Aumentan deserciones partidistas y rebelión ministerial en Reino Unido
En los últimos días, el Partido Conservador fue testigo de la salida del diputado Mark Logan, después del abandono de Natalie Elphick y el exministro de Salud Dan Poulter.
Las deserciones en el Partido Conservador en Reino Unido aumentaron en el contexto de la guerra genocida israelí en curso en la Franja de Gaza desde hace aproximadamente ocho meses.
En los últimos días, la fuerza británica fue testigo de la salida del diputado Mark Logan, después del abandono de Natalie Elphick y el exministro de Salud Dan Poulter.
Logan, que desertó de los conservadores, se unió al Partido Laborista, en un momento político delicado en el país, a la luz de la celebración de elecciones generales en julio.
Representante de Bolton North East por los conservadores, Logan solicitó convertirse en un miembro Laborista, en el último golpe al primer ministro Rishi Sunak.
Las críticas de Logan al apoyo de su país a “Israel” crecieron y su posición se apartó del Partido, al reclamar un alto al fuego inmediato en Gaza, informó la BBC británica.
En respuesta a la pregunta de la cadena sobre si el líder del Partido Laborista, Keir Starmer, comprendió bien los acontecimientos en Gaza, Logan aseguró que creía que la organización estaba "en una mejor posición para lidiar con lo que venga en el futuro" con respecto a la guerra.
A propósito, el Ministerio de Asuntos Exteriores enfrenta una "rebelión interna entre sus empleados", debido a la guerra israelí en Gaza.
Según el sitio web Declassified, cientos de funcionarios de la institución escribieron al titular, David Cameron, instando al gobierno a publicar su asesoramiento jurídico sobre si su apoyo a “Israel” viola el derecho internacional.
Los 300 trabajadores exigieron un cambio de rumbo con respecto a la agresión en Gaza, cuestionaron las acciones y la política de los ministros.
En este punto, el Ministerio no respondió directamente y envió a su director político, Christian Turner, a celebrar una reunión con un pequeño grupo de quienes manifestaron preocupaciones sobre la política británica y las violaciones del derecho internacional humanitario en Gaza.