

El prisionero liberado Kifah Al Ardah dijo: "La operación se llevó a cabo bajo total secreto en la celda y en la prisión misma. Al principio, solo una persona supervisó toda la operación, Mahmoud Al Ardah, durante un tiempo, y yo creo que esa es una de las razones detrás del éxito de la operación".

La experiencia de previa de Mahmoud le brindó las habilidades necesarias para trabajar con acero, hormigón armado y bajo condiciones extremas. Hubo cálculos muy precisos, especialmente en lo que respecta a la ruta del túnel, porque uno no sabe en qué dirección están excavando una vez bajo tierra. El equipamiento era muy limitado pues estaban en prisión, y no tenían nada que indicara hacia dónde se dirigían, pero la experiencia de Mahmoud Al Ardah le permitió saber qué dirección tomar exactamente.

Al Ardah no tenía el plano de la prisión; toda la información que tenía provenía del túnel que cavó en Shata en 2012 y 2014. Su sección en Shata tenía el mismo diseño que su sección en Gilboa, incluso en la forma en que fue construida.

Las celdas se construyen en un metro cuadrado y se colocan cuatro pilares con 3,5 metros entre pilares, con 80 cm dedicados a las tuberías de desagüe, formando un largo recorrido bajo los baños desde el inicio del tramo hasta su final.

El plan estaba completo en Al Ardah y en la mente del equipo, y después de que pudieron atravesar el hormigón armado, trabajar con tierra fue mucho más fácil. "El olor a polvo y tierra que inundaba la habitación era uno de los aromas más hermosos", dijo Mahmoud.

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Segundo episodio de Los Héroes: ¿Qué es la celda 'Qassem Suleimani'?

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Dificultades que acompañaron el proceso

Muchas fueron las dificultades que enfrentaron Los Héroes antes de que finalmente pudieran abrir la puerta del túnel, en particular con la placa de acero que se encontraba cubriendo toda la habitación. Mahmoud le pidió a Nafi'at que lo cortara ya Merhi y Chreim que lo levantaran, lo cual fue un proceso muy difícilque tardo dos días.

Creían que si sostenían la placa en posición vertical, tendrían más posibilidades de cortar partes de ella, pero eso solo lo hacía más difícil. Comenzaron a quedarse sin tiempo, ya que las fuerzas de ocupación estaban a punto de realizar su inspección regular, al sostenerlo en posición vertical provocó que la placa de acero se doblara y se pusiera rígida y fue imposible colocarla de vuelta en su lugar. 

La inspección de seguridad tuvo lugar a las 3:00. La lámina de acero estaba en posición vertical y la puerta estaba abierta. Tenían 45 minutos antes de que la sección pasara por la inspección, por lo que se les pidió que permanecieran en alerta máxima.

Eventualmente, después de horas de arduo trabajo, finalmente pudieron cortar el acero, pero el corte no fue perfecto y la placa aún estaba doblada. Intentaron enderezarla pero fue en vano, y la puerta del túnel sobresalía pues no estaba perfectamente alineada con el piso.

Entonces se decidió que se debía cortar la parte doblada de la hoja. Inicialmente Mahmoud Chreim fue el encargado del corte de las láminas, según Mahmoud Al Ardah. Qusai Merhi tambien cooperó con la tarea y luego, cuando se acercó el peligro, Munadel también desempeñó un papel importante.

Al Ardah le dice a Al Mayadeen que durante marzo, el tercer mes, la administración de la prisión decidió realizar una búsqueda para verificar la existencia de dispositivos de comunicación. Los prisioneros tenían que salir de sus celdas adyacentes. Sin embargo, el túnel estaba abierto en ese momento y Al Ardah, que todavía estaba en su celda, se negó a salir y argumentó que se estaba duchando hasta que cerró el túnel en el último minuto.

A principios de abril, Al Ardah fue asistido por Munadel. Este último entró al túnel con dificultad, y cuando quiso salir no pudo. Su mano estaba atrapada debajo de su pecho y comenzaron a aparecer signos de tensión en él mientras intentaba salir del túnel. Poco después, comenzaron a aparecer signos de desmayo en Munadel, por lo que Al Ardah comenzó a excavar debajo de su cuerpo con gran dificultad. Media hora después pudo liberar a Munadel y sacarlo.

La operación no solo estuvo llena de estrés, ansiedad y agotamiento. Mahmoud recuerda varios momentos significativos. Cuenta que una vez mientras trabajaba ya en la salida, Chreim y Munadel se encargaban de los preparativos debajo de la habitación 2 y la habitación 1+2, mientras que Qusai excavaba debajo de la habitación número 5, después de haber llegado a la habitación número 6.

Hubo un momento en el que Qusai tuvo que retroceder debido a la falta de aire por lo que Al Ardah ingresó al túnel para ocupar su lugar. En ese momento, hubo un desafío entre Al Ardah, Munadel y Chreim, y los dos últimos desafiaron a Mahmoud y Yaqoub, el mayor de los Héroes, a trabajar el espacio debajo de la habitación 6. Los dos lograron cavar con amplitud y ganaron el desafío.

Durante el trabajo, Mahmoud recibió un golpe accidental casi fatal de manos de Yaqoub. Al Ardah recordó la historia con una sonrisa y explicó que mientras transportaba las piedras fuera del túnel, Al Ardah le pidió a Yaqoub que le arrojara las piedras de tamaño mediano. Mientras lo hacía, una piedra golpeó la cabeza de Al Ardah. "Fue muy difícil... y nos reímos mucho", dijo Al Ardah.

En una muestra de la personalidad de Mahmoud, vemos como Mahmoud relata un evento que podría haber acabado con su vida entre risas, tratando el incidente, en conjunto, como una broma.

Noche del Temblor

El momento más difícil a lo largo de la operación ha sido descrito como la "noche del temblor". El temblor, o como se le conoce en árabe “Al-Zalzalah”, es el término utilizado por Mahmoud Al Ardah en su discurso, para expresar los horrores de una de las noches más estresantes.

Al Ardah explicó que "En mayo de 2021, Qusai y yo estábamos trabajando en las excavaciones. Después de que bajamos, escuché al prisionero Iyad Jaradat gritar que había  una inspección repentina, así que salí del túnel y pensé que nuestro plan había sido expuesto".

Las autoridades penitenciarias estaban en la puerta principal de la sección de baños, mientras que Al Ardah estaba dentro del cubículo del baño que estaba cerrado. En cuestión de segundos, Al Ardah pudo cerrar la puerta del túnel. Esto fue algo increíble, ya que normalmente cerrar el túnel de la libertad tomaba aproximadamente 45 minutos. En ese instante los guardias le pidieron al Héroe que saliera del cubículo del baño. Qusai que se encontraba dentro del túnel gritó "abre la puerta", pensando que había sido una broma. 

De repente, los guardias le preguntaron: "¿Qué estás haciendo, Mahmoud, estás cavando un túnel?" A lo que él respondió: "Sí, y no quiero salir", y comenzó a reírse.

Qusai estuvo cerca de abrir la puerta, sin embargo, cuando escuchó el sonido de las llaves del guardia supo que iba en serio. En el otro extremo del túnel, los guardias se negaron a esperar y le pidieron a Mahmoud que saliera del baño.

Los guardias preguntaron entonces por el número de presos que había en la celda, a lo que estos respondieron que eran cinco.

Durante la inspección, Munadel, Muhammad Al Ardah y Chreim estaban en la cocina y estaban listos para romper objetos a su alrededor con la esperanza de que esto distrajera a los guardias. Sin embargo, el incidente pasó desapercibido y los guardias se fueron. Este fue el final de la noche del temblor.

El momento de la Liberación

Salir del túnel de la Libertad fue un momento que Los Héroes nunca olvidarán, especialmente después de meses de trabajo agotador. Una vez concluida la excavación del túnel, lo más difícil sería la fuga en sí. En el tiempo previo a la liberación final todos los escenarios eran posibles. Sin embargo, el momento de la Liberación tuvo lugar y Los Héroes vieron la luz del sol fuera de Gilboa.

Vale la pena señalar que la prisión de Gilboa tiene cinco secciones con 15 celdas cada una, y cada celda contiene seis presos.

Tras escuchar la noticia de una operación de liberación exitosa de la prisión de Gilboa, cientos de familias estaban al acecho ya que aún se desconocían los nombres de Los Héroes. Pasó un tiempo antes de que las imágenes de las tarjetas de prisión de Los Héroes circularan y revelaran sus nombres e identidades.

Después de enterarse de que su hermano era uno de los Héroes de la Operación Túnel de la Libertad de Giboa, Yahya Al Zubaidi, hermano del preso Zakaria, dijo: “nosotros mismos estábamos sorprendidos de que Zakaria estuviera entre ellos”. Yahya expresó los sentimientos que lo invadieron en ese momento, diciendo: "Aquí, los sentimientos se mezclaron: sentimientos de alegría porque nuestro hermano se escapó de la prisión y sentimientos de miedo porque no sabemos nada de él".

El prisionero liberado Hosni Issa dijo que Los Héroes encendieron una revolución e hicieron que cada prisionero pensara en hacer lo imposible para liberarse por su propia voluntad y romper las cadenas del carcelero.

Al Mayadeen luego preguntó: "¿Dónde estalló esta revolución: dentro de las prisiones con los prisioneros o contigo en el extranjero?"

Issa respondió diciendo: "En todas las cárceles, por supuesto, se ha producido una revolución entre los presos. Cada preso, que estaba pensando en otras cosas, comenzó a pensar en cómo crear una salida para salir de las rejas, fuera del mundo del cautiverio".

El exprisionero Mohammad Arandas dijo que cuando se enteró de la fuga esperaba que Los Héroes fueran arrestados en cuestión de horas.

"La prisión de Gilboa, que conozco bien, y es similar a la prisión de Nafha en estructura, incluso un poco más estricta, y también conocida como 'la caja fuerte', [...] que seis prisioneros pudieran escapar de ella es increíble. De hecho, esperaba que en pocas horas fueran arrestados”, dijo, y agregó que “Su arresto se realiza mediante el uso de perros militares. Por supuesto, además de eso, hay patrullas las 24 horas alrededor de la prisión sin interrupción, y los presos saben muy bien cuándo pasan, pero estas patrullas, a pesar de todo, pasan por la prisión casi las veinticuatro horas del día".

Huda Al Ardah, la madre de Mahmoud Al Ardah, dijo que sintió alegría entrelazada con conmoción durante horas. "Por primera vez en treinta años, nuestra familia no tiene prisioneros. Todos estábamos libres", dijo.

En cuanto a Nidal Nafa'at, el hermano de Munadel dijo que se enteró de la noticia a las 5 am y que era algo que ninguno de los miembros de la familia Nafa'at esperaba. "Conocemos las instalaciones de la prisión. Están fortificadas y es imposible que alguien pueda salir. Estuvimos 13 días sintiéndonos orgullosos, porque nuestro hermano se liberó y no estaba solo sino con sus compañeros", dijo.

Fouad Kamamji, el padre de Ayham, dijo: “Conozco la traición de 'Israel', y que tenía miedo de que lo mataran […] estábamos felices y nos sentimos victoriosos, y cuando supe que había huido, tuve miedo de Israel lo que podría hacerle".  

Continuó, "Tenía mucho miedo por Ayham. Pensé que era el final. Lo visité una semana o dos antes de la operación, así que recordé la visita por un momento. ¿Fue algo así como un adiós entre él y yo? ¿Sería la última vez que lo vería... ¡y así sucesivamente! No lo sé, pero había un sentimiento dentro de mí convencido de que Ayham está vivo y que seguirá vivo”.

Lo que hicieron los héroes es demasiado grande para que "Israel" lo oculte

Las autoridades de ocupación israelíes trataron de mitigar el impacto de la Operación Túnel de la Libertad y trataron de ocultárselo a los medios. Sin embargo, el éxito de la operación fue más fuerte que cualquier intento israelí de ensombrecerla. Los Héroes se convirtieron en un tema de conversación en todo el país, a nivel regional e incluso a nivel internacional a medida que la noticia se difundía rápidamente en las páginas de los medios.

La Operación Túnel de la Libertad pronto se convirtió en tema de estudio y análisis por parte de periodistas, investigadores y organizaciones de derechos humanos.

Para conocer más detalles sobre la Operación Túnel de la Libertad, vea los próximos episodios de Los Héroes en Al Mayadeen a las 21:00 hora de Al-Quds.

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