“Israel” y EE. UU., cómplices en la política de hambre aplicada a Gaza
Un comunicado de la Oficina de medios del gobierno en la Franja condenó el silencio de muchos países ante el crimen contra niños, pacientes y otros civiles, privados de ayuda humanitaria por 65 días consecutivos.
La oficina de medios del gobierno en la Franja de Gaza condenó la continua prohibición por parte de “Israel” y su aliado, Estados Unidos, de la entrada de ayuda humanitaria, suministros médicos, alimentos y otros recursos esenciales, por 65 días consecutivos.
En un comunicado emitido este miércoles, la institución reprochó el silencio de muchos países respecto a esta violación del derecho internacional, lo cual los hace partícipes de un terrible crimen humanitario.
Según destacó el mensaje, impedir la entrada de ayuda y suministros médicos amenaza las vidas de miles de niños, pacientes y otros civiles y pone en juego su destino.
Cientos de miles de toneladas de ayuda se acumulan al otro lado de los cruces de la Franja de Gaza, y el ejército agresor genocida no permite la entrada.
Remarcó además que negar ayuda a la población atrapada en esta agresión es un crimen histórico y legal, un indicio de la decadencia moral de los gobiernos alineados con el régimen agresor, capaces de provocar la catástrofe humanitaria en la Franja.
El comunicado responsabilizó a la comunidad internacional de no hacer nada ante el obstáculo a la ayuda para los gazatíes, y reclamó el fin de la política de hambre, enmarcada en la continuación del crimen de genocidio cometido por la entidad de ocupación, con la complicidad estadounidense, contra civiles, niños, mujeres, enfermos y hambrientos, por décimo mes consecutivo.
Tal escalada de la política de hambruna contra el pueblo palestino tendrá un impacto catastrófico en la Franja y en toda la región, en tanto entra en conflicto con todas las leyes, convenciones y tratados internacionales, que prohíben y criminalizan el uso de la política de hambre como arma de guerra, por ser un crimen contra la humanidad.
En ese contexto, las autoridades sanitarias de Gaza confirmaron la muerte de al menos 33 niños hasta el momento por desnutrición, la mayoría de ellos en las regiones del norte de Gaza, donde los bombardeos resultaron más intensos desde el estallido de la epopeya Diluvio de Al-Aqsa, en octubre pasado.