A 654 días del inicio de la guerra de exterminio contra la Franja de Gaza, el sistema penitenciario israelí continúa con sus crímenes sistemáticos contra más de 10 mil 800 prisioneros. 

Club de Prisioneros Palestinos repasó en un informe los crímenes más destacados cometidos contra los presos por parte de la entidad.

Señaló que durante la primera quincena de julio, la ocupación practicó una política de inanición y agresiones físicas sistemáticas.

El informe indicó que la sarna estaba muy extendida y existió una negación a brindar tratamiento a los detenidos.

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Uno de los testimonios narró una agresión a un prisionero que le provocó fracturas de costillas, mientras las unidades de las prisiones apagaron deliberadamente cigarrillos en su cuerpo.

 

 

 

 

 

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Otros testimonios informaron sobre el uso de pistolas eléctricas para golpear a los prisioneros y el disparo de balas de goma a sus extremidades.

En este contexto, la Autoridad de Radiodifusión de "Israel" reveló el lunes que "los  prisioneros palestinos de Gaza y los prisioneros libaneses se encuentran recluidos en una bóveda subterránea de hormigón, en condiciones prácticamente inhabitables".

Indicó que los detenidos son confinados en sus celdas las 24 horas del día, excepto una hora en la que se les permite salir a un "patio", una pequeña habitación fortificada con paredes de hormigón y una pequeña luz visible a través de las rejas del techo.