La actual extinción masiva es más grave de lo pensado
Según los expertos, hay muy poco tiempo para detener la pérdida de biodiversidad.
Una nueva investigación realizada por especialistas del Reino Unido advirtió sobre el enorme desfase temporal entre el cambio ambiental y su impacto en las poblaciones animales.
Publicado en Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences, el trabajo cuantificó cómo la pérdida de hábitat y el calentamiento global influyeron en los grupos estudiados.
Los datos revelaron que los retrasos son de 13 años para las aves pequeñas y de 40 años para las especies más grandes.
"Incluso si se protege el 30 por ciento de la tierra para 2030, harán falta intervenciones adicionales que mitiguen la explotación para salvaguardar adecuadamente la biodiversidad y la contribución de la naturaleza a las personas", advirtió el equipo.
Aun así, encontraron aspectos positivos. Por ejemplo, la gestión activa de las zonas protegidas mitigó las amenazas derivadas del uso directo de la fauna salvaje.
El esfuerzo por gestionar y restaurar los ecosistemas también mostró beneficios directos para la salud humana, pues los lugares sanos y funcionales tienen menos probabilidades de propagar enfermedades a las personas.