Habitantes de Al-Maalaqa, en Siria, rechazan ayuda de “Israel”
“¿Cómo puedo aceptar su ayuda cuando ocupan nuestra tierra?”, preguntó el alcalde de la localidad siria asediada por las tropas sionistas.
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El "ejército" de ocupación israelí apostado en el sur de Siria.
Los habitantes de la aldea de Al-Maalaqa, en la provincia de Quneitra, al sur de Siria, rechazaron este viernes cualquier ayuda proveniente de las fuerzas de ocupación israelíes y confirmaron que no necesitan asistencia de quienes ocupan su tierra.
El alcalde de la aldea, Kheder Obeida, declaró a la agencia turca Anadolu que el enemigo entra y sale de la zona más de diez veces al día, registran viviendas y generan pánico entre mujeres y niños.
Obeida explicó que los soldados le ofrecieron distribuir ayuda humanitaria entre los residentes, pero estos la rechazaron y prefieren recibir asistencia del gobierno sirio y de organizaciones locales que les proporcionan servicios esenciales.
“¿Cómo puedo aceptar su ayuda cuando ocupan nuestra tierra?”, se preguntó el alcalde y aseguró que recibir ayuda de la ocupación sería una falta de respeto a la sangre siria.
Las fuerzas israelíes ingresaron el martes último en la aldea con vehículos blindados y llevaron a cabo registros en viviendas y provocaron miedo entre los residentes antes de retirarse nuevamente.
Días atrás, el diario estadounidense The Washington Post informó que el ejército israelí construía puestos militares en varias aldeas sirias ocupadas tras la caída del anterior gobierno sirio en diciembre de 2024.
Según el periódico, los habitantes de la zona de Jabata al-Khashab, en Quneitra, expresaron su temor de que la ocupación no sea transitorio como aseguraron los soldados al tomar la localidad.
Los residentes afirmaron que “Israel” crea bases militares y edificaciones en los límites de la aldea y no creen sea "temporal".
Por su parte, el periódico israelí Yedioth Ahronoth citó a altos funcionarios sionistas que confirmaron que “Israel” planea controlar una franja de 15 kilómetros dentro del territorio sirio y establecer una "zona de influencia" con vigilancia de inteligencia en un radio de 60 kilómetros.