EE.UU. no pidió el alto al fuego en Gaza en su proyecto de resolución
El Consejo de Seguridad de la ONU rechazó el documento de Washington, porque aún cuando reconocía el costo humano de la agresión, no pedía un cese definitivo a la guerra ni nombraba a "Israel" responsable por los múltiples crímenes cometidos.
El uso del veto por parte de Rusia y China impidió la adopción del proyecto de resolución presentado por Estado Unidos sobre la situación en la Franja de Gaza en el Consejo de Seguridad de la ONU.
A esta postura se sumó el voto negativo de Argelia y la abstención de Guyana ante un documento cuando menos ambiguo, en tanto no resolvía a fondo la situación de los palestinos frente a la agresión de "Israel" .
Sobre este vacío se pronunció la representante guyanesa, quien cuestionó por qué el proyecto no dirigía los reclamos directamente a la potencia ocupante, y ni siquiera dejaba claro quien comete hoy las atrocidades en Gaza y planea continuar con su ofensiva contra el sur del enclave.
Guyana: “Why then the relevant demands in the resolutions not clearly addressed to the occupying Power? Indeed if one were to read this resolution without background knowledge it would be difficult to ascertain which party to the conflict is committing atrocities in Gaza.” @UN pic.twitter.com/yU2zSXpaSN
— State of Palestine (@Palestine_UN) March 22, 2024
Por su parte, el representante adjunto de Rusia ante Naciones Unidas, Dmitry Polyansky, analizó antes del debate cómo ninguno de los borradores del documento abordó el vital asunto del alto al fuego:
"Sólo apareció una declaración filosófica sobre su importancia, siempre vinculado con la liberación de prisioneros", precisó.
A juicio del diplomático, esperar que esta versión del proyecto contemplara por primera vez el cese de la guerra en Gaza era “sólo un truco estadounidense”.
De hecho, pudiera hablarse de cómo la Casa Blanca da luz verde a una operación militar israelí en Rafah, mientras desvía la atención hacia los elogios a sus propios "esfuerzos" sobre el terreno, advirtió el ponente.
Ninguna filosofía será útil sin una demanda directa de un alto al fuego, reclamó el diplomático ruso, porque no facilitará la labor de las agencias humanitarias.
En ese contexto, llamó a no ceder ante los intentos de presentar la esperanza como algo real, pues Washington hace todo lo posible para no impedir que su más cercano aliado en el Medio Oriente abuse de los palestinos.
La respuesta estadounidense a la decisión del Consejo, y en particular al veto ruso y chino, fue simplificada luego por el portavoz de la Casa Blanca, John Kirby: "Preferirían derribar algo que nosotros escribimos simplemente porque nosotros lo escribimos".
Horas antes de la votación, fuentes diplomáticas valoraron para la red Al Mayadeen que el documento estadounidense no tenía posibilidades de ser adoptado, a partir de las observaciones de la delegación rusa sobre la falta de compromiso con un alto al fuego incondicional.
En tales circunstancias, adelantaron, Moscú podría utilizar su veto, y otros países tenderían a abstenerse ante las muchas cuestiones ambiguas planteadas por EE.UU.
Una fuente diplomática señaló que el texto “es complejo”, pero la situación humanitaria no puede tolerar la dilación, comentó el corresponsal de la red panárabe en Naciones Unidas.
El proyecto mencionaba la necesidad urgente de ampliar el flujo de ayuda humanitaria a los civiles en toda la Franja de Gaza y de levantar las barreras a su acceso, además de pedir garantías para su flujo sostenible a través de todos los puntos fronterizos necesarios, incluido el cruce de Kerem Salem y la apertura de cruces adicionales y un corredor marítimo.
Pero no detallaba quién mantiene esas barreras para impedir el ingreso de recursos esenciales y matar de hambre a la población gazatí, o cómo boicotea con masacres el paso de los convoyes hacia el norte del enclave palestino.
Cabe destacar que Estados Unidos utilizó su derecho de veto contra tres proyectos de resolución anteriores, en los cuales se pedía un alto al fuego inmediato en Gaza.