Irak niega coordinación previa en agresión de EE.UU. a su territorio
Estados Unidos pretendía engañar a la opinión pública internacional y evadir la responsabilidad jurídica por este crimen inaceptable, denunció el gobierno.
El gobierno de Irak negó cualquier coordinación previa con Estados Unidos para atacar las regiones de Akashat y Al-Qaim, en una violación de la soberanía nacional.
De acuerdo con el portavoz del gabinete iraquí, Bassem Al-Awadi, Washington engañó y falsificó deliberadamente los hechos al anunciar una coordinación previa para cometer esta agresión, que provocó la muerte de 16 ciudadanos, 25 heridos y pérdidas en edificios residenciales.
Estados Unidos pretendía engañar a la opinión pública internacional y evadir la responsabilidad jurídica por este crimen inaceptable, subrayó.
Al mismo tiempo, enfatizó que tal acción pondrá la seguridad en Iraq y la región al borde del abismo, y socava los esfuerzos del país por establecer la estabilidad.
En este punto, Al-Awadi reiteró la negativa de Bagdad a permitir que sus tierras sean un escenario para ajustar cuentas, y refrendó la responsabilidad nacional para proteger la nación.
Sobre este tema, indicó que la presencia de la Coalición Internacional, desviada de las tareas asignadas, constituye un motivo de amenaza a la seguridad y la estabilidad en el territorio.
Al respecto, apuntó que la presencia de las fuerzas extranjeras se convirtió en una justificación para involucrar a Iraq en conflictos regionales e internacionales.
En este línea de denuncia, la presidencia de Irak rechazó la violación de la soberanía nacional y señaló que estos ataques intensifican las tensiones y amenazan la seguridad y la estabilidad de la región en su conjunto.
A propósito, manifestó que la hostilidad norteamericana socavan las posibilidades de éxito de las negociaciones en curso sobre la organización del trabajo de la coalición internacional.
Llamamos a todas las partes a asumir sus responsabilidades nacionales ante los peligros y amenazas a los que el país está expuesto desde hace meses, añadió.
En este sentido, destacó la importancia de celebrar una reunión de emergencia de las presidencias y los bloques políticos para discutir estos acontecimientos y sus repercusiones y adoptar posiciones claras y unificadas.
Por su parte, el Parlamento indicó que los repetidos ataques estadounidenses contra cuarteles generales de seguridad iraquí "constituyen un flagrante desdén que no puede aceptarse".
A su vez, llamó al gobierno a acelerar la implementación de la decisión del legislativo de retirar las fuerzas de la Coalición Internacional, que amenazan la seguridad, la estabilidad y la soberanía de Irak.
Con anterioridad, el portavoz del Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Irak, Yahya Rasoul, expresó que estas acciones son una violación de la soberanía nacional, socavan los esfuerzos del Gobierno y representan una amenaza para el país y la región.
Según el corresponsal de Al Mayadeen en Bagdad, el Ministerio de Asuntos Exteriores convocará al Encargado de Negocios de la Embajada de los Estados Unidos en Bagdad.
El viernes en la noche, el Comando Central de Estados Unidos comunicó las acciones contra sitios pertenecientes a la Guardia Revolucionaria de Irán y sus aliados en Iraq y Siria.
Según lo informado, atacaron más de 85 blancos con cazas y bombarderos que partieron desde Estados Unidos e incluyeron instalaciones de comando y control, centros de inteligencia, misiles y proyectiles, almacenes de drones y cadenas de suministros.
El domingo último, las fuerzas estadounidenses confirmaron la muerte de tres soldados y otros 40 heridos en una operación con dron no tripulado, dirigido a una base en el noreste de Jordania.