Mantener tropas en el sur de Líbano es un error estratégico
La prensa israelí afirmó que el régimen sionista se hunde nuevamente en el pantano libanés, 25 años después de haber logrado salir de él.
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Fuerzas del ejército israelí patrullan la aldea de Kfar Shuba en el sur del Líbano.
"Israel” repite los graves errores del pasado en medio del trauma por la falta de defensa militar el 7 de octubre de 2023, consideró el corresponsal de asuntos militares y del norte del diario Maariv, Avi Ashkenazi.
El reportero confirmó que esa entidad ocupante se hunde nuevamente en el pantano libanés, 25 años después de haber logrado salir de él.
Ashkenazi admitió que el régimen ocupante no tiene una estrategia y actúa como un cuerpo de bomberos, con el “ejército” y el liderazgo político ocupados en apagar incendios en lugar de planificar a largo plazo.
"Lo mismo ocurre en el norte, en Gaza y en la tercera esfera, es decir, Irán", añadió.
Señaló que la estructura militar israelí, que requirió enormes presupuestos y sobrecargó los recursos del país, provocó la mayor crisis económica de los años ochenta, descrita posteriormente por economistas como "la década perdida de la economía israelí".
Recordó que el “ejército” israelí invadió Líbano en 1982 y quedó atrapado allí durante 18 años.
El corresponsal mencionó que las tropas enemigas construyeron dos cinturones de seguridad en el Líbano, pero estos se convirtieron rápidamente en trampas para sus propios soldados.
"Tal vez hemos olvidado la tragedia de la caravana Safari (operación del mártir Amer Kalakesh en Marjayoun, que mató a 12 soldados israelíes), los incidentes de Salouqi y Shayetet, los ataques a helicópteros, a vehículos blindados y muchas otras", recordó.
El periodista reconoció que la sangre israelí se derramó en Líbano durante 18 años sin ningún objetivo real y ese gobierno sionista repite hoy los mismos errores.
Volver a instalar las posiciones militares que abandonó hace 25 años es un error, y muchos padres y madres llorarán por ello en el futuro, aseguró.
Cuestionó la utilidad de mantener puestos como Karkom (Balat), Shaked y Tzafzafoni, entre otros.
Ashkenazi concluyó que el “ejército” israelí no logró proporcionar seguridad a la “población", y advirtió que establecer bases en el sur del Líbano no resolverá este problema.
"La verdadera prueba de seguridad ocurrió, por ejemplo, el 7 de octubre de 2023", sentenció.
