Desacuerdos en gabinete de "Israel" repercuten en su diplomacia
El primer ministro, Benjamín Netanyahu, orientó a los embajadores en Washington y Londres no cooperar con la visita del ministro de Defensa, Benny Gantz, por ir con los aliados a sus espaldas.
La oficina del primer ministro de "Israel", Benjamín Netanyahu, dió instrucciones a su embajada en Reino Unido de no cooperar con la visita a Londres del titular de Defensa, Benny Gantz, quien viaja sin el beneplácito del gabinete de guerra.
Según reveló el Canal 12 israelí, similar medida orientaron a la sede diplomática en Washington, a donde fue Gantz primero para negociar con Estados Unidos aspectos esenciales de la guerra en la Franja de Gaza y contra toda Palestina.
Nada en el plan negociador del ministro contó con la aprobación de Netanyahu, quien decidió boicotear tales gestiones, lo cual exacerbó aún más la crisis política en el seno de la entidad ocupante, aseveró el medio local.
Los empleados en Londres recibieron instrucciones de enviar mensajes de texto sobre cualquier consulta de funcionarios británicos acerca de Gantz.
Gantz, el competidor más destacado de Netanyahu, pretende reunirse con el titular de Asuntos Exteriores británico, David Cameron, en un intento de impedir un embargo sobre las armas suministradas a "Israel" por ese gobierno.
De acuerdo con el reporte del Canal 12, la oficina de Defensa coordinó esta visita por sí sola, sin recibir asistencia diplomática, lo cual contradice los procedimientos habituales.
A tono con la situación, el embajador israelí en Estados Unidos, Michael Herzog, pidió no acompañar a Gantz en sus encuentros con funcionarios estadounidenses, sobre todo con la vicepresidenta, Kamala Harris; el secretario de Estado, Anthony Blinken, y el asesor de Seguridad Nacional, Jake Sullivan.
ما الذي يحصل داخل كابينت الحرب في "إسرائيل"؟ ومن المستفيد من هذا الخلاف المستجد بين نتنياهو وبيني غانتس؟
— قناة الميادين (@AlMayadeenNews) March 3, 2024
محلل #الميادين للشؤون الفلسطينية والإقليمية ناصر اللحام في #التحليلية @nasserlaham4 pic.twitter.com/7IyO1PL5qR
Herzog recibió instrucciones de ignorar la visita y considerarla no oficial, como parte de la "venganza" de Netanyahu contra Gantz, tras una acalorada discusión entre ellos.
Tras la reyerta, Netanyahu enfatizó al periódico Yedioth Ahronoth: "Israel tiene sólo un primer ministro", para descalificar las opiniones de su rival.
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, justificó el recibimiento al alto funcionario, a pesar de las reacciones negativas del premier, como un "desarrollo natural de las discusiones entre ellos".
Como reconoció Kirby, el propósito de la administración estadounidense es reunirse con todos los miembros del gabinete sionista, para conocer sobre los avances en el terreno, la posibilidad de introducir ayuda y las negociaciones para el regreso de los prisioneros.
"No los devolveremos tal como vinieron”, prometió Kirby, quien confirmó a la prensa que Gantz solicitó ser recibido, a despecho de la opinión de Netanyahu.
En la entidad sionista, las diferencias entre los líderes israelítas son profundas. El miembro de la Knesset (parlamento) Simha Rothman describió el viaje de Gantz a Washington como una vergüenza, y también criticó la orden al embajador de no apoyarlo.
Un enfrentamiento sin precedentes entre el jefe de Gabinete y los ministros
La crisis, cada vez más profunda, en la entidad de ocupación no se limitó al nivel político, pues las disputas se extendieron para incluir al Jefe de Estado Mayor del Ejército, Herzi Halevy, y a los ministros del gobierno, sobre la actuación del Ejército en Gaza.
En este contexto, el Canal 12 comentó sobre un enfrentamiento a gritos entre Halevy y ministros durante unas conversaciones consultivas celebradas en fecha reciente.
En opinión de Yaron Avraham, corresponsal de asuntos políticos del canal, estos enfrentamientos sin precedentes permanecieron en secreto, porque “muchos no tienen ningún interés en filtrar este asunto”.
Los ministros criticaron con dureza la actuación del ejército en la Franja de Gaza, y al Jefe de Estado Mayor, consideraron insuficiente la operación terrestre, vieron lentos los avances y catalogaron la idea de mantener a Rafah hasta el final como un error.
A su vez, Halevy recordó a los ministros que "en general, no querían esta maniobra. Si el ejército y el sistema de Seguridad no hubieran presionado para ello, nunca habríamos maniobrado en Gaza".
Según el analista, estas duras declaraciones muestran el enojo mutuo entre los distintos partidos, pues el Jefe del Estado Mayor y los líderes militares ven a los políticos en el intento de responsabilizarlos por una serie de elementos a lo largo de todo el país.
Por otro lado, una parte de los ministros cree que las opciones tácticas del “ejército” israelí en esta guerra no son lo suficientemente buenas, pero no divulgaron las críticas para “no dañar la seguridad de Israel”.
Para el corresponsal de asuntos militares del Canal 12, Nir Dvori, el primer ministro sí está satisfecho con el desempeño del ejército y el ritmo de trabajo, o lo habría aclarado en la discusión.
Dvori puntualizó que la decisión de entrar en Rafah se debió al gobierno, no al Jefe de Estado Mayor.