El mundo celebra el Día Internacional de la Música, ¿por qué?
La Unesco escogió el 22 de noviembre, día de Santa Cecilia (patrona de los músicos desde 1584), para conmemorar esta jornada.
“Con la música por dentro” o “Eres bien música”…estas son solo algunas de las frases que evocan una de las expresiones artísticas más antiguas y bellas.
Atendiendo a su valor, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) le dedicó este día.
Su historia está tejida a más de 30 mil años cuando el hombre, imitaba sonidos de la naturaleza, tocaba flautas de hueso, instrumentos de percusión y birimbaos.
En el antiguo Egipto por ejemplo, la música estaba destinada a los ritos religiosos; en Grecia, formaba parte de su mitología.
Durante la Edad Media, su papel estaba muy vinculado con la Iglesia, y sus principales manifestaciones eran cantos gregorianos y los ritmos monódicos.
Más tarde, la etapa Clásica, comprendida entre 1600 a 1910, abarcó estilos como el Barroco, el Clasicismo, el Romanticismo y el Impresionismo, hasta dar paso a la música moderna y contemporánea.
La Unesco escogió el 22 de noviembre, día de Santa Cecilia (patrona de los músicos desde 1584), para conmemorar esta jornada.
En Europa, a manera de celebración, el 22 de noviembre de 1570, varios compositores celebraron un torneo.
Desde 1695, Edimburgo convoca a eventos de la manifestación, una tradición extendida a otros países como Francia, España y Alemania.
Hoy, con su rica diversidad de géneros y ritmos, la ciencia sabe que genera la liberación de endorfinas, sustancias químicas que producen bienestar cerebral.