El viceprimer ministro de Defensa y Asuntos de Seguridad del gobierno de Saná, Jalal Al-Ruwaishan, confirmó que (Israel) comenzó a moverse militarmente en la región después de la normalización con los estados del Golfo.

Señaló que Tel Aviv actualmente está tratando de encontrar amenazas y justificaciones para avanzar militarmente a la región, y enfatizó que "lo que no lograron en seis  años, no podrán lograrlo en un mes, incluso con la nueva administración estadounidense".

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En su entrevista con Al Masirah TV, Al-Ruwaishan dijo que las declaraciones israelíes sobre Yemen tienen como objetivo tranquilizar a los estados que firmaron acuerdos de normalización.

Al-Ruwaishan enfatizó que Saná  es capaz de atacar objetivos israelíes sensibles en caso de que se cometa alguna estupidez contra Yemen. Instó a los países de la coalición saudí a darse cuenta de que si el frente del Mar Rojo estallaba, la escalada sería significativa.

Afirmó que "Yemen enfrenta una agresión que amenaza su seguridad nacional desde hace 6 años, y ha logrado mantenerse firme en tierra, mar y aire", explicando que "los sionistas han apoyado logísticamente la alianza desde el inicio de la agresión".

El 15 de septiembre, los Emiratos Árabes Unidos y Bahrein firmaron el acuerdo de normalización con Tel Aviv en Washington en la Casa Blanca, antes de que Sudán se uniera más tarde. Si bien Marruecos es el cuarto país árabe que anuncia la normalización con (Israel).