Terremoto en la Fuerza Aérea de "Israel”
Cerca de mil 142 soldados sionistas amenazan con suspender el voluntariado en rechazo a las enmiendas judiciales que pretende imponer el primer ministro, Benjamín Netanyahu.
La fuerza aérea en el ejército de ocupación israelí vive una fuerte crisis tras la amenaza de salida de mil 142 soldados, incluidos 513 pilotos en servicio, los cuales suspenderán su voluntariado si se aprueban las enmiendas judiciales propuestas por el primer ministro, Benjamín Netanyahu.
Los medios israelíes compararon la situación con un terremoto similar a la Guerra de Yom Kippur hace 50 años.
Los hechos llevarán a la perdida de la disponibilidad y eficiencia operativa para la guerra de la fuerza aérea y a enfrentar la mayor crisis de su historia.
Según agrega la prensa sionista, estos soldados hablan en círculos cerrados de su gran decepción con el comandante de la Fuerza Aérea y el jefe de Estado Mayor, porque no reflejan la verdadera situación en las formaciones de la reserva.
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Para llenar el vacío y minimizar el daño a la capacidad operativa, la Fuerza Aérea hace ajustes dentro de escuadrones y misiones, pero con el tiempo esto no se mantendrá, señalan los medios.
Se espera que cientos de reservistas adicionales, especialmente pilotos, declaren no incorporarse al servicio militar si los cambios judiciales no se detienen.
Las protestas en curso contra las enmiendas judiciales tomaron un giro peligroso dentro de la institución militar en la entidad de ocupación, después de que 161 oficiales del Comando de la Fuerza Aérea comunicaron su retiro por completo.
A su vez, el analista de asuntos militares en el diario israelí Haaretz, Amos Harel, consideró la situación actual como el paso más importante en la lucha contra las irregularidades judiciales.
El jueves miles de colonos se manifestaron en varias zonas contra el plan de enmiendas del gobierno ocupante.
Durante la llamada, "Noche de la Confrontación" los colonos bloquearon varias calles centrales en Tel Aviv, Haifa y Rahanana, en rechazo a la enmienda destinada a eliminar el argumento de "irrazonabilidad", el cual permite a la Corte Suprema revocar las decisiones del gobierno.