Autoridades de "Israel" piden no entrar en guerra contra Hizbullah
Los medios israelíes confirmaron un estado de incertidumbre y tensión, lo que da lugar a un gran número de especulaciones sobre el precio que pagará el frente interno sionista en caso de un enfrentamiento con Hizbullah.
La alcaldesa de la ocupada Haifa, Einat Kalisch-Rotem, pidió al gobierno de israelí que no entre en una guerra contra la Resistencia del Líbano (Hizbullah), "por temor a causar enormes daños a la ciudad".
Kalish dijo que habrá áreas en la ciudad que deberán ser evacuadas, y advirtió que los túneles al-Karmil serán una trampa mortal.
Adelantó que realizan trabajos para abrir centros fortificados equipados con generadores, agua y saneamiento en caso de que continúe una guerra en el frente en el norte.
Por su parte, el exjefe del Mossad israelí Danny Yatom confirmó previamente que a "Tel Aviv" no le interesaba iniciar un frente de confrontación con Hizbullah.
En el mismo contexto, la exjefa del partido Meretz Zehava Galon, afirmó que "Israel" no puede permitirse luchar en dos frentes.
"Nos dijeron que estamos listos para luchar en Gaza y vimos lo que pasó", añadió Galon.
El secretario general de Hizbullah, Sayyed Hassan Nasrallah, confirmó que la resistencia posee capacidades de misiles enormes y precisas, que se extienden desde Kiryat Shmona hasta Eilat.
Nasrallah aseguró al ministro de Seguridad israelí, Yoav Gallant, que si lanza una guerra contra la resistencia libanesa, tendrá dos millones de desplazados del norte.
Los medios israelíes confirmaron un estado de incertidumbre y tensión en el frente norte, lo que da lugar a un gran número de especulaciones sobre el precio que pagará el frente interno sionista en caso de un enfrentamiento con Hizbullah.