Australia prohibió la entrada al país a la exministra de Justicia israelí, Ayelet Shaked, adonde pretendía viajar para participar en una conferencia organizada por el Consejo de Asuntos Judíos.

Como detalló el diario local The Australian, las autoridades se negaron a otorgar una visa de entrada a Shaked porque su presencia podría “incitar a la sedición”. 

De acuerdo con la ley del continente austral, se puede prohibir la entrada a quienes pueden “difamar a un segmento de sociedad australiana, o incitar a la sedición en la sociedad o en un segmento de ella".