El Secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, declaró que "las fuerzas de seguridad de Sudán deben respetar los derechos humanos", y añadió que "cualquier violencia contra manifestantes pacíficos es inaceptable".

Blinken tuiteó que Estados Unidos se mantiene firme con "el pueblo de Sudán en su lucha no violenta por la democracia".

Las declaraciones del secretario de Estado estadounidense coincidieron con las protestas que tuvieron lugar este sábado en todo el país para exigir la restauración de un gobierno dirigido por civiles.

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En el contexto de los llamamientos internacionales a la calma y al no uso de la violencia, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Desarrollo del Reino Unido dijo en Twitter, citando al enviado especial británico para  Sudán, Robert Fairweather, que "las fuerzas de seguridad sudanesas deben respetar el derecho de los ciudadanos a manifestar pacíficamente".

"Muchos sudaneses tomarán las calles hoy", agregó Fairweather.

Asimismo, enfatizó la necesidad de que las fuerzas de seguridad respeten la libertad y el derecho de expresión. "Los servicios de seguridad y sus líderes serán responsables de cualquier violencia contra los manifestantes", añadió.

Esto llega en un momento en que la Asociación de Profesionales Sudaneses exigió la disolución del Consejo Militar y las Fuerzas de Apoyo Rápido, y el fin del control y la interferencia de ejes regionales e internacionales hostiles a la libre voluntad de los sudaneses.