Acuerdo sobre Gaza necesita un paquete humanitario para superar frenos
En la Conferencia de Seguridad de Múnich, altos funcionarios advirtieron sobre las consecuencias catastróficas esperables de una operación militar en la ciudad de Rafah.
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Primer ministro qatarí, Mohammed bin Abdul Rahma.
El primer ministro de Qatar, Mohammed bin Abdul Rahman, confirmó algunas dificultades relacionadas con la parte humanitaria de las negociaciones sobre el acuerdo de Gaza, aún pendiente.
Al margen de la Conferencia de Seguridad de Múnich, el titular añadió que "el patrón de los últimos días no fue muy prometedor en las negociaciones, pero si somos capaces de definir un paquete humanitario, podremos superar los obstáculos".
La guerra debe detenerse hoy, incluso sin condiciones previas, pero la provocación israelí y la violencia de los colonos representan un problema, enfatizó.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Arabia Saudita, Faisal bin Farhan, ratificó en el mismo escenario la necesidad de establecer un Estado palestino como único camino hacia la seguridad y la estabilidad en la región.
En respuesta a una pregunta sobre la normalización de su gobierno con “Israel”, Bin Farhan reiteró que sus atenciones en estos momentos están en el alto al fuego y la entrega de ayuda humanitaria a Gaza.
No obstante, condicionó el polémico proceso de normalización a una iniciativa árabe de paz, y mientras tanto, no hay relaciones directas con la entidad sionista.
A su vez, el canciller de Egipto, Sameh Shoukry, advirtió sobre las repercusiones humanitarias catastróficas esperables si el premier israelí, Benjamín Netanyahu, continua con sus planes de operación militar integral en Rafah, al sur de la Franja.
Además desmintió la supuesta construcción de un muro en la frontera con territorio palestino bajo asedio, donde "sólo estamos llevando a cabo operaciones de mantenimiento", especificó.
De acuerdo con sus declaraciones, El Cairo "no tiene la intención de preparar ningún lugar seguro para los civiles en Gaza", y de hecho condenó los intentos de desplazamiento del pueblo gazatí en varias oportunidades.
Este viernes, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, confirmó en su discurso en la Conferencia de Seguridad de Múnich que cualquier ataque a Rafah sería devastador para los 1,5 millones de palestinos que se encuentran en la ciudad.
“No hay justificación para el castigo colectivo israelí a los residentes de Gaza”, valoró el máximo dirigente de la ONU.
