Amplias fueron las reacciones internacionales al anuncio del movimiento Hamas de alcanzar un acuerdo de tregua humanitaria con la ocupación israelí conforme a la visión de la resistencia y sus determinantes por un período de cuatro días.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, confirmó su apoyo al arreglo y agradeció al emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani y al presidente de Egipto, Abdel Fattah El-Sisi, por sus esfuerzos de mediación.

A juicio de Biden, el trato debería devolver más detenidos estadounidenses a su patria. En la primera fase serán puestos en libertad solo tres ciudadanos.

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El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia también acogió con satisfacción el anuncio de la pausa en las hostilidades, algo que Moscú solicitó desde el inicio de la escalada del conflicto.

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A su vez, China expresó su esperanza de que el arreglo temporal ayude a aliviar la carga de la crisis humanitaria y contribuya a reducir la escalada y las tensiones.

Desde el estallido de la actual ronda de guerra, China pidió el alto al fuego y realizó esfuerzos continuos para calmar la situación, proteger a los civiles y brindar asistencia.

Reino Unido consideró el pacto un paso esencial para abordar el asunto de los prisioneros y la crisis humanitaria en Gaza.

La canciller de Francia, Catherine Colonna, exhortó la pronta liberación de los detenidos galos y saludó los esfuerzos de Qatar en las gestiones.

Asimismo, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, instó a aprovechar la pausa para intensificar la ayuda a los civiles.

El gobierno de ocupación ratificó un acuerdo según el cual Hamas liberaría a varios detenidos a cambio de la emancipación de prisioneros palestinos y una tregua en la Franja de Gaza, según informaron los medios israelíes.