Trump arremete contra Irán, Venezuela y Cuba
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, consideró que su país es más fuerte que nunca en su discurso sobre el estado de la unión ante el Congreso de los Estados Unidos y reiteró su promesa de poner fin a lo que describió como guerras estadounidenses en el Medio Oriente.
Mientras Siria, Iraq, el llamado “Acuerdo del siglo” y Corea no estuvieron presentes en el discurso de Trump, este sí habló sobre Irán y dijo que Teherán debe renunciar a su deseo de poseer armas nucleares y repitió su confirmación de que él fue quien ordenó el asesinato del general Qassem Suleimani.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistió hoy en su actitud injerencista en los asuntos internos de Irán, Cuba, Venezuela y Nicaragua, naciones contra las cuales la administración norteamericana arremete de manera constante.
Trump puntualizó en el discurso anual sobre el Estado de la Unión ante las dos cámaras del Congreso e invitados, el tercero de su mandato, que una vez más su país defiende la libertad en el hemisferio occidental, sin mencionar las asonadas militares y las olas de violencia que han tenido la firma norteamericana.
Trump describió al presidente venezolano, Nicolás Maduro, como el dictador que será destruido frente a la oposición de Juan Guaidó, que estuvo presente en el Congreso. “Estamos liderando una alianza diplomática internacional contra el dictador comunista Maduro”, acotó
Trump agregó que apoyaba las esperanzas de los cubanos, Nicaraguenses y venezolanos de restaurar la democracia en su país.
Desde enero de 2019, Washington respalda como autoproclamado gobernante en funciones a Juan Guaidó, quien entonces asumió la titularidad de la Asamblea Nacional de Venezuela y esta noche estuvo en el Capitolio federal estadounidense. También, el Gobierno norteamericano apoyó a finales de abril último un intento de golpe de Estado contra Maduro, reelecto en mayo de 2018 con el 68 por ciento de los votos, e impone una guerra económica que sufre el pueblo del país sudamericano.
Según el mandatario republicano, él quiere ayudar a los cubanos, los venezolanos y los nicaragüenses a restaurar lo que Washington entiende como democracia, en desconocimiento de los sistemas políticos y sociales escogidos por la mayoría de quienes habitan en esos países.
Defendió que su Gobierno revirtió el acercamiento con Cuba iniciado por la anterior administración de Barack Obama (2009-2017), al que calificó de política fallida, cuando, según encuestas, la mayoría de los estadounidenses apoya el desarrollo de mejores vínculos bilaterales.
El socialismo destruye naciones, añadió Trump, quien con frecuencia utiliza expresiones de ese tipo como jugada política para atacar a los demócratas y reforzar su estrategia a favor de la reelección en los comicios del próximo 3 de noviembre.
Sobre Afganistán, Trump enfatizó que estaba trabajando para el regreso de las fuerzas estadounidenses de ese país.
Inmediatamente después de que el Presidente estadounidense terminó su discurso, la Presidenta de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Nancy Pelosi, rompió el discurso en una clara expresión de su repudio.
También fue notable que los representantes demócratas no interactuaron con el discurso de Trump.