La Resistencia será colectiva en todos los niveles
Los trozos sueltos de la nación palestina tienen vínculos, brazos, órganos invisibles que responden a la misma sangre y la misma aspiración, pues cada trozo sabe qué ocurre y por qué. Ahora viene el criminal Netanyahu a subir más peldaños, continuadores de lo que empezó en la división decidida en la ONU.
¡Que siga cada héroe en su sitio! / ¡Que caiga fulminada la traición! / ¡Que enmudezca el cobarde reaccionarismo! / Pues el pueblo la afrenta lavará. / Resonó el añafil de la venganza. / ¡Raja de veinte años! / La estrella de Israel domina el alminar. / ¿Quién así, patria mía, / se alzará para orar? / Si pezuñas judías pisan el techo / de la mezquita del Aqsa. / Si cascos de soldados hacen sombra / al obispo, al devoto y al diácono. / Encarcelan el nombre de Dios / y cocean la misa. / ¿Quién, así patria mía, / puede cerrar los ojos al desbordarse de las campanas?
Versos del poema Fragmentos Palestinos. Autor, el gran poeta, Muhammad Al-Fayturi.
Aún queda la lucha colectiva. La “trampa diplomática” de llamar negociación a sentarse a ver cómo el colonialista admite sentarse con representantes de Palestina a condición de que admita su imposición colonial, “trampa” y condición jaleadas por los imperialistas, con el tiempo ha dado como resultado la normalización del crimen que representa. Además ha desdibujado el horizonte por su improductividad: la invasión sionazi continúa. Palestina robada de la que quedan unos trozos, Jerusalén, Cisjordania y Gaza, guetos en los que la banda ocupante trata de encerrar al Pueblo y bloquearlo para que se rinda o se deje expulsar de sus casas, de sus aldeas, de sus barrios de ciudades en que se apiña.
La entidad sionazi es presentada en los medios de difusión con simpatía, téngase en cuenta que el 95 por ciento de los medios en el mundo pertenecen a los financieros y banqueros sionistas. El robo protegido, igualmente por las cadenas que falsean la realidad, también alimenta al ladrón para que crezca, y el criminal protegido queda impune, el sionazi actúa con confianza, tanto en la “trampa diplomática”, como sobre terreno palestino. Un ejemplo de última hora, la noticia Colonos israelíes ocupan tierras palestinas de Khirbet Samra.
Pero los trozos sueltos de la nación palestina tienen vínculos, brazos, órganos invisibles que responden a la misma sangre y la misma aspiración, pues cada trozo sabe qué ocurre y por qué. Ahora viene el criminal Netanyahu a subir más peldaños, continuadores de lo que empezó en la división decidida en la ONU. Ya sabe usted que en las guerras, y más las de conquista, en el caso de Palestina debemos decir los invasores coloniales, emplean dos herramientas: la primera es la mentira y la segunda es la matanza de los habitantes. Las dos comparten tiempo y espacio y directamente o a través de su ejército publicitario ponen en práctica la teoría del espejo, del nazi Goebbels: acusar a la víctima un millón de veces de lo que es acusado el criminal, ocultando su propia raíz y el objetivo que tiene.
¿De quién se rodea Netanyahu para continuar la invasión con los millones de ultra reaccionarios traídos de cualquier parte del mundo?: de individuos sumamente crueles, si es que cabe ser aún más que los anteriores en el mando sionista. En estos días los seguidores sionazis de Netanyahu han saltado la mezquita de Al Aqsa y han asaltado la Tumba de José en Nablus. De inmediato los protectores del ente israelí se han puesto a hablar de lo que significa la “trampa diplomática”: hay que sentarse, hay que entenderse, hay que … , nunca ponen en marcha el bloqueo de los que destrozan la legalidad internacional, eso es solo para quien no se le rinde.
En la banda de Netanyahu se encuentran los más fanáticos sionazis que han ocupado cargos, por ejemplo: Itamar Ben Gvir, del partido ultraderechista Poder Judío, más radical que los anteriores ocupantes de cualquier puesto, que va a dirigir la policía ¿SS? Gvir es conocido por su relación con los asesinatos cometidos por los colonos. Le sigue Kiriat Arba, conocido por su empeño público para que fuese asesinado el que hacía de primer ministro en 1995, Yitazhak Rabin, porque le resultaba débil- Kiriat Arba también es conocido por su celebración diaria del asesinato de 29 palestinos en una mezquita en Hebron.
El tercero igualmente sionazi en extremos superiores de lo conocido es Bezalel Smotrich, colono que agita para que se ocupe toda Cisjordania. Entre sus últimas hazañas racistas se encuentra la de impedir que los palestinos puedan titular sus propiedades y prohibir que en los hospitales bajo jurisdicción del ente atiendan en las mismas zonas a mujeres palestinas y ocupantes. El cuarto es Avi Maoz, más ultra sionazi, más racista que los que ocupaban el cargo de la Educación. ¿Se imagina usted el plan de enseñanza de un recontra sionazi? Hitler estaría satisfecho.
En los foros internacionales no dicen nada, estarán esperando a que la “prensa” desarrolle viejas y nuevas argumentaciones, la herramienta primera: la mentira para normalizar el aumento del terror sionazi.
La Resistencia Palestina está obligada desde el principio a ser colectiva, popular, sin anteponer intereses ni diferencias, desde la base en las calles y los campos, hasta los más altos dirigentes.
¡Que siga cada héroe en su sitio! / ¡Que caiga fulminada la traición! / ¡Que enmudezca el cobarde reaccionarismo! / Pues el pueblo la afrenta lavará. … ¿Quién, así patria mía, / puede cerrar los ojos al desbordarse de las campanas?