A lo largo de las últimas décadas, el uso de la desinformación y las operaciones psicológicas ha sido fácilmente utilizado por Occidente en Oriente Medio y en todo el mundo.

Resulta que con el debilitamiento del orden mundial occidental, todos los datos y las noticias se han vuelto poco profesionales y están plagados de ridículas mentiras. Sabemos que no todas las mentiras son iguales y que el deber del verdadero periodismo es decir siempre la verdad completa y entera, "¡que Dios me ayude!", como "jura solemnemente" el Presidente de los Estados Unidos.

Algunos considerarían el Día de los Inocentes como un día de diversión y juegos entre amigos y los medios de comunicación también se han divertido con esto, pero los patrones muestran una correlación directa digna de mención entre la pérdida de influencia de Occidente y el uso de la desinformación. 

El mundo occidental supuestamente no hace distinciones evidentes entre los refugiados por su etnia o raza. Todos elogiamos tan noble norma como lo hace un buen ciudadano de cualquier país moderno, pero las consignas de igualdad, justicia y democracia que se imponen continuamente a los pueblos contradicen sus lemas. El odio y el vitriolo del racismo real aparecen específicamente en la crisis del mundo occidental, incluso entre los suyos. En el continente europeo, la magnitud de la disparidad racial en su interior lo atestigua, no obstante, esto es desde el punto de vista occidental. Pero desde otro punto de vista, se presenta una presentación de hechos falsificados, si no fake news. ¿Por qué? Para ocultar el alcance de esta decadencia interna del racismo que acecha.

Las recientes declaraciones de los líderes occidentales son, de hecho, la mayor evidencia de una crisis de liderazgo y se exhibe ante el pueblo estadounidense. Cíclicamente, la sociedad occidental aprueba la destrucción de las patrias. Esta destrucción crea más crisis y más refugiados. Cuando los refugiados se filtran a través de la tramitación, al llegar la siguiente temporada electoral, Biden parece un ayudante de la minoría y del refugiado. De hecho, las minorías y los refugiados son un grupo demográfico simbólico para los demócratas, y por qué no iba a serlo cuando los propios medios de comunicación apuntalan al belicista como el héroe que ayuda a los que escapan del infierno que él mismo ideó.

La distinción entre el refugiado blanco y el refugiado "salvaje", que muchos líderes europeos dijeron al principio de la guerra, es una prueba más de esta crisis de la cultura y la influencia estadounidenses.  La simple lógica dice que si los europeos se sienten responsables de lo que ocurre en su vecina Ucrania, entonces ¿por qué estas declaraciones polarizantes?

Demuestra la exageración de sus acciones o, más exactamente, las reacciones que no son auténticas y la diplomacia exhibida es teatro quizás para coaccionar a las masas en una agenda aparentemente noble. 

No podemos olvidar el movimiento del Brexit que logró desmembrar a Inglaterra de la Unión Europea. Fue la negativa del pueblo británico a acoger a más ciudadanos de la UE. ¿Y qué pasa con los refugiados? Esto es lo que vemos ahora de la negativa de Inglaterra a aceptar a cualquier refugiado ucraniano, un europeo rubio y civilizado. Y esto es exactamente lo que ocurrió en la Segunda Guerra Mundial.

El mundo occidental se llama el mundo libre pero su sistema económico global se ocupa principalmente de Europa Occidental y de los Estados Unidos. La consecuencia obvia es un pueblo económicamente inferior que incluye a los europeos orientales pobres. 

Para el racismo real, sólo hay que considerar la historia reciente. Fue el mundo occidental el que ayudó a exterminar a los judíos y los utilizó en la guerra mundial cuando después muchos millones emigraron. La solución fue enviar a millones de ellos en una nueva cruzada a Oriente Medio o a los Estados Unidos de América. Cuando se aprobó el Plan Marshall para ayudar a Europa a recuperarse, se especializó en ayudar a Europa Occidental, pero los refugiados de esa guerra no tuvieron ninguna posibilidad de recibir esa ayuda. Sobre el terreno, ahora está claro que Ucrania será el teatro de la Guerra Fría durante mucho tiempo. 

Occidente tiene la clara intención de prolongar su guerra y hacerla más parecida a Afganistán. Hasta el momento, hay un millón seiscientos refugiados después de la primera semana de la guerra, y se espera que el número de refugiados aumente hasta el 25% de la ciudadanía ucraniana, un gran coste a pagar para una nación recientemente establecida. 

Además del aumento del número de muertos y heridos, los occidentales son reclutados como mercenarios para trabajar contra el ejército ruso, que conoce la trampa que tiene delante pero es paciente y más estratégico de lo que los medios occidentales quieren admitir.  Putin no hace avanzar todas sus fuerzas sino que espera pacientemente. Sus movimientos tácticos lo confirman. 

Europa ha entrado en una nueva era de la que no saldrá como espera. Más bien, creo que la era que se avecina es la del mayor conflicto europeo, con la afluencia de un número cada vez mayor de mercenarios procedentes de todas las regiones devastadas por la OTAN y los Estados Unidos.

A pesar de todo este caos, las mentiras de los medios de comunicación occidentales son interminables. Esto nos hace preguntarnos: ¿Qué espera EEUU de todo este caos?

Cuando comenzaron los combates, llamé a un conocido que es un activista serbio estadounidense. Radomir Ostojic confirma que la gran población de EE.UU. está muy desinformada e ignorante. 

El primer día de las operaciones militares, me mostró una imagen utilizada por los medios de comunicación occidentales de la explosión de Belgrado en 1999. La imagen se ha difundido en Internet y en EE.UU., afirmando que la explosión procedía recientemente de Kiev, cuando en realidad era de la guerra de Serbia en la que la OTAN había participado anteriormente. También me envió capturas de pantalla de los medios de comunicación y de los influenciadores de las redes sociales que contradicen la verdad y que muestran cómo el actual conflicto en Ucrania es otro y similar al de Serbia. En este despliegue de noticias falsas, Zelensky es presentado como un héroe de guerra; un gran salto desde su baile con tacones en la televisión hace sólo siete años. 

Ahora que Estados Unidos ha logrado iniciar una guerra, está "transfiriendo a sus mercenarios y distribuyéndolos en distintas regiones del mundo". Como en Siria y Libia, ahora los reúne para una nueva batalla a su favor en Ucrania. Esto es la guerra: los líderes conspiran y los inocentes mueren. 

En un colapso económico, la Administración Biden se dispone a transferir capital a los Estados Unidos de América tras el colapso de las industrias europeas por la falta de energía que el propio Biden creó.

Pero tras el estallido de la guerra, y con las promesas de los líderes occidentales de no enviar a sus hijos a la guerra, queda una solución: El envío de mercenarios y grupos religiosos que ellos mismos hicieron con sus propias manos, bajo banderas y consignas por la democracia. Sólo hay que recordar cómo terminó Afganistán para los estadounidenses bajo Biden, la rendición. 

El dicho popular: la historia se repite, se confirma con las palabras de Biden hoy, similares a las de Carter antes, que casualmente ambos son demócratas. 

Fue la administración estadounidense en los años setenta la que estableció a Al-Qaeda en Afganistán, y Abdullah Azzam fue el responsable financiero de la financiación del grupo, en beneficio de la CIA, a través de las organizaciones de ayuda y asistencia.

Osama bin Laden ascendió a la gloria yihadista tras el asesinato de Azzam por algunos miembros del grupo. La inteligencia estadounidense dirigía todas las operaciones desde Pakistán, concretamente desde Peshawar, el centro de mando de las operaciones, cerca de la frontera pakistaní. 

Hay muchos nombres ilustres dentro de la comunidad política estadounidense, como Zbigniew Brzezinski, que fue una de las manos de la CIA y del presidente Carter personalmente "en Pakistán". 

Algunos informes han cuestionado que el propio Obama estuviera en Pakistán en 1981 durante un año. Este viaje fue mencionado por el propio Obama durante su campaña electoral presumiendo esencialmente de la diversidad de su cultura humana.

Incluso los periódicos estadounidenses anunciaban viajes gratuitos a Pakistán para hacer turismo. ¿Qué tipo de turismo se ofrecía en Pakistán en los años ochenta del siglo pasado?

Tal vez esta sea la razón principal de la insistencia de Obama en matar a Osama bin Laden para ocultar muchos hechos, y las declaraciones de Nabil Naim, un antiguo líder de la Organización de la Yihad que cuestionó las declaraciones de Obama sobre el asesinato de Osama bin Laden y puso en duda el destino de su cuerpo, y ¿es la historia de Obama sobre bin Laden similar a la imagen del supuesto atentado de Kiev? ¿O a la del héroe de guerra femenino con tacones altos que llamamos Zelensky?

La relación entre los demócratas de Estados Unidos de América y los grupos salafistas y takfiríes continuó hasta llegar a la recepción de miles de miembros encabezados por Omar Abdel-Haram, el primer muftí de los grupos islámicos, que pronunció sermones desde los púlpitos de Bagdad y las mezquitas de Estados Unidos. Su participación en el atentado de 1993 contra el World Trade Center acabó con su relación con Estados Unidos.

Ahora, Estados Unidos y los países europeos vuelven a Afganistán. Pero esta vez, es europeo y en el segundo país europeo más grande. 

¿Hará Estados Unidos de Europa un centro para los grupos takfiríes? Le pregunté a mi amigo, un periodista estadounidense independiente, Hazem Farraj, qué cree que está ocurriendo. Descubrí que la supresión de la información, y lo que es peor, el uso de la propaganda, se estaba introduciendo entre los estadounidenses ya en 2014: "se dirigió a los musulmanes de los Estados Unidos. Cuestionar a cualquier demócrata que estuviera aliado con los influenciadores de la Hermandad Musulmana se convirtió en un ataque racista contra los árabes y los musulmanes, en lugar de una indagación honesta por parte de un compatriota árabe estadounidense". Biden no puede enviar tropas a Ucrania porque la mayoría de los estadounidenses están en contra. Sin embargo, lo que es realmente aterrador y algo irónico es que hemos sido testigos por primera vez en nuestra historia occidental de la llamada a la "yihad", pero esta vez no por parte de los jeques, esta vez por parte de celebridades, actores de Hollywood y extremistas demócratas. Esto hace que me dé cuenta de lo perversa que es la política basada en la identidad y la raza".

El océano de activistas censurados es obvio y la prueba es la moda de atacar las opiniones disidentes y que los que dicen la verdad sean censurados. 

La razón es sencilla. Los estadounidenses no pueden comparecer ante el volumen de mentiras que sostiene su máquina de guerra y esta máquina vive de la propaganda. 

Así que, al final, ¿qué quiere la administración estadounidense después de Ucrania? 

Las decisiones de la administración Biden parecen tener como objetivo crear discordia entre los informadores e influenciadores. Imagínese una sociedad donde las voces del racismo y los religiosos y sectarios crean luchas y caos que finalmente implosionan en sí mismos, mientras que el gobierno estadounidense fabrica mercenarios que luchan sin armas. Los occidentales que llegan a luchar están atrapados y son justos colaterales en la estrategia de Putin. 

Biden no puede enviar tropas reales a Ucrania, ya que los estadounidenses están en contra. Sin embargo, como afirma Farraj: "Esta es la primera vez en nuestra historia occidental que se normaliza algo parecido a la versión islamista de la "yihad" y que no ha sido convocada por jeques islamistas sino por celebridades occidentales, expertos en redes sociales y actores de Hollywood".

Ya que Biden y los demócratas están comprometidos con otra guerra, pero no enviarán a sus hombres a Ucrania, ¿a quién enviarán? Mientras los demócratas piden y buscan nuevos ciclos de noticias, la historia puede asegurarnos una promesa. Lo que funcionó antes se intentará, así que esperen que la Hermandad Musulmana tenga sus ideas y su agenda islamista politizada para salvar a la Administración Biden con otro acto teatral de falso valor. Los musulmanes tienen cuidado. Biden está reclutando mercenarios y los islamistas son conscientes de ello. 

Las opiniones mencionadas en este artículo no reflejan necesariamente la opinión de Al Mayadeen, sino que expresan exclusivamente la opinión de su autor.