Fuertes protestas de repudio a políticas del Banco Central del Líbano
Los manifestantes rechazaron la decisión del Banco Central sobre el mecanismo de captación de depósitos.
Cientos de personas protestaron frente al Banco Central del Líbano (BCL) en Beirut, en rechazo al nuevo mecanismo para obtener sus depósitos y al agravamiento de las condiciones de vida.
Los manifestantes lanzaron petardos contra la institución, incendiaron neumáticos de automóviles e intentaron asaltar otras sedes bancarias.
En el mismo contexto, la coalición "Unidos", surgida durante las protestas de noviembre de 2019, notificó el intento de varios manifestantes de entrar en la vivienda del presidente de la Junta Directiva del Banco BLC, Nadim Al-Qassar, en el área Jnah, al suroeste de la capital.
LEA TAMBIÉN: Líbano atraviesa un momento muy peligroso, advierte el FMI
El lunes último, una circular del BCL autorizó a los bancos comerciales y casas de cambio a vender el dólar a un precio de 90 mil libras libanesas, y a entregarlo a los ciudadanos después de tres días, como un intento de detener el nuevo desplome de la moneda local.
El sector bancario está al frente del colapso de la nación, con muchas instituciones prestamistas acusadas de participar en prácticas de lavado de dinero, evasión fiscal y malversación, de acuerdo con los analistas.
Durante casi tres años, la banca libanesa impulsó restricciones sobre el dinero de los depositantes en moneda extranjera, especialmente el dólar estadounidense, y estableció estrictos límites para retirar sus fondos en libras libanesas.
En la percepción general de los pobladores, el gobernador del Banco Central, Riad Salameh, figura como uno de los principales responsables de hundir al país en el peor escenario de su época moderna.
La devaluación de la moneda nacional repercute en los altos precios de los artículos de primera necesidad y en la disminución del poder adquisitivo de las personas, para complejizar la realidad económica, financiera y social.