“Sólo quiero decirles que en CNN no hay entrevista, hay debate político. Respetamos, pero ellos quieren pasar como un medio de comunicación que informan. No informan, desinforman; y con presidentes y gobiernos antiimperialistas, es siempre un debate político”, ha manifestado este jueves el jefe del Ejecutivo de Bolivia durante un masivo acto en la localidad de Colomi, en el departamento de Cochabamba (centro).

Morales ha realizado tales afirmaciones en referencia a una entrevista a la que asistió el pasado lunes el ministro de Gobierno, Carlos Romero, y que fue rechazada por las autoridades bolivianas.

En este contexto, Morales asegura que el Gobierno de su país debatirá políticamente sin mentir. Al mismo tiempo, recalca que la mencionada cadena representa al imperio, mientras que su Administración representa al pueblo boliviano.

Los resultados del Gobierno antiimperialista de Bolivia son destacables por la soberanía política, económica y social conseguida durante los últimos diez años, ha agregado el máximo responsable del país andino antes de subrayar sus diferencias con los gobiernos derechistas.

“No nos roban, no nos saquean, ahora tenemos dignidad al margen de recuperar los recursos naturales, ahora el boliviano es respetado en todo el mundo. Esa es nuestra dignidad, eso hemos conseguido con la unidad del pueblo boliviano”, ha afirmado.

Además, ha puesto en guardia ante las campañas de calumnias de la oposición nacional e internacional de cara al referendo que se celebrará el próximo 21 febrero, que podría permitir o no una nueva repostulación de Morales.

Por su parte, la ministra de Comunicación de Bolivia, Marianela Paco, acusó el miércoles a la cadena estadounidense de calumniar al país sudamericano y de mentir en su contra por sistema. A su juicio, la entrevista transgredió todas las normas y costumbres, limitó la libertad de expresión y sesgó las declaraciones del funcionario boliviano.

No es la primera vez que las autoridades de los países izquierdistas de América Latina arremeten contra la CNN. Al respecto, el Parlamento de Venezuela aprobó el pasado mes de agosto una declaración de rechazo a la cadena por su “propaganda de guerra”.

También se ha denunciado una campaña de desprestigio de la CNN y de la oposición de Ecuador contra el presidente ecuatoriano, Rafael Correa.