Funcionarios de EE. UU. se reúnen con los talibanes en Qatar
Durante dos días ocurrieron las conversaciones. Las discusiones se producen cuando la guerra económica de Washington en Kabul ha causado graves sufrimientos al pueblo afgano dos años después del final de la ocupación militar estadounidense.
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Funcionarios de EE. UU. se reúnen con los talibanes
Un comunicado de prensa del Departamento de Estado dijo que el representante especial para Afganistán, Thomas West, la enviada especial para las mujeres, las niñas y los derechos humanos afganos, Rina Amiri, y la jefa de la misión en Afganistán, Karen Decker, se reunieron con altos funcionarios talibanes el domingo y el lunes.
El comunicado de prensa decía que los funcionarios estadounidenses cuestionaron a los talibanes por sus abusos contra los derechos humanos. “Los funcionarios estadounidenses instaron a los talibanes a revertir las políticas responsables del deterioro de la situación de los derechos humanos en Afganistán, en particular para las mujeres, las niñas y las comunidades vulnerables”. El comunicado de prensa continúa: “Los funcionarios estadounidenses expresaron su grave preocupación por las detenciones, la represión de los medios y los límites a la práctica religiosa. Estados Unidos expresó su apoyo a las demandas del pueblo afgano de que se respeten sus derechos y de que sus voces den forma al futuro del país”.
Desde que regresaron al poder en 2021, los talibanes han impuesto prohibiciones que impiden que las mujeres participen públicamente en la sociedad. Sin embargo, el historial de derechos humanos de Washington en Afganistán también es abismal.
La ocupación estadounidense de Afganistán durante dos décadas estuvo marcada por asesinatos masivos de civiles, torturas y apoyo a los señores de la guerra que habitualmente abusaban sexualmente de niños pequeños.
Durante las conversaciones, funcionarios estadounidenses y talibanes también discutieron la economía afgana. “La delegación estadounidense se reunió con representantes del Banco Central Afgano y el Ministerio de Finanzas afgano para discutir el estado de la economía afgana y los desafíos que enfrenta el sector bancario”, dijo el comunicado de prensa. “Los funcionarios estadounidenses tomaron nota de los datos recientes que indican una disminución de la inflación, el crecimiento de las exportaciones e importaciones de mercancías en Afganistán en 2023, y expresaron su apertura a un diálogo técnico sobre cuestiones de estabilización económica pronto”.
El comunicado de prensa de los talibanes enfatizó la necesidad de que Washington levante las sanciones y descongele los fondos del banco central afgano. “En la reunión, las dos partes discutieron el fomento de la confianza, la adopción de medidas prácticas al respecto, la eliminación de las listas negras y el levantamiento de las sanciones, el descongelamiento de las reservas [del Banco Da Afganistán], la estabilidad económica de Afganistán, la lucha contra los narcóticos y cuestiones relativas a los derechos humanos”, dijo.
Después de que el presidente Joe Biden puso fin a la ocupación militar estadounidense de Afganistán, impuso una guerra económica en Kabul y congeló los activos del banco central del país. Según grupos de derechos humanos, las sanciones y los fondos congelados han dañado significativamente la economía afgana.
El año pasado, la ONU advirtió que el 95% de los afganos no comen lo suficiente y que casi la mitad de la población se enfrenta a un hambre aguda. Aún así, la Casa Blanca se ha negado a ceder en su guerra económica contra el país de Asia Central.
Los funcionarios estadounidenses hicieron algunas notas positivas sobre el régimen talibán. “Los funcionarios estadounidenses tomaron nota del compromiso continuo de los talibanes de no permitir que nadie use el territorio de Afganistán para amenazar a Estados Unidos y sus aliados, y las dos partes discutieron los esfuerzos de los talibanes para cumplir con los compromisos de seguridad. La delegación estadounidense reconoció que ha habido una disminución en los ataques terroristas a gran escala contra civiles afganos”.
El comunicado de prensa agregó: “Estados Unidos tomó nota de los informes que indican que la prohibición de los talibanes del cultivo de adormidera resultó en una disminución significativa del cultivo durante la temporada de crecimiento más reciente. Los funcionarios estadounidenses registraron serias preocupaciones sobre el tráfico y la venta continuos de opiáceos procesados y drogas sintéticas”.
Durante la Guerra de Afganistán, el país fue el mayor productor de opio del mundo. Después de que los talibanes tomaron el control del país hace dos años, prohibieron el cultivo de amapola y se eliminó la producción de opio.
